España transmitirá su malestar a la Argentina por liberación de terrorista

El Gobierno español trasladará en las próximas horas su "malestar" al Ejecutivo del presidente argentino, Néstor Kirchner, por la decisión de la Corte Suprema de Justicia de rechazar la extradición del supuesto miembro de ETA Jesús Lariz Iriondo, según informó hoy la prensa local. El presidente José Luis Rodríguez Zapatero comunicará a través de canales oficiales al Gobierno argentino su desagrado por la decisión del máximo tribunal de rechazar el pedido de extradición de Lariz Iriondo, que fue reclamado por el juez de la Audiencia Nacional Baltazar Garzón, según informa el diario La Nacion, que cita a fuentes diplomáticas españolas. "Entendemos que la internacionalización de la justicia todavía está en discusión y respetamos la decisión de la Corte, aunque no la compartamos en absoluto. Es verdad que muchos de los argumentos de los jueces son de procedimiento y no tienen que ver con el fondo del asunto, pero entre todos debemos ser muy claros en que los delitos de terrorismo que han afectado la vida de personas no pueden quedar sin su correspondiente pena", dijo el embajador de España, Carmelo Angulo Barturén. Ocho jueces de la Corte Suprema consideraron que no se podía conceder la extradición de Lariz Iriondo porque los delitos imputados en España han prescripto según las leyes argentinas. Sólo un juez del Supremo sostuvo que la extradición debía ser concedida. "Esperamos que se tomen medidas políticas que dejen en claro que este país no apoya ni alberga ni facilita ninguna operación de personas que supuestamente tengan que ver con el terrorismo", agregó el embajador español. El Gobierno de Rodríguez Zapatero espera, según el diario, que el gobierno de Kirchner decrete la expulsión de Lariz Iriondo. "Pasamos de una relación amistosa e histórica a una relación de carácter estratégico para fortalecer todos los sectores posibles de cooperación; incrementar los intercambios; hacer un seguimiento preciso de los temas que pueden ser de interés común, incluso de aquellos en los que puede haber diferencias de criterio, y preparar juntos una agenda internacional", agregó Angulo Barturén. Lariz Iriondo fue acusado por Garzón de haber intervenido en un atentado en 1984 contra un vehículo de la Policía Nacional de España en el que resultaron heridas dos personas en Eibar, Guipúzcoa. También se le acusa de robo con intimidación, estragos y depósito de armas. Fue expulsado el 22 de noviembre de 2002 de Uruguay y desde entonces permaneció detenido en Buenos Aires hasta que el año pasado el juez federal Claudio Bonadío sostuvo que no correspondía conceder su extradición. Esa decisión fue convalidada el martes pasado por el fallo de la Corte.