ECONOMIA INTERNACIONAL: GABRIELA CALDERON

Ecuador y la Alianza del Pacífico: privilegios versus libre comercio

Enhorabuena: el gobierno ha decidido impulsar el ingreso de Ecuador a la Alianza del Pacífico (AP)...

15 de Julio de 2019

 

Enhorabuena: el gobierno ha decidido impulsar el ingreso de Ecuador a la Alianza del Pacífico (AP). El principal asunto pendiente en la agenda para incorporar al país a este bloque consiste en negociar un acuerdo más profundo con México. De manera tal que uno de los principales beneficios del ingreso a la AP es tener un comercio más libre con México y, probablemente, luego con Australia, Canadá, Corea del Sur, Nueva Zelandia y Singapur, entre otros países.

Alianza del PacíficoDe México, Ecuador principalmente importa productos de metalmecánica, automóviles, farmacéuticos y químicos, plásticos y, para el cuidado personal y del hogar. No sorprende que, entre quienes se oponen a esta Alianza, se encuentran sindicatos que representan a empresarios que temen verse expuestos a la competencia internacional.

En un comunicado, la Cámara de la Pequeña y Mediana Industria de Pichincha (CAPEIPI), la Cámara Industria Automotriz Ecuatoriana (CINAE) y Fedimetal se manifestaron en contra de este intento de aliviar el bolsillo de los consumidores y productores ecuatorianos. Es comprensible, ya que esta medida pondría en peligro el bolsillo de sus privilegiados socios.

Estos gremios que se oponen al ingreso del país a la AP repiten la falacia de que no podemos abrirnos porque padecemos de un dólar apreciado. Este argumento hace agua, fundamentalmente porque las otras dos economías dolarizadas en Latinoamérica no acusan el mismo nivel de apreciación del tipo de cambio real que Ecuador. Dicho de otra forma, si uno cuenta con la misma moneda que El Salvador y Panamá, ¿por qué Ecuador es más caro? El problema no estaría en la moneda, sino en toda esa serie de barreras contra el comercio y contra el libre flujo de capitales que mantenemos.

Que las importaciones son malas y las exportaciones son buenas, es una idea mercantilista que se resiste a morir y, en Ecuador, se nos dice que es de particular relevancia, porque el país se encuentra dolarizado. Sin embargo, el economista Lawrence White (George Mason University) subraya que una moneda apreciada no hace inconveniente reducir los aranceles: 'Reducir los aranceles no hace que el dinero sea más o menos abundante, ni tampoco impide el proceso de ajuste de alguna manera apreciable. Los dólares saldrán de Ecuador (una balanza de pagos ‘negativa’) solo y únicamente si es que el stock actual de dólares excede la demanda de los ecuatorianos de tener dólares dado el poder adquisitivo en el presente del dólar. Las políticas ecuatorianas no pueden alterar el poder adquisitivo internacional del dólar. La demanda ecuatoriana de acumular dólares prácticamente no es afectada por el nivel de sus aranceles. Si alguna relación existe, esta sería que los aranceles más bajos aumentarían ligeramente el ingreso real del país, todo lo cual incrementaría la demanda de dinero real'.

Luego están quienes piensan que la apertura solo es buena si es recíproca. Pero algunas de las historias más exitosas de desarrollo se basaron en la apertura comercial unilateral, basta con recordar la historia reciente de Chile y la de Perú, o la no tan reciente de Hong Kong y la más antigua de Inglaterra, cuando abolió las Corn Laws en 1846.

La política comercial ecuatoriana en ningún caso debe depender de lo que otros hagan. Si otras naciones se inclinan por imponer impuestos más altos a sus ciudadanos en forma de aranceles, Ecuador no tiene por qué autoinflingirse el mismo daño.


 

Sobre Gabriela Calderón

Es Magister en Comercio y Política Internacional de la George Mason University y graduada con un título de Ciencias Políticas con concentración en Relaciones Internacionales de la York College of Pennsylvania. Se desempeña como Editora de ElCato.org. investigadora del Cato Institute y columnista de El Universo (Ecuador) desde enero del 2006. Sus artículos y papers son publicados regularmente en otros periódicos de Latinoamérica y España.