INTERNACIONALES : SEBASTIAN GORKA

¿Es Estados Unidos una isla excepcional, pero egoísta?

Pocos días atrás, luego de mi primera entrevista con Steve Bannon, de la web Breibart, escribí un breve ensayo para este sitio web...

11 de Marzo de 2014
Pocos días atrás, luego de mi primera entrevista con Steve Bannon, de la web Breibart, escribí un breve ensayo para este sitio web, explicando las razones por las cuales Estados Unidos debería preocuparse por Ucrania.

Nunca antes debí resumir un tema geoestratégico de importancia en menos de trescientas palabras (siendo yo profesor de guerra irregular [asimétrica] en el Departamento de Defensa americano, unas tres mil palabras se acercan más a mi estilo).
 
Apenas el trabajo estuvo online, los comentarios comenzaron a acopiarse. Muchos de ellos eran diatribas furiosas que claramente habían sido escritas por personas que no habían leído el artículo correctamente y que parecían pensar que yo era otro neoconservador intervencionista, cuando ningún pasaje de mi artículo hablaba de la necesidad de ejecutar una respuesta militar, ni mucho menos. 
 
Pero las respuestas de parte de aislacionistas de línea dura eran tantas que me sentí obligado a reaccionar, dado que ellos no parecían comprender qué tiene de especial nuestra nación. De hecho, otro texto publicado en Breitbart sobre la crisis incluía la siguiente postura: 'Es importante señalar que Estados Unidos exhibe NULO interés nacional en esta materia'. ¿En serio?
 
¿Tenía EE. UU. un 'interés nacional nulo' en la materia cuando un puñado de ideólogos tomó por asalto el Palacio de Invierno en San Petersburgo en 1917? ¿Exhibimos un interés nacional nulo en la materia cuando el Canciller de Alemania anexó Austria y la región del Sudetenland en 1918? ¿Teníamos un interés nacional nulo cuando los soviéticos abandonaron Afganistán en 1989, o cuando el Talibán tomó el gobierno en Kabul?
 
Temo que aquel conjunto de aislacionistas que expresaron resentimiento ante mi trabajo inicial hubieran respondido afirmativamente ante el escenario de 1917, y lo propio con las cuestiones relativas a 1938 y a 1989. Y se hubieran equivocado por completo
 
La revolución que diera inicio a la Unión Soviética; los eventos que condujeron a la expansión del Tercer Reich en toda la Europa continental; y la creación del Estado yijadista en Afganistán -que se convertiría en el centro de al-Qaeda- terminarían afectando directamente a los intereses nacionales de Estados Unidos. Y aquel era un mundo mucho menos interconectado que el actual.
 
Lo entendí. George Bush se equivocó en Irak, y hemos tenido suficientes problemas en casa con la NSA y Obamacare. Pero nada de eso significa que, simplemente, debamos cerrar las cortinas a las costas del Atlántico y del Pacífico, e ignorar al mundo. Porque el mundo no nos ignora
 
Más importante aún, si Usted cree en el excepcionalismo estadounidense, entonces debería preocuparse también por Ucrania. El excepcionalismo americano no se trata solo de la libertad y de un buen estilo de vida para Usted y para mí. Se trata de aquello en lo que creemos, y de tener fe en que nuestros valores son objetivos. 
 
Esto significa que, si hay un país ahí afuera cuya mayoría de sus ciudadanos dicen que desean ser libres como nosotros y tener un gobierno por y para el pueblo, si un matón más poderoso se presenta y los priva de sus derechos inalienables, no debemos ignorarlos. Si lo hacemos, otros matones tomarán nota
 
Así fue como tuvieron lugar los hechos de Pearl Harbor y los del 11 de septiembre de 2001. Mostramos debilidad, y la gente que odia aquello que representamos tomó nota, y luego decidieron que nosotros seríamos su próximo objetivo
 
En enero de 1983, el presidente estadounidense Ronald Reagan firmó una Orden Directiva de Seguridad Nacional (NSPD7 5, por entonces secreta) en relación a las relaciones de Washington con Moscú, que ahora ha sido desclasificada. Versaba sobre la respuesta a las acciones del Kremlin en Europa oriental, bastante menos escandalosas que aquellas que Vladimir Putin ha ejecutado en Ucrania.
 
Entonces, el presidente dejó en claro que 'los Estados Unidos deben transmitir claramente a Moscú que el comportamiento inaceptable determinará costos superiores a cualquier beneficio' que pudiera obtener el Kremlin. Imagine Usted qué hubiera hecho -o dicho- Reagan hoy día. Hay algo que tengo por seguro: él no hubiese dicho que tenemos un 'interés nacional nulo' en lo que respecta a la libertad del pueblo de Ucrania.
 
 
Traducción al español: Matías E. Ruiz y reproducido con permiso | Artículo original en inglés, en la web Breibarthttp://www.breitbart.com/Big-Peace/2014/03/10/America-the-Exceptional-but-Selfish-Island
 
 
Sobre Sebastian Gorka

Es Decano y Profesor Asociado en Estudios sobre Guerra y Conflictos en la National Defense University en Washington, D.C., y Associate Fellow de la Universidad de Operaciones Especiales Conjuntas SOCOM.