POLITICA: EL SILENCIO OFICIAL DESNUDAN OPERACION POLITICA

Caso Luis Gerez : el contraataque de Luis Patti. El Gobierno, comprometido

Los escasos detalles que arroja la investigación sobre el secuestro del albañil y militante kirchnerista Luis Gerez apuntan en una dirección segura : el intento de aprovechamiento político del triste episodio. El contraataque de Patti. Pequeñas pistas sugieren que la mano del Gobierno pudo armar el secuestro.

21 de Julio de 2010
La liberación de Gerez fue motivo de festejo para sus familiares, pero la algarabía inicial de parte de funcionarios de alto nivel de la Administración Kirchner comenzó a apagarse ni bien comenzaron a conocerse pequeños detalles de la investigación. Aún más, la preocupación ya ha comenzado a metamorfosearse en pánico para algunos ministros, particularmente Aníbal y Alberto Fernández. La liviandad con que el Presidente Néstor Kirchner, Felipe Solá, León Arslanian y otros funcionarios se apresuraron a responsabilizar al ex comisario y diputado nacional electo Luis Patti y su círculo está pagando, por estas horas, un alto precio. Nadie se preocupará por el final de la incipiente carrera política del fracasado actor Alberto Fernández de Rosa, quien arrojó ante la prensa expresiones irracionales dignas de alguien que se pasó de copas. Su necesidad de cámaras terminará de pasarle una gruesa factura y se vislumbra que sus socios en el poder lo abandonarán, o bien lo utilizarán de chivo expiatorio. Lo que sí es preocupante es la manera como el propio Presidente trató la cuestión, repitiendo en forma demasiado automática las hipótesis que sus propios acólitos le iban deslizando bajo el escritorio. En estos momentos, y de acuerdo a declaraciones del propio Luis Gerez, visiblemente mejor luego del mal momento vivido, salió a la luz que sus captores poco y nada tenían de fuerzas de seguridad o militares. Así se extrae de los dichos del albañil, quien notó que los secuestradores no utilizaban códigos para dirigirse entre ellos ni formas de comunicación clásicas de la policía o el Ejército. En este sentido, los operativos de la dictadura son demasiado torpes como para disimular su vocabulario. Es decir, que la "pista militar-policial" se desvanece. A tal respecto, Eduardo van der Kooy reproduce -en su columna de Clarín del miércoles- una sentencia oída por Gerez de una persona que parecía ser cabecilla en la operación de su secuestro : "Ustedes llegaron muy lejos. No me pienso hacer cargo de este lío que han armado. Arréglense solos". No mucho después de escuchada esta frase, Gerez fue arrojado del vehículo donde lo tenían secuestrado. ¿Pertenecía la voz a un dirigente kirchnerista de Escobar, que ofició de cerebro de la operación? El propio Gerez explicó a la prensa que podría reconocer la voz sin problemas. ¿Qué sucedería si se hace escuchar a Gerez las voces de militantes oficialistas en la localidad donde se produjo su abducción? Pero del mismo modo en que van der Kooy se ocupa de atacar en forma "light" al oficialismo por lo actuado frente al caso Gerez, se preocupa también el periodista por dar a entender que el Gobierno no quiso culpar directamente a Patti, sino a "miembros de su círculo". ¿Le bajaron línea a van der Kooy, a los efectos de pedir disculpas en forma solapada? Lo interesante es que el escritor luego se ocupa de refrendar la idea de que el propio Kirchner había decidido detener al ex comisario si no aparecía Gerez. El propio Patti ha tomado ahora las riendas de la situación, explotando las carencias comunicativas del Presidente y sus allegados. En los círculos cercanos a Patti se comenta que el ex comisario ha iniciado una investigación paralela y ya conoce algo de lo ocurrido. A tal efecto, tomó el balón y cargó duro contra el kirchnerismo de Escobar, comandado por el impresentable Fernández de Rosa y sus colegas. Puntualmente, Patti la emprendió contra Orlando Ubiedo, militante del kirchnerismo y amigo de Gerez, quien para él es el cabecilla o participó directamente del secuestro del albañil. ¿Quién mejor conocedor de los movimientos de Luis Gerez que el propio Oviedo? Oviedo, por su parte, dejó la prisión hace pocos años, y esto sirvió también a Patti para hacer su descargo, donde pone énfasis en el elemento delincuencial -ex convictos- que utiliza el kirchnerismo en varios distritos del conurbano bonaerense. El sitio web Seprin.com publicó un listado de personas que, directa o indirectamente, están involucradas en el secuestro o que seguramente conocen más información de la que se ha revelado públicamente. Además de Alberto Fernández de Rosas -candidato a intendente de Escobar por el Frente para la Victoria- y Orlando Ubiedo -ex secretario gremial-, el portal menciona a Hugo Cantero -concejal de Escobar por el Frente para la Victoria-, Gerónimo Vargas Aignasse -Diputado Nacional por el Frente para la Victoria-, Hugo Jaime -ex militante de la Juventud Peronista-, Emilio Pérsico -vicejefe de gabinete del Gobernador Felipe Solá-, Miguel Dante Dovena -Diputado Nacional por el Frente para la Victoria-, y Jorge Landau -Diputado Nacional por el Frente para la Victoria y apoderado del Partido Justicialista Bonaerense-. Sin lugar a dudas, un listado de personas verdaderamente representativas del paupérrimo estado actual de la política argentina. Volviendo a las declaraciones de Luis Patti, éste se ha cuidado de no atacar a Kirchner. Para el ex policía, el Presidente "compró pescado podrido" vendido por sus propios funcionarios, presionados para acercarle sospechas sobre el círculo de Patti o, cuando menos, provenientes de elementos residuales de la dictadura militar. Aprovechó también la ocasión para describir el panorama político de Escobar, localidad donde el ex comisario y su partido Partido Unión Federalista -PAUFE- trabaja codo a codo con parte del peronismo bonaerense. En este tren, no disimula Patti su sospecha al respecto de que parte del aparato kirchnerista de la zona, resentido con la porción del oficialismo que trabaja junto al ex policía, haya pergeñado la operación en forma de vendetta. Lamentablemente, el silencio oficial respecto de lo ocurrido con Gerez anticipa un intento de presión para que los medios abandonen el tema. El control oficial que el Gobierno impone sobre la prensa oral y escrita le ha permitido evadir los problemas cuando los escenarios eran poco favorables. No sorprendería que el secuestro de Luis Gerez termine también en la nada.
El Ojo Digital Política