Al respecto de las recientes medidas monetarias del Banco de Japón
A lo largo de las últimas semanas, el Banco de Japón (Bank of Japan; BoJ) ha capturado el centro de atención...
14 de Marzo de 2024
A lo largo de las últimas semanas, el Banco de Japón (Bank of Japan; BoJ) ha capturado el centro de atención internacional en virtud de sus recientes decisiones monetarias. Acto seguido, una síntesis de las mismas:
1. Política monetaria de extrema flexibilidad. A pesar del repunte inflacionario, el BoJ ha decidido mantener inalteradas las principales medidas de su política monetaria de notoria flexibilidad, lo cual involucra un tope del 0,5% para el rendimiento de los bonos a diez años y una tasa de interés del -0,1% para los bonos de corto plazo.
2. Tasas de interés reducidas. El BoJ mantuvo las tasas de interés extremadamente bajas, comprometiéndose a fijarlas en esos niveles a criterio de respaldar el crecimiento económico nacional. La resolución sobrevino en un concierto de endurecimiento monetario llevado a cabo por numerosos bancos centrales, con el objeto de frenar el creciente repunte de los precios mayoristas y minoristas.
3. Intervención en los mercados de divisas. La principal institución financiera nipona ha dejado en claro que intervendrá en los mercados de divisas de volverse necesario, con la intención de morigerar cualquier oscilación intempestiva del yen.
4. Supresión del plan de créditos de asistencia por la pandemia. En tal sentido, el banco central japonés puso fin a la asistencia financiera de pandemia de COVID-19, reemplazando aquella iniciativa con operaciones de liquidez que apunta a la necesidad de financiamiento de parte de empresas privadas.
Desde luego que este compendio de decisiones monetarias a manos de la principal autoridad bancaria no puede desvincularse de los múltiples desafíos económicos y políticos que caracterizan al proscenio en vigencia para Tokio. Entre esos desafíos, cabrá consignar:
- La crisis fiscal que, no observando precedentes, hoy transita el Japón. Su deuda pública supera holgadamente el 260% del Producto Bruto Interno (PBI), cuadro cuya gravedad se vio acentuada a partir de los desórdenes surgidos de las políticas contra el COVID-19, y por la consiguientemente elevada inflación global.
- Recesión económica. El país ha ingresado en recesión luego de que la economía nacional acusara un proceso contractivo, el cual lleva ya dos trimestres. En consecuencia, Japón perdió su tercera posición como la economía más importante del planeta -en comparativos del PBI.
- La crisis fiscal que, no observando precedentes, hoy transita el Japón. Su deuda pública supera holgadamente el 260% del Producto Bruto Interno (PBI), cuadro cuya gravedad se vio acentuada a partir de los desórdenes surgidos de las políticas contra el COVID-19, y por la consiguientemente elevada inflación global.
- Recesión económica. El país ha ingresado en recesión luego de que la economía nacional acusara un proceso contractivo, el cual lleva ya dos trimestres. En consecuencia, Japón perdió su tercera posición como la economía más importante del planeta -en comparativos del PBI.
- Desafíos de seguridad. El Japón debe lidiar hoy con un entorno de seguridad más complejo en su consideración regional, desde el final de la Segunda Guerra Mundial. Así las cosas, el gobierno central en Tokio patrocina ahora un novedoso eje doctrinario para la defensa, el cual se condice con la reformulación de su estrategia de seguridad: habrá un rearme japonés, aunque de momento resta conocerse sus alcances.
- A la postre, el Japón hace frente hoy a un fuerte retroceso en sus cifras de natalidad; desafío demográfico que también puede explicarse en función de los altos costos de vida con los que debe lidiar su población.