NARCOTRAFICO & ADICCIONES: CLAUDIO IZAGUIRRE

El Papa me pide que te perdone, Horacio Verbitsky

Desde el Angelus, nos ha pedido misercordia a los fieles. Entiendo que -a pesar de los sentimientos encontrados- debo perdonarte, Horacio Verbitsky. Por tus ofensas despiadadas, tus injurias arteras, tu despliegue de odio y tus homicidios editoriales.

18 de Marzo de 2013

Desde el Angelus, nos ha pedido misercordia a los fieles. Entiendo que -a pesar de los sentimientos encontrados- debo perdonarte, Horacio Verbitsky. Por tus ofensas despiadadas, tus injurias arteras, tu despliegue de odio y tus homicidios editoriales.

Te perdono, mas no olvido tu Operación Bergoglio y la trama que has urdido para presentar al Sucesor de Pedro como un genocida y un despreciable hombre de la Iglesia. Entiendo que ya te te ha llegado tu castigo, a partir del desprecio de todos los periodistas y medios de comunicación del mundo. En esta Horacio Verbitsky y Cristina Fernández de Kirchneroportunidad, tu perturbadora operación de prensa tuvo un límite inesperado, dado que el primero que salió a desmentirte fue el Premio Nobel de la Paz Adolfo Pérez Esquivel. Este te obsequió una bofetada verbal por tu impertinencia, tu falta de ética y de hombría de bien.

Te he visto en otras oportunidades hacer las mismas operaciones contra otras personas, casualmente todas ellas -incluyendo la montada contra el Papa Francisco- estuvieron y están a favor de la promoción del consumo. Recuerdo que hiciste algo similar con Alberto Lestelle, logrando su salida de SEDRONAR (Secretaría de Prevención de la Drogadicción). Más tarde, repetiste el trabajo contra la figura de Eduardo Duhalde, colgándole el cartel de narcotraficante. A posteriori, lo propio has hecho con José Ramón Granero, con Juan Alberto Yaría, y con mi persona. En mi caso, también has intentado presentarme públicamente como un traficante de drogas y como nazi y, para tal fin, has empleado a periodistas de tu entorno, rematando con tu contratapa dominical para acentuar la mentira.

Sobra decir que tu actitud deja mal parado al periodismo, haciendo trizas la credibilidad de hombres y mujeres de prensa que muchas veces se juegan la vida en un editorial. En tu ancianidad, deberás aprender a ser buena persona, humano, sensible y justo; virtudes que, claramente, has perdido al momento de juzgar a quienes no acompañan tus convicciones. Todos los seres humanos tenemos la posibilidad de cambiar, una vez tomamos conciencia de los yerros que cometemos. Ojalá, Horacio Verbitsky, utilices tu contratapa de Página 12 para pedir perdón al Vicario de Cristo; estimo que él sabrá perdonarte.

Por mi parte, también me corresponde pedir perdón a la comunidad periodística internacional por tener en mi país a Horacio Verbitsky, persona que enloda en cada frase a esta digna profesión. Asimismo, deseo fervorosamente que la Familia Católica de la Argentina pueda tener la fortaleza de llevar adelante este pedido que realizó Su Santidad Francisco: perdonarte, Verbitsky se hace difícil. Pero sé que de actitudes compleja como ésta, se ha construido la Iglesia Católica Apostólica Romana.

 

Claudio Izaguirre | Asociación Antidrogas de la República Argentina (AARA)