ECONOMIA: ERIC NESICH

Hacia la muerte del Peso Argentino

Tal como lo conocimos en 1991 con la caída del Austral y su nacimiento en los albores del gobierno...

08 de Octubre de 2023

 

Tal como lo conocimos en 1991 con la caída del Austral y su nacimiento en los albores del gobierno de Carlos Saúl Menem, el peso argentino ha muerto definitivamente en 2023.

Sergio Massa y Matías Tombolini, Muerte del Peso argentino, Corrupción, Fracaso de Sergio Massa, Frente Renovador, Devaluación, Hiperinflación
En rigor, el proceso devaluatorio de nuestra moneda frente al dólar de los Estados Unidos de América dio inicio hacia 2018, cuando se cobró empuje la espiralización alcista -de los 18 pesos por dólar a los mil, más temprano que tarde. Haciendo honor al análisis objetivo, las responsabilidades deberán repartirse entre las dos últimas gestiones: la del ex presidente Mauricio Macri y, tiempo después, habrán de adjudicarse al consorcio de conveniencia integrado por el eje Alberto Fernández-Cristina Kirchner-Sergio Massa,.
 
Massa asume el ministerio de Economía (sin ser economista, y apenas portando un título de abogado recién obtenido durante 2013), convirtiéndose en el primer funcionario de Hacienda no especializado en estudios económicos desde el inicio de la democracia, en 1983. Su gestión tuvo como eje tratar de contener al dólar en todos sus niveles, pero el fracaso lo acompañó casi desde arribar a la función encomendada. Tras unos breves meses de calma en 2022, asumió con un dólar de 346 pesos tras la salida de su predecesor, Martín Guzmán.
 
Desde los 346 pesos de agosto de 2022 hasta los casi 900 pesos actuales, la moneda nacional se devaluó en un 160%, en apenas poco más de un año bajo la gestión del tigrense. Precisamente, ese porcentual es el mismo que acusó la devaluación de la moneda nacional en el año 1975, en el transcurso del tristemente célebre 'Rodrigazo' del gobierno de Isabel Martínez de Perón y su ministro Celestino Rodrigo. A favor de Sergio Massa, hoy podría argumentarse que le llevó un año alcanzar esa triste meta del 160%, mientras que a Rodrigo y su equipo -que también integraba Ricardo Zinn-, el logro les llevó apenas una jornada.
 
Cabrá repasar, acto seguido, las principales características de aquel Rodrigazo:
 
-Ajuste de precios y tarifas. Se determinaron sustanciales incrementos en los precios de los combustibles, la electricidad, el gas y en las tarifas de otros servicios públicos, lo que desencadenó un voraz proceso inflacionario y un serio impacto en el costo de vida asumido por la población. 
-Devaluación del peso. Se implementó una devaluación del 160% de la moneda, esto es, se oficializó una significativa depreciación de la moneda frente al dólar de los EE.UU. Tal como sucede por estas horas, rápidamente el poder adquisitivo de los asalariados fue pulverizado.
-Eliminación de subsidios. Se eliminaron los subsidios a diversos sectores de la economía, conduciendo la medida a un aumento súbito y desproporcionado en los precios de los alimentos y de otros productos básicos.
-Fuerte incremento de las tasas de interés. Se aplicaron tasas de interés elevadas a efectos de contener la inflación, lo que dio lugar a una seria contracción en la inversión y del crecimiento económico (determinación cuasi idéntica al 118% del tipo de interés hoy vigente).
 
Como patrón común al evento, las reservas internacionales se contrajeron bruscamente antes de la devaluación, como también hoy se evidencia en el concierto i.
 

La actualidad
 
El leit-motiv de Sergio Massa y de su socios en el oficialismo (Unión por la Patria) se enfoca en la responsabilidad del Fondo Monetario Internacional (FMI) frente a la devaluación en agosto pasado, horas después de finiquitadas las elecciones primarias. Verdad a medias, por cuanto el espacio político del Ministro de Economía y candidato no asume responsabilidad alguna por las devaluaciones previas, maquilladas con incorporación de impuestos al tipo de cambio (como el Impuesto PAIS, incorporación de Ganancias, y demás etcéteras), todo con el objetivo de evitar recurrir al término 'devaluación', que hace las veces de imán para la mala prensa. Tras iniciarse el proceso devaluatorio, la depreciación en el valor de la unidad de cuenta continuí durante los meses posteriores.
 
Tal como lo certifica el peso de la evidencia, las devaluaciones en la historia reciente han compartido un legado de procesos inflacionarios que excedieron el mero acomodamiento de precios relativos que postulan los teóricos de la llamada devaluación expansiva (al decir del FMI). Esto es, que se alientan las devaluaciones para lograr 'competitividad en el tipo de cambio'. A continuación, tiene lugar lo que en terminología económica se denomina pass-through: el indetenible traslado a precios de la devaluación de la moneda de curso legal. En otras palabras, 'Inflación Cambiaria'.

En la práctica, el oficialismo se ha mostrado genuinamente incapaz de detener el proceso inflacionista-cambiario durante cuatro largos años. Antes, bien: logró amplificar la gravedad del fenómeno gracias a su predilección a la hora de implementar un recetario populista a base de congelamiento de tarifas, subsidios, planes sociales y megaemisión monetaria (variable que ganó particular empuje con la excusa de la pandemia/cuarentena).

Ha sido este fallido manual de procedimientos el que depositó a la Argentina en un sendero sin retorno y que hoy permite a afirmar con total contundencia que el peso ya ha obtenido la firma de su certificado de defunción.


 
Sobre Eric Nesich

Es Licenciado en Periodismo y Licenciado en Ciencia Política. Columnista de El Ojo Digital especializado en temas económicos y financieros, y aficionado a la investigación relativa a fraudes y estafas en la Bolsa de Comercio de Buenos Aires, Argentina. Sus artículos son publicados regularmente en http://www.elojodigital.com/categoria/tags/eric-nesich. Su correo electrónico para consultas es eric.nesich@gmail.com.