Insisten desde Brasil en apresar a "los hijos del poder" correntino

El representante legal de la familia Malvino, Juan Carlos García Dietze, informó que el fiscal Fabio Fernández de Oliveira Lyrio apeló la denegatoria del pedido de prisión preventiva ante la jueza de Garopaba, Elianne Alfredo Cardoso. Es que el 9 de enero último la jueza hizo lugar a la acusación que el fiscal formuló contra los tres correntinos pero no ordenó la detención de los sospechosos. La magistrada deberá resolver ahora si acepta la apelación y, de ser así, la girará al Supremo Tribunal de Justicia de Florianópolis, para que resuelva si finalmente se detiene o no a Eduardo Braun Billinghurst, Andrés Gallino y Horacio Pozo. "El fiscal entiende que los imputados por la muerte deben estar tutelados en Brasil, no sólo porque no se quedaron a asistir a Malvino cuando tenía convulsiones, sino porque luego de agredir a Ariel, escaparon de Brasil para evitar ser detenidos", explicó el letrado. "Además -añadió García Dietze-, el fiscal consideró que si una vez se fugaron, pueden volver a hacerlo y así evadir a la Justicia". El abogado precisó que "la presentación la concretó esta tarde en Garopaba y ahora será la jueza la que debe aceptar o no el planteo realizado". Agregó que "en caso de que sea aceptado, que como fue presentado en tiempo y forma debería hacerlo, la jueza remitirá todo el expediente al Superior Tribunal de Justicia, que será el encargado de decidir si hace lugar al planteo del fiscal". "Nosotros creemos que el planteo del fiscal es lógico, porque los tres jóvenes que tienen las imputaciones más graves huyeron en vez de auxiliar a Malvino y eso es lo que podrían volver a hacer en cualquier momento", concluyó el representante legal. Los jóvenes correntinos Braun Billinghurst, Gallino y Pozo serán indagados por la justicia federal de la provincia de Corrientes, una vez que llegue un exhorto de Brasil con el interrogatorio. El primero está acusado de tentativa de homicidio agravado por el estado de indefensión de la víctima en tanto que los otros dos están imputados de lesiones corporales seguidas de muerte. García Dietze precisó que una vez que se lleven a cabo las indagatorias, según el código procesal brasileño, la defensa tiene los tres días siguientes a la diligencia para presentar pruebas. "El fiscal ya presentó la suya y propuso a una decena de testigos", añadió el letrado. Finalmente, si la causa sigue adelante por el delito de homicidio, la jueza deberá convocar a un "jury" a los efectos de someter a los acusados a juicio y las penas podrían variar entre los 12 y los 30 años de cárcel. "En esa instancia, los acusados tienen la obligación de estar presentes en el lugar donde se desarrolle el debate", dijo García Dietze. Pero si la causa continúa con el delito de "lesión corporal seguida de muerte" -como propuso el fiscal en dos casos-, es la propia jueza la que determina la pena que puede variar entre 4 y 12 años de prisión sin necesidad de llegar a un juicio, explicaron las fuentes. Ariel Malvino murió el 19 de enero de 2006 cuando veraneaba con amigos en las playas de Ferrugem, Brasil, y fue atacado a golpes primero de puño y luego con un piedrazo cuando estaba tendido en el suelo. De acuerdo a los testigos, Gallino y Pozo golpearon a Malvino, mientras que Braun Billinghurst le arrojó una piedra sobre el cuerpo cuando el joven estaba tendido con convulsiones.