SOCIEDAD - POR RICARDO WHITE, PARA EL OJO DIGITAL: COMANDO MUERE POR FALLA EN SU PARACAIDAS EN MIRAMAR

¿Y ahora dónde enterrará la Ministro de Defensa Nilda Garré al comando de la Marina Federico Alexis Cacciabue?

La Ministro de Defensa Nilda Garré continúa sumando adhesiones, en lo que a responsabilidades penales se refiere. El fallecimiento del comando especial Federico Cacciabue, de 36 años, al fallar su paracaídas, se anota en el frondoso prontuario de la señora.

21 de Julio de 2010
El martes 18 de noviembre falleció el buzo táctico y comando especializado de la Armada, Federico Alexis Cacciabue. Tenía 36 años de edad y tres hijos. El deceso se produjo durante una práctica que tuvo lugar en la localidad costera de Miramar, y hasta aquí todo parece indicar que el motivo fue el fallo de su equipo de paracaidismo. El marino se desempeñaba regularmente en la Base Naval de Mar del Plata, y se hallaba entre los primeros de su clase. Oportunamente, fue convocado para tomar parte en los operativos de seguridad de la tristemente célebre Cumbre de las Américas de Mar del Plata, e incluso participó entrenando a fuerzas especiales de la Policía Bonaerense - Grupo Halcón- y al Grupo Especial de Operaciones Federales, conocido como GEO, ex GEOF. El comunicado oficial del deceso de Cacciabue, liberado por el Ministerio de Defensa, no adjudica responsabilidad alguna al marino, lo cual contribuye aún más al misterio. Aunque, de acuerdo al padre de Federico, Miguel Cacciabue -que se desempeñó durante más de tres décadas en Prefectura Naval-, incómodas circunstancias rodearon al episodio. En el periódico La Capital, de la ciudad de Mar del Plata, Cacciabue menciona que, días luego del deceso de su hijo, recibió un sinnúmero de llamados telefónicos en donde se le sugería no hacer demasiada alharaca con el episodio. "Deje las cosas como están", le habrían dicho. A partir de lo ocurrido, Cacciabue inició una senda que lo llevó a exponer el fallecimiento de su hijo en los principales medios de la Costa, entre ellos el periódico La Capital, de Mar del Plata. Sin embargo, el diario bajo mención trató la noticia descalificando sutilmente los reclamos del atribulado padre, dejando dudas acerca de la posibilidad de que el paracaídas de Federico no se hubiera abierto. El dato, de todas maneras, no sorprende, pues La Capital pertenece a la familia Aldrey Iglesias. Este grupo monopólico maneja las comunicaciones en Mar del Plata y sus zonas de influencia a voluntad, conservando el control de los diarios La Prensa y La Capital del Mar del Plata, las emisoras Radio Atlántica y LU9 Mar del Plata y el canal Cable Dos La Capital. Sin mencionar que tienen negociados importantes en el negocio hotelero marplatense junto con el Gobernador Daniel Scioli y el supuestamente independiente Gustavo Pulti, intendente de "La Feliz". La información aporta al tema bajo tratamiento pues esta gente -como Ud., lector, se imaginará- está aliada al kirchnerismo desde la llegada del esposo de la Señora Presidente Cristina Fernández. De todos modos, vale la pena preguntarse de dónde han procedido los llamados intimidatorios en perjuicio de la familia del comando fallecido. Menciona su padre, Miguel Cacciabue, que regularmente su hijo le comentaba acerca del estado paupérrimo de los equipos y materiales a disposición de la fuerza en la Base Naval, y de cómo todo tendía a romperse. Hablando puntualmente de los equipos de paracaidismo, enteróse el Sr. Cacciabue que reciclar incontables veces los paracaídas es una práctica corriente en las Fuerzas Armadas. Habida cuenta de la responsabilidad de la mismísima Ministro de Defensa Nilda Garré en este y tantos otros casos en donde hombres de la milicia pierden la vida por causa de utilización de equipamiento vencido o en mal estado. La Ministro Garré está comprometida hasta el cansancio en una infinidad de temas, que van desde el fallecimiento de pilotos de la Fuerza Aérea por falta de mantenimiento de vetustas aeronaves hasta accidentes entre personal del Ejército Argentino que solo cuenta con munición antigua para sus prácticas. Luego tuvo lugar el caso de los fusiles FAL desarmados que Garré firmó para remitir al exterior a unos pocos pesos por tonelada. Armamento que fácilmente podría caer en manos de terroristas de la región o del exterior. Está el caso de los militares argentinos que, con pleno conocimiento del Ministerio, han vendido fusiles del Ejército a habitantes de las villas de Río de Janeiro. Y, por si esto fuera poco, también se conoce de numerosos casos en donde funcionarios públicos "amigos" del poder se divierten paseando en los submarinos y naves de guerra de Puerto Belgrano, al sur de la provincia de Buenos Aires. Ahora, Nilda Garré también puede anotarse una nueva víctima : el comando anfibio y segundo suboficial Federico Alexis Cacciabue. Y, sin lugar a dudas, se sonríe plácidamente mientras lee esta nota. Por Ricardo White, para El Ojo Digital Sociedad. Email : elojodigital.com -arroba- gmail.com.
Por Ricardo White, para El Ojo Digital Sociedad