ESTADOS UNIDOS: PHILIP GIRALDI

Hablando con los terroristas, en formato online

Una porción mayoritaria del público asume que un número...

02 de Marzo de 2016
Una porción mayoritaria del público asume que un número de agencias del gobierno federal estadounidense monitorean e incluso buscan infiltrar a sitios web yijadistas presentes en el Internet. Pero un programa que diera inicio en 2009, a los efectos de debatir quiénes revisan páginas web que promocionan el extremismo islámico aún debe hallar un nicho organizacional confortable. El denominado esfuerzo de 'contrapropaganda' contra el terrorismo en el Internet es encabezado desde la Casa Blanca por el consejero de seguridad nacional para comunicaciones estratégicas y por el director senior del Consejo Nacional de Seguridad para aproximación global. El alcance real sobre individuos que visitan tales sitios ha sido evaluado por la oficina del Subsecretario para Diplomacia Pública y Asuntos de Interés Público, a quien le fuera asignado el 'acercarse a, informar e influenciar a públicos extranjeros'.
 
Terrorismo onlineDadas las capas existentes en la burocracia, resulta sorpresivo que se haya logrado algo de todo aquello, pero los lingüistas del Departamento de Estado ya tenían terminada, hacia fines de 2012, una iniciativa bautizada como de 'Paz Viral' [Viral Peace], que saturó [trolled, esto es, infiltró usuarios anónimos] anónimamente a sitios web radicales, con el objeto de discutir con militantes y, en ocasiones, confundirlo. La iniciativa fue seguida en 2013 de un programa que incluyó a personal del Departamento de Estado, que procedieron a identificarse en línea como empleados del gobierno estadounidense. Estos intentaron involucrarse en la discusión refutando los puntos de vista de extremistas, pero hallaron que fueron tratados con muy poco respeto por yijadistas neófitos.
 
El programa ahora ha mutado en algo llamado 'Usuario a Usuario: Desafiando al Extremismo' [Peer to Peer: Challenging Extremism], administrado por el Departamento de Asuntos Educativos y Culturales del Departamento de Estado, a modo de proyecto conjunto con el Departamento de Seguridad Interior y Facebook. En comunión con universidades de todo el globo, el proyecto busca 'empoderar a los estudiantes para que diseñen y lideren nuevos productos y herramientas digitales que sirvan para contrarrestar todo tipo de narrativa extremista y violenta, llegando a aquellos que puedan ser susceptibles ante estos mensajes'. Produce campañas antiterroristas, empleando lo que se designa como 'contra-discurso', desde el cual refutar puntos de vista radicalizados. Los organizadores del proyecto declaman que hay poca participación del gobierno de los Estados Unidos en lo que hace a contenidos, y rechazan acusaciones al respecto de que promocionan 'una clase diferente de propaganda'. Y prefieren describirlo como 'auténtico'.
 
Facebook está proporcionando gran parte del dinero necesario para costos operacionales, así como también entrenamiento para los estudiantes en lo que hace a optimización del mensaje en línea. En su funcionamiento actual, 45 universidades compitieron por un lapso de quince semanas. Sus seis finalistas representaron a facultades de Paquistán, Suiza, Kuwait y Finlandia, más dos universidades estadounidenses, la Universidad de Arkansas y West Point—lo cual demuestra que el esfuerzo no quedó limitado solo al extranjero. En rigor, el director del programa, George Selim (del Departamento de Seguridad Interior) dijo al respecto: 'El asunto que más me preocupa tiene que ver con el reclutamiento y la radicalización de jóvenes, específicamente en los Estados Unidos'. La primera oportunidad en que se ejecutara el programa -a comienzos de 2015-, el ganador fue la Universidad del Estado de Missouri.
 
La presunción coincide con el hecho de que los estudiantes comprenden instintivamente cómo rebatir mejor ciertos discursos en las redes sociales -lo cual podría ser cierto, o no. Infortunadamente, este sincero esfuerzo para llegar a aquellos que son receptores del mensaje de radicalización podrían próximamente ser superados por un congreso inquieto, que busca presionar a las compañías que administran las redes sociales para que informen sobre 'actividades terroristas', y por candidatos de la política tales como Hillary Clinton, que llaman a tomar medidas agresivas para 'privar a los yijadistas de acceder al territorio virtual'.


Artículo original en inglés, en http://www.theamericanconservative.com/articles/talking-to-terrorists-online/ | Traducido y republicado con permiso del autor y de The American Conservative magazine (Estados Unidos)

 
Sobre Philip Giraldi

Especialista en contraterrorismo; ex oficial de inteligencia militar de la Agencia Central de Inteligencia de los Estados Unidos de América (CIA). Se desempeña como columnista en medios estadounidenses, y como Director Ejecutivo en el Council for the National Interest. Giraldi es colaborador frecuente en Unz.com, Strategic Culture Foundation y otros. En español, sus trabajos son sindicados con permiso en El Ojo Digital.