Pekín telegrafía sus intenciones, con sus recientes ejercicios militares en la periferia de Taiwan

En lo que consignó un evento histórico, el 5 de abril, la presidente taiwanesa Tsai Ing-wen y Kevin McCarthy -Vocero de la Cámara de Representantes del Congreso de los EE.UU.- compartieron el encuentro de mayor alto nivel entre un mandatario de Taiwan y un funcionario estadounidense en territorio de los EE.UU..

En oportunidad de la visita de Tsai, y luego del periplo a Taiwan realizado por Nancy Pelosi -ex Vocero de la Cámara- el pasado 2 de agosto, el Partido Comunista Chino movilizó a la fuerza aérea y a la armada del Ejército Popular de Liberación (PLA), a criterio de aplicar la máxima presión contra Taiwan, llevando a cabo ejercicios militares a gran escala.

Notoriamente, esas elaboradas exhibiciones de poderío militar dicen mucho sobre las intenciones de Pekín en cualquier eventual conflicto bélico en el Estrecho de Taiwan.

La información que documenta las actividades del PLA prueban que el incremento de las agresiones en perjuicio de Taiwan se han corporizado en una réplica frecuente del Partido Comunista Chino (PCCh) ante lo que percibe como provocaciones. Reaccionando frente a la visita de Pelosi a Taiwan en el pasado verano septentrional, las incursiones de la fuerza aérea china en la Zona de Identificación de la Defensa Aérea taiwanesa, y la presencia de operaciones de la armada china se dispararon, dando lugar a lo que los expertos han denominado ya como la 'Cuarta Crisis de Taiwan'.

Al mismo tiempo, se registró un aumento en la cifra de incursiones a lo largo de la 'línea media' no oficial que divide el Estrecho de Taiwan. El 7 de agosto pasado, Taiwan detectó un número de 66 aeronaves en cercanía de su espacio aéreo durante un lapso de 24 horas, en tanto 22 aviones chinos cruzaron hacia su zona de defensa aérea. En la misma instancia, la actividad naval china alcanzó su cénit -con un total de 14 navíos operando en la periferia de Taiwan.

Más aún, desde el 4 al 7 de agosto, el PLA estableció siete 'zonas para ejercicios' que rodearon a Taiwan desde una serie de direcciones diferentes, localizadas dentro de su cuadrante de defensa aérea. Adicionalmente, el PLA condujo ejercicios con empleo de munición real en aquellas zonas; utilizó entonces: misiles balísticos convencionales, cohetes de largo alcance, y misiles de corto alcance del tipo DF-15B disparados desde la China continental.

Algunos de estos vectores volaron sobre Taiwan, mientras que otros aterrizaron en aguas cercanas a la isla-nación, y aún dentro de las doscientas millas náuticas que integran la Zona Económica Exclusiva del Japón.

Todo lo cual tuvo lugar mediando ninguna advertencia, lo cual consigna un nivel de preparación tendiente a ejecutar operaciones aéreas, navales y con misiles (todas ellas coordinadas) en torno a Taiwan -y pensadas como acción militar crítico, para la eventualidad en que Pekín emita la orden de atacar.

Siguiendo un patrón similar, en réplica a la visita de Tsai a California -para reunirse con McCarthy, el PLA condujo ejercicios militares a gran escala en la periferia de Taiwan. En razón de la preocupación sobre la proximidad de elecciones en Taiwan y la esperable respuesta del PLA, la reunión de Tsai se llevó a cabo adrede en los Estados Unidos, antes que en Taipei.

Se evaluó entonces que esa decisión hubiese desactivado las tensiones, pero la reacción del PCCh no se modificó mayormente.

No obstante, el PLA se involucró en una serie de operaciones militares de carácter provocador. El 8 de abril, China lanzó oficialmente su primer entrenamiento en el Pacífico Occidental -los ejercicios 'Espada Conjunta'; en inglés, Joint Sword- del año. El 10 de abril, más de 90 aeronaves chinas fueron detectadas en cercanías del espacio aéreo taiwanés, en tanto 54 cruzaron la línea media que separa a Taiwan del continente.

A lo largo del curso de tres días de ejercicios, Taiwan detectó un total de 232 aeronaves de combate chinas en cercanía de su espacio aéreo, mientras que 134 ingresaron efectivamente en su zona de defensa aérea.

Esto se compara con las 314 aeronaves militares chinas detectadas por radar, y con las 167 incursiones en la zona de defensa aérea que tuvieron lugar en un período de siete días posterior al periplo de Pelosi.

En otras palabras, la cifra de incursiones fue casi la misma en menos de la mitad del tiempo. De igual modo, la actividad naval china en torno a Taiwan se disparó luego del cónclave entre Tsai y McCarthy -y la armada china continuó con su entrenamiento de combate en la periferia de Taiwan luego de que los ejercicios finalizaron oficialmente.

Mientras que el PLA lanzó misiles durante la visita de Pelosi a Taiwan, no lanzó misiles durante la realización de los ejercicios 'Espada Conjunta' que siguieron a la visita de Tsai para reunirse con McCarthy. En lugar de ello, el PLA dio a conocer un videoclip con animaciones de lanzamiento de misiles contra Taiwan durante la realización de los ejercicios 'Espada Conjunta', revelando que China en efecto ha identificado objetivos en Taiwan; los cuales destruirá, de ejecutarse una invasión, junto con la eliminación de objetivos 'extranjeros' localizados en el área.   

Más todavía, las fuerzas armadas taiwanesas detectaron -con frecuencia- el despliegue de bombarderos con capacidad nuclear de la clase H-6 cerca de su espacio aéreo, en tanto algunos cruzaron hacia la zona de defensa aérea de Taiwan.

Dicho esto, aquellos bombarderos estratégicos parecieran operar no vinculados directamente a demostraciones públicas de fuerza. En ese punto, la cifra más alta de bombarderos H-6 tuvo lugar el 12 de diciembre, siendo detectados 18 de ellos -y observándose también otros tipos de actividad aérea y naval.

Complementariamente, y luego de los cónclaves de Pelosi y McCarthy junto a Tsai, el empleo de bombarderos H-6 fue mínimo -con apenas dos de ellos siendo detectados.

Aún cuando las recientes manifestaciones de poderío militar en torno a Taiwan se exhibieron menos complejas que aquellas registradas durante la visita de Pelosi, las mismas fueron escalando.

Fue notable que, el 5 de abril, la guardia costera china iniciara una 'operación de patrullaje e inspección conjunta' a lo largo de la ruta marítima comercial Pingtan-Taiwan. A pesar del anuncio, existe poca información disponible para certificar que tales inspecciones ocurrieron realmente.

Aún cuando los ejercicios 'Espada Conjunta' no involucraron el lanzamiento de misiles en cercanía de aguas de Taiwan, y tampoco sobrevolaron la isla, la Televisión Central China informó, durante el segundo día de ejercicios, que numerosas ramas de las fuerzas armadas bajo tutela del Comando del Teatro Oriental del PLA llevaron a cabo ataques de precisión simulados sobre objetivos estratégicos en y cerca de Taiwan.

Fue aquélla la primera oportunidad que un informe público reveló ataques simulados contra objetivos, previamente determinados por el PLA.

Ello podría indicar que China podría estar planificando una serie de ejercicios más amplios y de carácter más agresivo próximamente, con el presidente Xi Jinping ordenando al PLA 'fortalecer el entrenamiento militar, orientado hacia el combate real'.

Esta maniobra, tendiente a la realización de entrenamientos más realistas, parecen remitir a una práctica de 'poner a la isla bajo cerrojo'. Más todavía, Xi llevó a cabo una visita al Comando del Teatro Sur el 11 de abril pasado, en donde probablemente este verano se desarrollen esos ejercicios de magnitud.

Las visitas políticas recientes -de alta sensibilidad- tuvieron lugar en una instancia oportuna desde el plano operacional para el PLA -esto es, contando las fuerzas armadas chinas con condiciones climáticas favorables, y mediando el fin de ciclo de los períodos para realizar ejercicios militares estándar.

No obstante ello, Taiwan y los Estados Unidos de América deberán alzar la guardia ante la próxima serie de ejercicios militares chinos que tutela el PLA -dado el incrementalismo evidenciado en la retórica hostil del Partido Comunista Chino, y la reciente visita de Xi al Comando del Teatro Sur.

Artículo original, en inglés. Más información en infografías, en el link original.


-Brent Sadler es senior fellow para guerra naval y tecnología de avanzada en el think tank estadounidense The Heritage Foundation, en Washington, D.C.
-Shalom Victor es analista en política pública, y colaboradora frecuente del sitio web The Daily Signal.