INTERNACIONALES: PATTY JANE-GELLER

Por qué la prueba de un misil hipersónico -realizada por China- es importante

El matutino británico Financial Times informó recientemente que China había logrado...

02 de Noviembre de 2021

 

El matutino británico Financial Times informó recientemente que China había logrado combinar dos tecnologías misilísticas avanzadas, en la prueba de una novedosa capacidad nuclear.

China, Pueblo, Estrategia china, Estrategia nuclear, Vehículo hipersónicoEl ensayo fue parte de un denominado Sistema de Bombardeo Orbital Fraccionado, el cual es lanzado al espacio y puede orbitar el globo previo a liberar un misil que alcance, finalmente, su objetivo. El sistema FOBS, según se ha informado, fue armado con un vehículo hipersónico de capacidad nuclear, el cual puede realizar sobrevuelos a baja altura y maniobrar hacia su objetivo una vez liberado desde el espacio.


Tres conceptos centrales sobre el misil hipersónico chino 


La sofisticada prueba confirma tres cuestiones de importancia crítica.

En primer lugar, el misil hipersónico orbital corrobora lo que ya era sabido, esto es, que la amenaza nuclear china apenas ha comenzado a incrementar su magnitud. Irónicamente, los defensores del desarme nuclear alguna vez supieron tener a China como modelo, elogiando la postura de 'disuasión mínima' de Pekín y su política de no ser el primer beligerante que utilice armamento nuclear. 

A comienzos del presente año, Adam Smith (Demócrata, por Washington), a la sazón presidente del Comité de Servicios Armados de la Cámara de Representantes en el Congreso de los Estados Unidos, sugirió abiertamente que la Administración Biden analice 'cómo los EE.UU. pueden consolidar con un nivel de disuasión necesario, utilizando menos dinero, como lo hizo China'.

Sin embargo y claramente, China se deshizo de esa política ya años atrás.

A lo largo de los últimos meses, se ha conocido que China dio inicio a la construcción de centenares de silos de misiles de largo alcance, los cuales potencialmente podrían almacenar misiles armados con ojivas múltiples. De acuerdo a funcionarios de carrera en los EE.UU. las fuerzas misilísticas chinas próximamente podrían exceder a las de Rusia, en tanto la superioridad nuclear de Pekín frente a los Estados Unidos asoma hoy como una posibilidad concreta.

En segundo término, la citada prueba nos recuerda que China ha ampliado de manera coherente sus fuerzas nucleares, a pesar de años de retroceso estadounidense en el desarrollo de capacidades estratégicas ofensivas y defensivas.

En tal sentido, la afirmación que reza que el sistema chino FOBS ha tenido lugar como réplica ante el desarrollo americano de un sistema con 44 interceptores, la misma es contrafáctica.

Estados Unidos sólo ha realizado mejoras mínimas a sus sistemas misilísticos de índole defensiva a lo largo de la última década; la capacidad de esos vectores, relativamente estable, no puede explicar el rápido cambio en la postura china.

De igual modo, los EE.UU. no han consolidado avance alguno en el desarrollo de armas nucleares de carácter ofensivo que pudieren haber motivado a una postura nuclear expansionista de Pekín. Con el tiempo, las fuerzas nucleares estadounidenses han envejecido, mientras que los planes americanos de modernización sólo reemplazaría el stock ya existente, en proporción de uno a uno.

De tal suerte que, no es como se ha afirmado. Antes, bien; una explicación más plausible consigna que las ambiciones nucleares chinas sintonizan con el objetivo del presidente Xi Jinping de transformar a la República Popular China en una potencia de primer orden, hacia el año 2050.

Tercero, y lo que acaso sea más significativo, un sistema de armamento orbital como el referido podría obsequiar a China ventajas militares específicas, particularmente porque podría evitar a los sistemas estadounidenses de alerta temprana.

Mientras que los EE.UU. pueden detectar la mayoría de los lanzamientos de grandes cohetes y misiles, bien podría no estar en capacidad de detectar un Sistema de Bombardeo Orbital Fraccionado considerando su órbita; no pudiendo siquiera determinar, quizás, si un sistema orbital chino está dotado de armas nucleares.

De ser operado con eficiencia, el orbitar un arma nuclear a través del espacio podría capacitar a China para lanzar ese arma desde cualquier parte del mundo, explotando los fallos en los sistemas de alerta temprana am ericanos. Una vez lanzado, un vehículo nuclear hipersónico puede volar a baja altitud a velocidades supersónicas y maniobrar a través de la atmósfera -evitando a los radares espaciales y terrestres de los EE.UU. y, en consecuencia, reduciendo los tiempos de alerta temprana.

Algunos han afirmado que el sistema hipersónico orbital en rigor no modifica el nivel de la amenaza, dado que China ya puede atacar al territorio continental de los Estados Unidos con su arsenal existente. No obstante, la diferencia central es que, en efecto, los EE.UU. pueden detectar esos misiles ya existentes, y ello serviría para organizar una réplica en forma de ataques previo a que los objetivos sean alcanzados por cabezas nucleares. Este concepto, que remite a la disuasión nuclear garantizada, es fundamental en la disuasión.

En cualquier caso, los sistemas y radares con capacidad para eludir cualquier mecanismo de alerta temprana aumentan los prospectos de un ataque sorpresa fulminante, el cual paralice la capacidad de la nación a la hora de responder. Este efecto compromete seriamente al núcleo de la estrategia de disuasión y, por la misma razón, tales sistemas han sido categorizados como desestabilizadores.

Toda vez que una prueba no significa que China necesariamente se haya abazado a una doctrina de ataque nuclear preventivo, el desarrollo de tales capacidades -las cuales podrían favorecer esa alternativa- debería consignar una preocupación de primer nivel.

Más aún, mientras que algunos creen que el citado sistema hipersónico no le ofrece mayores ventajas a Pekín, la dedicación de tiempo y recursos hacia su desarrollo confirma que Pekín no ve las cosas de esa manera.

Conforme la senadora Deb Fischer (Republicana, por Nebraska) y miembro senior del subcomité del Senado que entiende sobre fuerzas estratégicas, lo cuestionara hace poco: '¿Por qué China buscaría contar con un sistema como éste? Encuentro difícil de creer que China, o cualquier otro país, desee invertir en un sistema que entienda pueda no tener valor. Pero, si ellos se dedicaran a construir nuevos sistemas con capacidad nuclear sin importar si verdaderamente ello aumenta las capacidades del país, pues eso no sería algo con lo cual quedarnos tranquilos. Como sea que Usted se proponga evaluarlo, es motivo de genuina preocupación'.

It’s time to stop giving China excuses and start viewing the threat with clear eyes. As the Biden administration continues its ongoing nuclear posture review, it should reject proposals to reduce the role of nuclear weapons. Instead, it should focus on accounting for advanced threats to ensure the U.S. can maintain strong nuclear deterrence.



Artículo original, en inglés