SOCIEDAD: EL CONFLICTO DE LAS PAPELERAS

El nuevo terrorismo ecológico : los asambleístas entrerrianos realizaron inteligencia criminal en la terminal de Buquebús

Alfredo De Angelis, José Pouler, Juan Ferrari y Jorge Fritzler son los ideólogos de la violencia que propone la Asamblea de Gualeguaychú. Los mencionados se presentaron en la terminal de Buquebús para realizar inteligencia criminal, es decir, recopilar información que les sea útil para generar incidentes el día viernes 12 de enero o en fechas posteriores.

21 de Julio de 2010
Los asambleístas de Gualeguaychú finalmente llegaron a la zona del Puerto de Buenos Aires para llevar adelante tareas de inteligencia criminal. Del mismo modo que un ladrón se pasea varias veces por la vivienda que planea desvalijar, o de la misma manera en que un secuestrador sigue los pasos de su víctima -a los efectos de contar con menos imprevistos para llevar adelante su marginal faena-, los representantes del elemento más extremista de Gualeguaychú visitaron el Puerto. Pero se encontraron con un comité de bienvenida de la Prefectura Naval, quien los hizo entrar en razones al respecto de que Buenos Aires no es Entre Ríos, porque aquí las leyes siguen vigentes. Aunque, a la vez, los prefectos lanzaron otro mensaje entre líneas : Puerto Madero no es la Capital Federal, y Prefectura no es la Policía Federal. Los asambleístas han sido ya aislados, y las pruebas más evidentes de ello son dos : el abandono al que han sido sometidos por parte de Jorge Busti, Gobernador de Entre Ríos, y, en segundo término, la decisión recientemente tomada por la Asamblea Ciudadana, al respecto de convocar para el viernes -o en el futuro- a piqueteros violentos y al MST, en la figura de la insufrible y vetusta Vilma Ripoll. Reza Clarín en su edición del día miércoles que grupos internos de la Asamblea cuestionaron la convocatoria a piqueteros pues esto provocaría un choque con las clases medias porteñas, a quienes se había querido contagiar desde el principio. El razonamiento es correctísimo. Pero los asambleístas hace tiempo que vienen pecando de ingenuos. Entre sus filas ya se han infiltrado personajes de la izquierda reaccionaria, y hasta han tomado el control, a través del uso de los manuales más clásicos de la agitación. La Asamblea ha dado al traste con el ecologismo. El mensaje que se pregona coincide con el odio a los porteños y hacia las clases medias o altas acomodadas que viajan al Uruguay. Se disparan consignas contra "el capitalismo del otro lado del río". ¿En qué momento perdieron el control de la situación los entrerrianos? ¿Cómo han permitido que grupos políticos -duchos en el uso de la violencia- los hayan llevado al ridículo nacional, en un camino sin retorno? La convocatoria a piqueteros y al Movimiento Socialista de los Trabajadores no tiene otro objetivo que el de contraponer una fuerza de choque a las fuerzas federales representadas por Prefectura. Hay en esta convocatoria algo que huele muy mal, y funcionarios de alto nivel cercanos al Presidente Néstor Kirchner, lo saben. Haya o no haya choque, los violentos ya han ganado, pues han logrado generar un estado de preocupación entre los vacacionistas porteños, y padres de familia y sus hijos están ahora atemorizados por lo que les pueda suceder si pisan la terminal de Buquebús. Estas personas, que sufren de una falta de seguridad personal durante todo el año, no sólo no son defendidos por su gobierno, sino que ahora también son atacados por lo peor del extremismo. Los grabarán con videocámaras y les serán arrojados huevos podridos, cuando no golpeados o pateados. Al Titanic de esta Argentina contemporánea, a la que no le han faltado guerrilleros, homicidas, torturadores, secuestradores, y políticos corruptos, sólo le faltaba un iceberg : terroristas ecológicos. La estrategia de los asambleístas no fue haber enviado a foros internacionales a pasear a la acompañante VIP de pocas luces y de amplia celulitis, Evangelina Carrozo. El error fatal fue ponerse en la vereda de enfrente del Presidente Néstor Kirchner y de su interés para no continuar perdiendo adeptos entre las clases medias y altas. El primer mandatario no permitirá que el asunto con Uruguay se le termine yendo de las manos, y mucho menos se permitirá el golpe durísimo de un peligroso combo que incluya turistas agredidos, y caída de imagen pública por no reprimir a aquellos que alteren el orden. La posibilidad de incidentes es certera, ya que los entrerrianos se las han arreglado para consolidar un bloqueo total al Uruguay el día viernes 12 de enero. Lo concretarán por vía terrestre y sólo resta Buquebús. Es difícil pensar que se sentarán a conversar y a beber café humeante con los castigados turistas que, con todo su derecho, han seleccionado el otro lado del río para descansar del castigo permanente al que su país los somete durante un año entero.
El Ojo Digital Sociedad