Daniel Scioli y los inundados: auribus teneo lupum (*)

* Auribus teneo lupum (Tomar al lobo por sus orejas), supo ser un proverbio de uso popular en la Antigua Roma. Extraído de la obra Formio (circa 161 Antes de Cristo), del dramaturgo romano Terencio, es el equivalente de 'Agarrar al tigre por su cola' o 'Agarrar al toro por las astas'; remite a una situación insostenible, en particular en la que, sin importar el camino que se tome para resolverla, cualesquiera de los caminos preferidos será igualmente riesgoso.

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El candidato presidencial por el Frente para la Victoria, Daniel Osvaldo Scioli, transita por estas horas un tempestuoso mar de mala fortuna -condimentado, desde luego, con una soterrada dosis de inoperancia. Su reciente jugarreta de apostar en pos de la candidatura de Julián Domínguez en la interna peronista de la Provincia de Buenos Aires no arrojó los resultados esperados, por cuanto Aníbal Fernández pudo sortear los obstáculos e imponerse sobre su rival. Así las cosas, el atribulado pero confiado Jefe de Gabinete compartirá escenario y bambalinas de campaña con el partenaire comercial de Karina Rabolini, para infortunio de éste último.

En las postrimerías del fin de semana de las PASO, el periplo del Jefe Naranja hacia el tórrido verano italiano terminaría envolviéndolo en un escenario de resolución imposible -a tal efecto, vale la frase latina que encabeza el presente texto.

Habrá que decir que el Gobernador de la Provincia de Buenos Aires jamás hizo frente a la áspera crítica que suele venir de la mano de la alta exposición en la arena política. Hasta la instancia actual al menos, Scioli se las había arreglado para disimular los aspectos más cuestionables de su vaporosa gestión, a caballo de la intoxicante complacencia de un periodismo acrítico.

Con todo, el traslado a Roma via Alitalia -en primera clase- empujó al Gobernador hacia el miasma de un problema retórico de facturación innecesaria. Daniel Scioli mintió cuando, inicialmente, intentó justificar su viaje: el matutino La Nación se ocupó de referir que ni el Vaticano ni la sede del gobierno italiano estaban notificados de su visita. A posteriori, Scioli intentó argumentar la necesidad de un tratamiento médico por 'estrés' surgido de la campaña presidencial, cuando ya en tiempos pretéritos sostenía que era Francia el destino seleccionado para lidiar con su dolencia. Aún cuando esta versión no faltare a la verdad, la opinión ciudadana ya ha comenzado a extraer conclusiones sobradamente negativas respecto de un dirigente que, necesitado de asistencia médica, entiende que debe recorrer más de diez mil kilómetros vía aérea -en lugar de remitirse a un nosocomio local. De aquí que, ya con recurrencia, analistas políticos del orden local se pregunten por las razones ocultas que empujaron al Gobernador a abandonar a los inundados de su provincia a su suerte. Esos requerimientos se multiplican, y tienen ahora por objetivo indagar sobre el ingeniero italiano Fabio Buzzi, otrora copiloto de Scioli en 'La Gran Argentina'. El rol del misterioso Buzzi, según se afirma en determinados círculos, saldrá próximamente a la luz. Primera lección para el taciturno aspirante del FPV: no existe información que pueda ocultarse por siempre; esta eventualidad demanda, cuando menos, la temprana elaboración de un Plan B.

Complementariamente, la reverberante ola de indignación que hoy se abate sobre la figura de Daniel Scioli gana ímpetu de la mano de la ausencia de obras de infraestructura en el distrito que declama gobernar - y el inacabable padecimiento de los miles de inundados de la Provincia así lo certifica. El problema es que los voceros del gobierno provincial, acaso presas del pánico, no parecen acudir en ayuda de su jefe a la hora de brindar explicaciones: la pretendida contundencia de la respuesta pasa por ofrecimientos de microcréditos para los damnificados -empréstitos que éstos nunca podrán pagar, conforme lo han perdido todo- o de exenciones impositivas -que, a la luz del sufrimiento, lindan peligrosamente con el insulto-. En las réplicas desde La Plata, subsiste un reconocimiento tácito (que Felipe Solá, o Mauricio Macri y María Eugenia Vidal se esmeran en explicitar con presteza), a saber, que la Provincia jamás ejecutó las obras necesarias, en toda una década. Desde luego que el panorama no aporta paños fríos: con el correr de las horas, los medios de comunicación han revelado detalles sobre fondos desaparecidos, o que fueron a parar a la construcción de stands para Tecnópolis.

A la hora del quebranto, Daniel Osvaldo Scioli deberá banderillear con una variable potencialmente destructiva para su agenda: la Presidente Cristina Kirchner está intentando impedir que su candidato se presente al debate programado por la señal Todo Noticias (TN). En rigor, la jefe de Estado teme que la presentación televisiva de su no querido protegé termine dinamitándola también a ella porque, ¿cómo respondería Scioli a acusaciones directas de corruptela que bordeen, por ejemplo, la intromisión judicial de Nación y de Provincia con miras a empantanar el Caso Nisman? ¿Qué dirá el Gobernador si, de súbito, es inquirido con aplomo sobre la medulosa trama de lavado de activos que hiere a Lázaro Báez y a Máximo Kirchner en los prolegómenos de Hotesur? ¿Heredó Scioli los servicios del recientemente eyectado General César Milani? ¿Qué bondades aporta este último a la Ola Naranja?

En segundo término -y siempre de cara al debate-, será momento de apuntar que Daniel Scioli no teme tanto a los eventuales embates de Mauricio Macri -su amigo-, sino a los que pudiere proferir el afilado paladar de Sergio Massa, cuyo discurso ahora se torna más aguerrido. Después de todo, el ex intendente de Tigre y el Gobernador en [supuesto] ejercicio se disputarán la misma franja de votos, de aquí a octubre. No vaya a ser que, de aquí a poco, comience a hablarse de la probabilidad de ocurrencia de un triple empate, previo al balotaje.


Lectura complementaria

- Del autor: Daniel Scioli y Karina Rabolini: negocios riesgosos, en formato offshore. 4 de enero de 2015, en http://www.elojodigital.com/contenido/14010-daniel-scioli-y-karina-rabolini-negocios-riesgosos-en-formato-offshore
- Del autor: Daniel Scioli, el Ser y la Nada. 23 de junio de 2015, en http://www.elojodigital.com/contenido/14408-daniel-scioli-el-ser-y-la-nada