La Administración Obama, empantanada en el dilema Obamacare

¿Recuerda Usted el embargo de fondos? Nos referimos a aquellos recortes presupuestarios que entraron en vigor debido a que el congreso estadounidense no realizó una verdadera labor presupuestaria hace un par de años. Pues, ahora está afectando a Obamacare.
 

Ambas leyes han estado acechando durante un tiempo, pero la Administración Obama no hecho nada para prepararse para la colisión.
 

Los recortes están afectando a un conjunto de subsidios que se suponía que ayudarían a pagar las franquicias y los copagos de los ciudadanos estadounidenses con menos ingresos que tuvieran su cobertura dentro de Obamacare. Un responsable del gobierno de Barack Obama prometió que habría un plan antes de que el 1 de octubre dieran comienzo los sistemas especializados de Obamacare, pero nada sucedió.
 

Y entonces, ¿ahora qué? El experto de la Fundación Heritage, Chris Jacobs, comenta en el Wall Street Journal:
 

Existen dos resultados posibles. El primero es que las personas que realmente hayan conseguido inscribirse en un seguro médico subvencionado encontrarán que han sido engañados en cuanto a sus copagos y franquicias. Puede que las familias que actualmente piensan que su plan las cargará con un copago de $20 por sus visitas al médico en realidad afronten un cargo de $25 cuando dé inicio el embargo de fondos. Y puede que las personas que ahora creen que se enfrentan a unos costos máximos para sus bolsillos de $2,000 acaben pagando algunos cientos de dólares más.
 

Y, ¿cuál es la otra opción? Permanecer en las compañías de seguros a pesar de los recortes, y decirles que se las arreglen con ellos (eso supondría alrededor de $286 millones a partir del próximo mes de septiembre).
 

Como comenta Jacobs, tampoco pinta bien para la Administración:
 

La Administración puede decirle al pueblo americano que el “buen acuerdo” que prometió el presidente Obama no es tan bueno como pensaban, que quienes pasaron horas y días para inscribirse en HealthCare.gov compraron un cobertura que será más cara de lo anunciado... O bien puede intentar obligar a las compañías de seguros a que soporten todos los costos de las reducciones debidas al embargo de fondos, por lo que pronto las veríamos abandonar totalmente los sistemas especializados.
 

No transcurre ni un solo día sin que nos libremos de otra historia acerca del desmoronamiento de Obamacare. Y es que, simplemente, no funciona tal y como se diseñó.