INTERNACIONALES - URUGUAY: REMITIDO POR JORGE AZAR GOMEZ

Dura carta de diputado uruguayo a Ban Ki-moon: califica con crudeza al presidente José Mujica

Al Señor Secretario General de Naciones Unidas, Sr. Ban Ki-moon, Presente...

15 de Junio de 2011

Le agradezco preste atención a los términos de esta nota, que surge como necesidad de informarle responsablemente, sobre aspectos de la historia reciente de nuestro Uruguay. Especialmente en referencia a afirmaciones que Usted ha realizado.

Se equivoca Ud., Sr. Ban Ki-moon.

"El jerarca de Naciones Unidas felicitó al mandatario por su liderazgo y compromiso de toda la vida con la democracia y con una mejor calidad de vida para todos los uruguayos" (Diario La República 15/06/2011)

No, Sr. Secretario General de las Naciones Unidas. No es cierto lo que Usted afirma. José Mujica -el Presidente de la República- formó parte de un grupo terrorista que atentó contra las instituciones democráticas y republicanas de nuestro país y lo hizo convencido que el camino de las prácticas de la democracia no servía. Formó parte del liderazgo de un grupo guerrillero que atentó contra nuestra Constitución, contra las libertades y los Derechos Humanos. Se trató de un grupo que mató y ordenó ejecutar a inocentes resolviéndolo fríamente, tal como lo han declarado varios de su propio seno. Entre ellos, su Sra. Esposa, la Senadora Lucía Topolansky. Ella relató en su momento sobre la decisión de matar a Pascasio Báez, de cuya historia Usted puede pedir antecedentes a sus asesores en historia y política de los países miembros de UN.

Durante una década, el grupo o banda denominada Tupamaros desarrolló actividades terroristas y ejercitó el secuestro de personas a quienes mantenía retenidas en condiciones infrahumanas. Esa violación de derechos humanos fue sufrida también por embajadores, empresarios, científicos, compatriotas y extranjeros. Ejecutaron innumerables robos, rapiñas, asonadas, atentados con bombas -con resultado de muerte de inocentes y destrucción cuantiosa de bienes-. El bien más preciado que contribuyeron a destruir fue, precisamente, la democracia.
 
Quien preparó las impresiones que Usted iba a formular en Uruguay en estas horas lo informó mal o, antes bien, le desinformó. Por ello, quizás ha cometido el error que señalamos, error que pasa a formar parte de la operación de “limpieza” de los antecedentes históricos indiscutibles del terrorismo practicado por los Tupamaros (en donde José Mujica ha sido líder). El traspié, cometido por una personalidad tan importante e influyente como la suya, constituye una grave falla que agravia la verdad y la conciencia del Uruguay. Ello provoca, a nivel internacional, una comprensión irresponsable de nuestra realidad.

Que la sociedad de Uruguay haya realizado y realice honestos y difíciles esfuerzos para superar los dramas del pasado, el enfrentamiento violento, los fantasmas de la intolerancia, es un mérito de todos los compatriotas. Pocos, alejados de la gran mayoría, sometieron con el terror a la sociedad en general. Primero, los que soñaban con llegar al poder legitimados por las metralletas y violando derechos humanos de terceros, y luego, los que se justificaron en ello para orientar sus fusiles a destruir la convivencia republicana, e instaurar la dictadura que sufrimos hasta 1984.

Esta historia ha costado y cuesta mucho. La imagen de nuestro Uruguay tolerante, respetado en el concierto internacional, protector de los derechos humanos y las libertades es el capital de toda nuestra nación. De todos quienes no vacilaron durante su existencia de las garantías que ofrece la democracia, el ejercicio de la soberanía popular mediante el voto y la vigencia del estado de derecho. Y, por el estoicismo y virtud democrática de nuestro pueblo, algunos de quienes en su momento lo ofendieron hoy pueden ser sus gobernantes. Ello, en la vida del Presidente Mujica y sus compañeros Tupamaros, tuvo al menos un lapsus que Usted debe conocer. Entonces, el que corresponde al Presidente José Mujica no ha sido -como Usted ha afirmado- un “liderazgo y compromiso de toda la vida con la democracia.”

Es a partir de aquí que Usted se equivoca. Debemos -respetuosamente, claro está- hacérselo notar.
 
Jaime Mario Trobo
Representante Nacional - Poder Legislativo
Uruguay

 

Remitido por Jorge Azar-Gómez, ex representante del Uruguay ante Naciones Unidas