La década del setenta: entre la tragedia y la farsa
Si algún componente de la estructura discursiva kirchnerista se ha mantenido constante y sonante desde mayo de 2003 a la fecha, ese fue el uso del violento pasado de los años 70 como relato legitimador de las conductas políticas actuales...
Sucede que el kirchnerismo, desde sus orígenes, tácitamente se ha presentado como una suerte de “corriente heredera” de aquella generación que encontró en las armas el medio de acceso al poder (nos referimos a Montoneros y ERP), e inclusive su principal movimiento juvenil, “La Cámpora”, lleva el nombre de un fugaz presidente virtualmente derrocado por el propio Perón, cuando éste advirtió que aquél se había vinculado fuertemente con la guerrilla montonera y la llamada “Tendencia Revolucionaria”.
Vale en este sentido rememorar aquella célebre máxima de Marx: “La historia se repite, primero como tragedia, y después como farsa”. En efecto, todo indica que la Argentina está reviviendo la tragedia de los `70 a modo de farsa. Mientras la lucha de las organizaciones armadas en el ayer era encarada con arreglo a lo que ellas mismas definieron como guerra revolucionaria (“en el proceso de guerra revolucionaria iniciado en nuestro país, nuestro partido ha comenzado a combatir con el objeto de desorganizar a las Fuerzas Armadas del régimen” explicaba el PRT-ERP [1]) para la conquista del marxismo (“este proyecto de liberación nacional y social define nuestra ideología socialista, en tanto la liberación de la clase obrera y el pueblo peronista supone la destrucción del sistema capitalista” aseveraban los Montoneros [2]), hoy sus herederos prefieren simplemente hablar de Derechos Humanos −aquellos mismos que la “juventud maravillosa” nunca respetó−, no para desarticular el capitalismo, sino para embanderarse tras un fetiche que, en tanto instrumento discursivo político, ha demostrado ser llamativamente efectivo a la hora de recolectar votos.
Mientras en la tragedia de los `70 las bandas terroristas desafiaron con su accionar la continuidad democrática en el país (“Las elecciones [del 11 de marzo de 1973] sólo fueron una táctica dentro de una estrategia de guerra integral” señalaron los Montoneros [3]), y en ese intento llamaron −aunque sin éxito− a las clases menos pudientes a unírseles, en el hoy, es decir, en la farsa de los 70, los herederos de ERP y Montoneros prefieren vivir de las instituciones democráticas y llamar a las clases menos pudientes no a levantar el fusil, sino a votarlos en las elecciones, y no con la promesa del socialismo, sino con la promesa del “choripán y la Coca”.
Así las cosas, mientras los guerrilleros y terroristas de la década del `70 intentaron hacer la revolución instalando ejércitos irregulares en el monte tucumano, asaltando cuarteles militares o volando con explosivos edificios enteros (“el terror revolucionario alcanzará implacablemente no sólo a quienes apuntan el arma y oprimen el gatillo” advertía el ERP [4]), sus “herederos” prefieren desafiar el statu quo desajustándose la corbata, tatuándose al "Che" Guevara en el hombro o despotricando contra el siempre vilipendiado “imperialismo”, aunque al mismo tiempo se encuentren degustando una hamburguesa de Mc Donald´s o enviando e-mails desde sus BlackBerry.
Argentina ha sido sumergida en una suerte de “túnel del tiempo” como consecuencia de un relato mítico sobre el pasado, utilizado sistemáticamente por diversos factores de poder −principalmente por el kirchnerismo− como instrumento político actual. Y en este sentido, desmitificar el pretérito, es en cierto modo desmitificar el presente y, por consiguiente, a aquellos quienes viven políticamente de la farsa.
Referencias
[1]: Resoluciones del V Congreso del PRT-ERP, 1970.
[2]: Boletín Interno Nº 1 de Montoneros y FAR, mayo de 1973.
[3]: Revista de Montoneros Militancia, Nº 37, 1973.
[4]: Revista del PRT-ERP Estrella Roja, nº 47, enero de 1975.
* El autor tiene 22 años de edad y es estudiante de la carrera de Ciencias Políticas. Autor del libro "Los Mitos Setentistas: Mentiras Fundamentales sobre la Década del 70". Su página web es http://www.agustinlaje.com.ar/