NARCOTRAFICO & ADICCIONES: POR CLAUDIO IZAGUIRRE

La marihuana produce enfermedades psiquiátricas irreversibles

La Asociación Antidrogas de la República Argentina ha recibido un informe desde España, en donde se da cuenta que dos de cada tres ingresos psiquiátricos por Psicosis corresponden a consumidores de cannabis, de acuerdo a la doctora Ana González Pinto, jefe clínico de Psiquiatría del Hospital Universitario de Álava.

15 de May de 2012

La Asociación Antidrogas de la República Argentina ha recibido un informe desde España, en donde se da cuenta que dos de cada tres ingresos psiquiátricos por Psicosis corresponden a consumidores de cannabis, de acuerdo a la doctora Ana González Pinto, jefe clínico de Psiquiatría del Hospital Universitario de Álava.

La noticia se dio en el marco de una conferencia sobre los efectos del cannabis en la salud mental encuadrada en el ciclo Encuentros con la Salud, organizada por la Academia de Ciencias Médicas de Bilbao y la Facultad de medicina y Odontología de la Universidad del País Vasco.

Dra. Ana González PintoEn la disertación, la experta ha puesto de manifiesto que “la edad media de ingreso de los consumidores de cannabis con cuadros psicóticos es de 23 años. Sin embargo, tenemos personas de todas las edades, incluidos menores de edad que ya han tenido que acudir a los servicios de salud mental de Osakidetza”.

De hecho, “muchos de los debuts de la enfermedad se producen con la manifestación brusca de un episodio de psicosis, sin que haya síntomas previos. No obstante, cuando un joven consume cannabis todos los días o siempre que tiene que desarrollar alguna actividad con cierta responsabilidad o que no le gusta, puede ser una señal para prestar atención a ese caso”.

La doctora González Pinto, una de las mayores expertas de España en lo concerniente a la relación entre el cannabis y la salud mental, ha afirmado en la conferencia de  Bilbao que “las incautaciones de cannabis realizadas últimamente están poniendo de manifiesto que la selección de variedades de esta planta para su cultivo y consumo se orienta en muchos casos a aumentar la proporción de su sustancia psicoactiva, el tetrahidrocannabinol (THC), por lo que los daños a la salud mental son también mayores, con más riesgo de tener un cuadro psicótico”.

Según ha explicado, existe una sólida evidencia científica que demuestra la relación entre el consumo de cannabis y el aumento del riesgo de sufrir psicosis en población joven, así como un aumento de problemas cognitivos como unos menores niveles de atención, concentración y memoria.

La jefe clínico de Psiquiatría del Hospital Universitario de Álava ha recalcado que “a mayor consumo de cannabis y durante mayor tiempo, más perjudiciales son sus efectos para la salud mental”. Sin embargo, ha matizado que si se deja el consumo, se pueden revertir los síntomas, aunque se tarda más tiempo”.

Esta reversibilidad no es siempre posible para los pacientes que con cuadros psicóticos a causa del cannabis. “Los consumidores de cannabis con cuadros psicóticos, debido a su problema de salud mental, han de ser tratados como los pacientes con esquizofrenia, con el empleo de fármacos antipsicóticos y, en algunos casos, ingresos hospitalarios”. Asimismo, “algunos de los pacientes se curan, con la ayuda del abandono del consumo de cannabis y el tratamiento de los servicios de salud mental; sin embargo, no todos los pacientes lo logran, y muchos de ellos deben sufrir estas secuelas de por vida”.

Entre los síntomas de la psicosis se encuentran “las alucinaciones, delirios, dificultades para desarrollar ciertos movimientos, ansiedad marcada, etc. Cuanto más temprana es la edad de inicio en el consumo de cannabis, más temprano es el debut de cuadros psicóticos”, ha apostillado, recordando igualmente que la edad media de inicio en el consumo de cannabis en España “se sitúa en torno a los 14 años”.

La doctora González-Pinto ha hecho hincapié en “la importancia de dar una información completa y veraz a la juventud. Muchas veces los jóvenes se quedan sólo con la percepción de que el cannabis es una droga blanda, que relaja y que se consume de forma recreativa. Pero no ven la otra cara de la realidad, que es la de que hay muchas personas que padecen trastornos de salud mental a causa del consumo de cannabis y que, en los peores casos, sufren trastornos psicóticos que, a pesar del tratamiento, no se curan”.

Por Claudio Izaguirre, Asociación Antidrogas de la República Argentina