POLITICA: POR MATIAS RUIZ, PARA EL OJO DIGITAL

El conflicto sin fin y un panorama que se ensombrece. La estrategia de Néstor Kirchner permanece indescifrable

Crecen las preocupaciones en el seno del Gobierno Nacional luego de la demostración masiva del acto del sector agropecuario en Palermo. Ni siquiera los allegados al poder saber hacia donde apunta el ex presidente en su eterna convocatoria al odio y a la confrontación. La violencia política en la Argentina continuará en aumento.

21 de Julio de 2010
Volvió a perderse la prensa argentina en el tramado de repercusiones que dejaron los actos del oficialismo y del Campo, este último de carácter masivo y que concentrara a 400 mil personas en el barrio porteño de Palermo. Corresponde hacerse numerosas preguntas al respecto del rol de los medios informativos del país, que perdieron un tiempo precioso en calcular cuantas personas habían participado de cada acto. Esos periodistas no hacen más que sumarse al maquiavélico juego del Gobierno Nacional que -ya sin lugar a dudas- encabeza el ex presidente Néstor Carlos Kirchner. Precisamente, era penoso ver cómo los periodistas de Diario Clarín y Todo Noticias -TN- calculaban los asistentes del acto del agro en el Monumento de los Españoles. ¿Tiene importancia acaso? Y el saldo del conflicto tampoco deja lugar a especulación : el Grupo Clarín apoya la visión oficialista, especialmente en la pluma del otrora prestigioso columnista Eduardo van der Kooy. Aquel contra el que -sin nombrarlo- se despachaba Elisa Carrió recientemente por atacar siempre a la oposición desde su columna dominical. Pero la jugada ya le había salido mal a Clarín, que hoy parece más una publicación improvisada que un medio pleno de seriedad : antes de llevarse a cabo los actos de Palermo y de la Plaza de los Dos Congresos, manufacturó un pobre intento de descalificar a la protesta del agro publicando una encuesta que refería que una gran mayoría de lectores que opinaron en la edición online declaraban no estar de acuerdo con los planteos de ninguna de las dos partes. Van der Kooy, por su parte, abusa desde hace tiempo de la falsa premisa de que tanto el agro como el Gobierno Nacional son igualmente culpables por dividir a la sociedad. Con consistencia, el columnista estrella del diario de Ernestina Herrera de Noble, viene atacando el rol de la oposición en el Congreso de la Nación, endilgándole falsamente el no haber presentado un plan alternativo a la propuesta de las retenciones que el kirchnerismo desea implementar. Muchos ciudadanos se cuestionan, por estas horas, sobre el rol del periodismo tradicional. Muchos profesionales de la prensa parecen ignorar que, defendiendo implícita o explícitamente al Gobierno, le allanan el camino a la abierta regulación de la libertad de expresión. Nunca antes una administración se manejó de manera tan agresiva como el kirchnerismo a la hora de tratar con los medios. Referentes de la prensa independiente tanto real como de Internet siguen siendo objeto de ataques de parte de funcionarios, y en otros casos de acoso mucho más directo. Y nadie parece acusar recibo. ¿Qué dejó el paupérrimo acto que encabezó el ex presidente Kirchner en la Plaza de los Dos Congresos? Un reguero de odio y desesperanza. Incontables descalificaciones contra aquellos que piensan distinto y una intención declarada de convertir a la Argentina en una suerte de república bananera al mejor estilo de la Venezuela chavista. Nadie lo hubiera creído hace algo más de cinco años, momento en que Kirchner se subía al poder de la mano de Eduardo Duhalde y a quien la sociedad expresaba un apoyo cercano a lo incondicional. Apoyo del cual, quien esto escribe, también era parte. Pero lo cierto es que hoy el país se encuentra al borde de un conflicto mucho más grave de lo que se cree. Aquellos que aún insisten con tildar de agoreros o catastrofistas -entre otros epítetos- a quien osa declarar que la coyuntura adolece de una enfermedad terminal se percatarán en forma tardía de lo que realmente está pasando. Se contabilizan ya demasiados "escraches" a funcionarios o legisladores que comulgan con el oficialismo en el espacio público. Inútilmente, aunque de seguro con el objetivo de caldear aún más los ánimos, las supuestas víctimas acusan a los etiquetados victimarios de "golpistas", "intolerantes", "gorilas", "milicos", "fachos", "oligarcas" y otros tantos conceptos que ya hace años debieron formar parte del pasado de la Argentina. Por desgracia, el propio ex presidente resulta ser el principal promotor de esa violencia verbal y de ese discurso atiborrado de odio. Solo Néstor Kirchner ha podido lograr unir en un solo reclamo a Luis Barrionuevo, el peronismo disidente, los piqueteros de Raúl Castells y partidos de izquierda como el MST con el sector agropecuario y las clases medias y altas de todo el país. Quedó también para reflejo de la prensa adicta el supuesto desvanecimiento del ex primer mandatario, acosado por un grupúsculo de adeptos al finalizar su exposición. Como era de esperarse, fue Diario Clarín el medio que más importancia otorgó a la noticia, pero lo cierto es que el episodio constituyó una vulgar pantomima cuyo fin era evitarle a Kirchner pasar la noche en la carpa oficialista de la plaza. Solo los portadores de una mente en extremo ingenua podrían siquiera considerar que el esposo de la Presidente Cristina Fernández -acostumbrado al lujo desde sus tiempos de gobernador en Santa Cruz- podría pernoctar en una carpa con militantes de poca monta. Y si acaso la charada se confirmara como certera, ello pondría inmediatamente en duda el "aguante" que el matrimonio presidencial tantas veces declamó tener, desde iniciado el conflicto con los sectores productivos de la nación... Mientras tanto, rumores y comentarios se apoderan del espacio de Internet desde iniciado el debate sobre el paquete oficial de retenciones móviles en el Congreso. Desde hace pocas horas, comenzó a circular un correo electrónico firmado por un supuesto asesor que se desempeñara en la Jefatura de Gabinete de Ministros y que, en su misiva, detalla con claridad el manejo discrecional de fondos redirigidos desde el Ministerio de Planificación hacia el armado de los actos públicos del oficialismo. Aún más, el escrito hace referencia -con nombre y apellido- a un listado concreto de legisladores que han acordado con el Gobierno Nacional votar en favor de las retenciones en el Senado de la Nación, a cambio de dádivas y dinero a remitirse en planes de obra pública para sus provincias. El material bien podría formar parte de una aceitada operación mediática para la cual solo la Casa Rosada posee recursos técnicos y humanos. Sin embargo, algunos datos relacionados con el autor han sido corroborados, habida cuenta de que figura un número de DNI válido. Por otro lado, el periódico Ambito Financiero confirma el acuerdo entre algunos legisladores y el kirchnerismo para dar voto favorable al proyecto sobre retenciones. Si el material resultara ser parte de una operación para intoxicar medios, tal iniciativa solo podría provenir de elementos de la Secretaría de Inteligencia. Ello también terminaría de confirmar la manera en que la Casa Rosada opera a los efectos de entorpecer la libre expresión y de generar descrédito entre la comunidad de medios de comunicación. De un modo u otro, el Gobierno no queda muy bien parado. Y este es el análisis más completo que puede hacerse al respecto. Metiéndonos de lleno en el conflicto y sus derivaciones, algunos medios del país han reflejado la preocupación que existe entre miembros renombrados del kirchnerismo, a la hora de analizar el comportamiento del ex presidente. Muchos se preguntan sobre la naturaleza de la estrategia de Néstor Kirchner. ¿Sabe cuál es el objetivo final de su recurrente convocatoria a la confrontación? ¿Hay una estrategia o simplemente se intenta ganar tiempo? ¿Se recurre a la técnica del ensayo y el error para intentar capear el temporal? Y, más importante aún, ¿contra quién o quiénes intenta Néstor Kirchner defender a su esposa? Con propiedad y agudeza se lo preguntaba Jorge Lanata en su columna del día miércoles 16 en Crítica Digital : "¿Marcharán las tropas del General de Angeli?" (para intentar tomar el poder). El staff de nuestro medio ha invertido más tiempo en preguntarse : si acaso el ex presidente prevé un conflicto entre dos partes -y son él y Cristina los primeros defensores de la democracia-, ¿se habrá percatado de las fuerzas oscuras que, sedientas de violencia y de desorden social, pululan entre sus propias huestes, esperando la hora precisa para sumir al país en una suerte de guerra civil sin cuartel? Aquellos que aún dudan deben saber que, por mencionar un caso puntual y que ilustra ciertos hechos que están teniendo lugar en el país, muchas personas propietarias de importantes propiedades -especialmente casas, y que participan del negocio de la soja o del campo- acusan pintadas en favor del Gobierno Nacional en las paredes de sus moradas. Alguien los está individualizando y ejecutando maniobras de acción psicológica contra ellos. Aún no se sabe quién exactamente, ni el por qué. Léase : los ataques contra la prensa independiente ahora tocan la puerta de los ciudadanos comunes. Como si no tuvieran ya suficientes problemas con la falta de seguridad. Y, entre bambalinas, Facundo Moyano lleva adelante un ataque con precisión guerrillera sobre las oficinas de Autopistas del Sol, tal vez intentando clonar la "hazaña" del piquetero Luis D Elía en una comisaría de la Policía Federal en La Boca, pocos años atrás. Un delito federal que, por cierto, aún continúa impune y con su principal ideólogo y ejecutor caminando libremente por las arterias del país. En relación a Moyano, trascendió que dos fiscales solicitarían su captura por doble robo agravado -delito con pena de prisión efectiva- pero, habida cuenta de la llegada al poder que su padre Hugo ostenta, lo más probable es que su acometida contra la empresa española quede en la nada. Finalmente, parece imponerse una última hipótesis a la hora de considerar el desgarrador panorama nacional, y que nuestro medio recopilara de una de sus fuentes mejor informadas : "Néstor Kirchner y Cristina saben que se acerca la debacle. Inflación e inseguridad son dos problemáticas ya insostenibles y que solo amenazan con agudizarse. Para colmo, la crisis energética todavía tiene para un par de meses para estallar. El conflicto con el Campo ha sido exagerado y hasta manufacturado artificialmente, con el objetivo de hallar un culpable para los propios errores. En este caso, el culpable es el agro. El kirchnerismo hará todo lo posible para crispar los ánimos de los campesinos, para luego acusarlos abiertamente de golpistas. En este esquema, lo único que hace falta es un loco que se anime a disparar el primer tiro." Por Matías Ruiz, para El Ojo Digital Política. Email : elojodigital.com -arroba- gmail.com.
Por Matias Ruiz, para El Ojo Digital Política