INTERNACIONALES: GABRIELA CALDERON

Latinoamérica: lecciones para prevenir la corrupción

Era 2010, y TIME magazine seleccionó como el líder más influyente a Luiz Inácio Lula da Silva...

18 de Marzo de 2016
Era 2010, y TIME magazine seleccionó como el líder más influyente a Luiz Inácio Lula da Silva, entonces presidente de Brasil. El comentario de dicho reconocimiento fue escrito por el cineasta estadounidense Michael Moore, quien dijo: 'Cuando los brasileños eligieron por primera vez a Lula, los magnates ladrones revisaron nerviosamente los tanques de combustibles en sus jets privados'. Moore continuó el resto del texto presentando a Lula como un humilde trabajador que, en su niñez, limpiaba zapatos. Pero no mencionó que, en 2005, Lula consideró necesaria la compra de un lujoso avión Airbus por $57 millones para la presidencia. Tampoco le fue posible prever que, ya en 2016, la justicia lo procesaría por estar implicado en el escándalo de corrupción y lavado de dinero, conocido ahora como 'Lava Jato'.
 
Dilma, Cristina, Nicolás2010 era parte de otra época, una en la que muchos en Latinoamérica y en la prensa internacional estaban enamorados de la supuesta nueva política latinoamericana. En gran medida, se trataba de un grupo de gobiernos populistas de izquierda que prometían cosas increíbles y, lo que era más sorprendente, parecían estar cumpliéndolo.
 
Se trataba de una época en la que a la mayoría de los habitantes de estos países, así como a los observadores extranjeros, no parecía importarles la concentración de poder y recursos que se estaba dando en varios gobiernos de la región. Pero, desde un conocimiento básico de la Escuela de Opción Pública, podía preverse que la corrupción estallaría.
 
Uno de los principales exponentes de dicha escuela fue el economista James Buchanan, quién se preguntaba esencialmente '¿Quién controla a los controladores?'. Buchanan citaba respecto de esto a uno de los padres fundadores de Estados Unidos, James Madison: 'Si todos los hombres fueran ángeles, no necesitaríamos un gobierno. Y si los ángeles fueran los gobernantes, no necesitaríamos controles ni constituciones'. Pero la terca realidad suele empecinarse en mostrarnos que quienes nos gobiernan lejos están de ser ángele; son apenas personas comunes y corrientes, sujetas a las mismas tentaciones que el resto de los mortales.
 
De los postulados básicos de la Escuela de Opción Pública podíamos en cualquier momento durante la última década prever que: (1) en el mercado de la política, una mayoría circunstancial puede imponerle su voluntad a una minoría, incluso si, al hacerlo, viola sus derechos fundamentales; que, (2) conforme crece el tamaño y envergadura del Estado, aumentan las oportunidades y los incentivos para cometer actos de corrupción, dado que los políticos y burócratas ofrecen privilegios que son ávidamente buscados por actores privados; y que, (3) a los políticos les conviene gastar una bonanza sin subir los impuestos, creando así un sistema clientelar que les asegure una mayor concentración todavía mayor de poder (y recursos). Además, podíamos prever que (4) muchos intelectuales actúan como si estuvieran aconsejando a un 'déspota benévolo', ingenuamente proponiendo que se le entreguen poderes dictatoriales a personas que supuestamente no los emplearán para beneficio personal.
 
La Escuela de Opción Pública propone ver la política sin romanticismos, sin ser ingenuos. Afortunadamente, en 2016 ya contamos con las ampliamente difundidas revelaciones de corrupción y abuso de poder acerca de los Kirchner, del ex presidente Martinelli, del chavismo, de Evo Morales y ahora, hasta del otrora patrón santo de la izquierda moderada: Lula. La caída del Olimpo no sería tan dura, si no fuera porque los íconos son depositados en un pedestal demasiado alto, y con demasiado poder en sus manos.

 
Publicado originalmente en El Universo (Ecuador)
Sobre Gabriela Calderón

Es Magister en Comercio y Política Internacional de la George Mason University y graduada con un título de Ciencias Políticas con concentración en Relaciones Internacionales de la York College of Pennsylvania. Se desempeña como Editora de ElCato.org. investigadora del Cato Institute y columnista de El Universo (Ecuador) desde enero del 2006. Sus artículos y papers son publicados regularmente en otros periódicos de Latinoamérica y España.