POLITICA ARGENTINA : MATIAS E. RUIZ

Las exequias de PRO: aproximación al Arte del Suicidio Político

En el epílogo, el 18 de mayo cobró forma de Domingo Negro para el subsistema PRO...

18 de May de 2025


En el epílogo, el 18 de mayo cobró forma de Domingo Negro para el subsistema PRO; Más allá del primer puesto del todavía vocero presidencial Manuel Adorni, y de la segunda posición -capturada por el radiperonista Leandro Santoro-, la jornada puso en evidencia la lejanía de una atribulada Silvia Lospennato, situada en un tercer y menesteroso escalón. No hay dolor sin agonía: en los cómputos finales, de la competencia por curules en la entrañable Legislacurra porteña surgió que el macrismo no fue capaz de liderar las preferencias en ninguna de las comunas.

Mauricio Macri y Silvia Lospennato
Por supuesto, la catástrofe nunca se nutre de la inmediatez: durante 2023, el conglomerado amarillo se había visto conmovido por una fragmentación inasequible, abriéndose de su espacio subespectros tales como la CC/ARI, el radicalismo, y aún el larretismo. Vale decir que la dolorosa debacle venía construyéndose pacientemente con el paso del tiempo. Por su parte, Horacio Antonio Larreta (ex Rodríguez) venía anticipando, tal vez no tan crípticamente, que buscaría cobrarse venganza contra Mauricio y Jorge Macri -por sobre todo, le achaca al primero ser el verdugo que complotó para demoler su carrera hacia la presidencia de la nación. El modo de poner en marcha los engranajes del mecanismo de la vendetta era competir contra el sello PRO; el predecesor de 'Blackri' cumplió con su promesa de castigo, llevándose -seguramente- las adhesiones de las Mabeles y los Raúles del distrito capitalino. Este segmento representaría a al menos un 8% del electorado local; aunque todavía debería computarse su incidencia en el casi 50% de electores que optaron por apartarse de las urnas, en tanto consideraron que dirigirse a las mismas equivalía a desperdiciar su domingo.

Para Mauricio y Jorge, lidiar favorablemente contra los ásperos desafíos de la abulia ciudadana y la fragmentación partidaria intestina cobraban forma de una faena titánica. En el ínterin, una oleada de foristas dedicó tiempo y esfuerzo en redes sociales a amplificar los incontables desperfectos de la gestión porteña de Primo Blackri -acumulación de basura en la vía pública, auge de la delincuencia, despilfarro, policías compartiendo sandwiches con presos que luego se fugarían de comisarías, et cetera. El vigor de la desesperación política se reveló en la decisión del ahora castigado jefe de gobierno de adelantar los comicios locales, creyendo que el brand PRO se impondría fácilmente a la luz del debate de temáticas distritales. Mauricio Macri no interpuso objeción alguna ante la maniobra, y el adelantamiento feneció en la prematura firma del certificado de defunción para el macrismo: la táctica de la municipalización del comicio se licuó inexorablemente, hasta quedar absorbida por un ímpetu 'nacionalizante' del mismo. En consecuencia, el ex presidente no podrá disimular su responsabilidad como Arquitecto Intelectual del Desbarajuste. Menos cuando lo que se ha estrellado es la cotización política del apellido, el cual se ha convertido hoy en un lastre. 

En cualquier caso, las tácticas erróneas tampoco son producto de la magia. Traducido: tras la progresión evidenciada en las pérdidas del plano cuantitativo, PRO acusa falencias de un orden más profundo. Por principio, su Mensaje y su narrativa se confiesan ostensiblemente deficitarias. La cerrada defensa del republicanismo y de 'las instituciones' traccionaron un eslogan repetitivo e insípido que no alcanzó para apelar a la propia base electoral. Y menos aportó la victimización lindante con la caída de 'Ficha Limpia'. Será lícito concluir, finalmente, que el macrismo extravió sin posicionamiento, mientras que su liderato y su contenido envejecían -factor que halló un correlato en su audiencia o target. Serían, estos conceptos, una materia quizás demasiado compleja para la frugal comprensión del improvisado Antoni Gutiérrez-Rubí; asesor catalán reclutado por Jorge Macri.

A la postre, el PRO ignora fehacientemente qué es lo que comunica; cómo piensan sus votantes/consumidores; y qué es exactamente aquello que defiende. Las pobres explicaciones en torno al ausentismo y las fantasías que refieren sobre nebulosas conspiraciones externas no podrán disimular el reestreno de otro Tercer Puesto.

Los suicidios políticos se construyen con tiempo, y con paciencia.


 

Sobre Matias E. Ruiz

Es Analista en Medios de Comunicación Social y Licenciado en Publicidad. Es Editor y Director de El Ojo Digital desde 2005.