Conforme gana fortaleza y prestigio, la fuerza aérea china se sitúa en el centro de la escena

La Fuerza Aérea del Ejército Popular de Liberación de China ha estado construyendo un rol más prominente en la diplomacia de las fuerzas militares de ese país. Este dato quedó lo suficientemente claro durante la pasada semana, cuando la Fuerza Aérea del PLA lanzó una serie de agresivas exhibiciones en cercanía de Taiwan, en respuesta a las visitas diplomáticas estadounidenses a la isla.

La exhibición siguió a una visita llevada a cabo por Keith Krach, subscretario de estado americano para crecimiento, energía y medio ambiente, en Taiwan, el pasado 17 de septiembre. Krach es el funcionario de más alto rango en el Departamento de Estado en visitar la isla en cuatro décadas, en tanto su periplo sobreviene semanas después de que Alex Azar, Secretario americano de Salud y Servicios Humanos, visitara Taiwan en el mes de agosto.

A efectos de desplegar su extrema disconformidad, Pekín amplió sus réplicas militares. Coincidiendo con la visita de Krach, numerosos aviones de combate chinos cruzaron la línea aérea intermedia en el Estrecho de Taiwan, como parte de lo que Pekín calificó como 'ejercicios militares'. Mientras que es cierto que ninguna de las aeronaves sobrevoló la isla, las docenas de vuelos consignaron un incremento sustancial para ilustrar las presiones chinas.

Más preocupante aún, funcionarios chinos negaron la existencia de la frontera aérea intermedia de manera contundente, recordándole al mundo que, desde la perspectiva del Partido Comunista, Taiwan es parte de China.

Entre las numerosas aeronaves que cruzaron la citada frontera, se dieron cita cazas J-10 y J-11, y bombarderos H-6, de largo alcance.

Asimismo, los H-6 tuvieron un rol preponderante en un video dado a conocer recientemente por Pekín. Se observaron bombarderos despegando y sobrevolando sobre un paisaje desértico. En un momento, un miembro de la tripulación realiza un switch, y puede verse un misil lanzado desde la aeronave, e impactando en una pista situada en una isla. En rigor, la pista se pareció demasiado a la Base Andersen de la Fuerza Aérea de los Estados Unidos en Guam, conforme puede atenderse en Google Earth. Acto seguido, el avión retornó a su base china.

Esta serie de instantáneas subrayan tanto el creciente poderío de la Fuerza Aérea del PLA, como también algunos de los problemas que subyacen en ella y en Ejército Popular de Liberación.

Conforme se apuntara en el reciente informe del Departamento de Defensa para el Congreso estadounidense, al respecto de las fuerzas armadas chinas, la Fuerza Aérea del PLA y la Aviación Naval del arma constituyen ambos la mayor fuerza aérea del planeta. Sus 2.500 aeronaves no solo incluyen jets de combate y bombarderos avanzados (como los que curzaron la frontera aérea intermedia de Taiwan), sino también aeronaves para reposta de combustible en el aire, aviones destinados a la guerra electrónica y aeronaves para el alerta temprana -todos los cuales ofician de multiplicadores de fuerza.

Mientras tanto, reflejando su carácter cada vez más burocrático, los oficiales de la Fuerza Aérea del PLA ocupan hoy posiciones clave en la estructura militar china. En efecto, uno de los dos vicepresidentes de la Comisión Militar Central, en donde se listan las posiciones de mayor rango en las fuerzas armadas chinas, pertenece a un oficial de la fuerza aérea, Xu Qiliang. Hoy, los militares chinos ponderan al poderío aéreo y naval de un modo bastante más sofisticado.

Sin embargo, y en simultáneo, los militares chinos padecen una notoria carencia de experiencia en combate, lo cual afecta a la manera en que retratan a sí mismos. El video dado a conocer por Pekín incorpora, en apariencia, pietaje Made in Hollywood sobre los efectos de explosivos. Incluso los militares chinos, que no han combatido en conflicto alguno desde 1979, se ven influídos por el modo en que las películas estadounidenses presentan a la guerra.

Lo cual comporta numerosas implicancias. Dado que China no ha peleado en una guerra desde 1979, existe poco material fílmico que pueda ser utilizado para representar las actividades del PLA.

Toda vez que resulta importante para audiencias externas, un video que exhibe un ataque contra una base estadounidense no identificada está dirigido, en rigor, a la propia población china, y no a la americana. De tal suerte que será lícito preguntarse cómo funcionaría ello en una audiencia de ciudadanos chinos. Se trata de imágenes con las que ya están familizarizados, y esas imágenes han sido extraídas de películas de Hollywood.

Resulta esto, en alguna medida, embarazoso? Absolutamente. Al mismo tiempo, es comprensible, en tanto subraya el problema de la 'cultura de seguridad' sobre la que el liderato político chino ha advertido en reiteradas oportunidades.

Pekín se propone definir el modo en que unas fuerzas armadas exitosas deben lucir, en la imaginación colectiva del pueblo chino. El video certifica los esfuerzos a la hora de retratar a los militares del país como una fuerza competente, al exhibir equipamiento militar doméstico, y al retratar acciones militares victoriosas ejecutadas por esas fuerzas de orden local.

Pero, sin registrar experiencia en combate, tres generaciones de ciudadanos chinos (y gran parte del resto del mundo) se aferran hoy a los procedimientos y armamentos de los Estados Unidos como el estándar vigente.

Con todo, y aún cuando la Fuerza Aérea del PLA desempeña un rol cada vez más notorio en la formulación de la seguridad regional, su modelo se presenta inspirado en la cultura estadounidense.

Artículo original, en inglés