SOCIEDAD: EL JUEZ JULIO LUCINI LOS CITO PARA PRESTAR DECLARACION

E fin de Callejeros, cada vez más cerca

Será difícil que los miembros de "Callejeros" sorteen, una vez más, la obvia responsabilidad que les cabe en la tragedia de Cromañon. El grupo claramente incitó al uso de pirotecnia y estaba detrás de la organización de los eventos, en los que se promovía el ingreso de excesivo número de personas a los boliches donde tocaban. De ser hallados culpables, sólo podrían ser procesados por homicidio culposo, un delito increíblemente excarcelable.

21 de Julio de 2010
Los seis músicos de la banda de rock Callejeros, que tocaban en República Cromagnon la noche en que el incendio provocó 193 muertes, fueron convocados ayer a prestar declaración indagatoria ante el juez Julio Lucini. El magistrado citó en calidad de acusados al vocalista del grupo, Patricios Santos Fontanet, y a sus compañeros Christian Torrejón, Elio Delgado, Maximiliano Djerfy, Eduardo Vázquez y Juan Carbone, según precisaron fuentes judiciales. Los mismos portavoces explicaron que los músicos fueron convocados para los días 23, 24 y 26 de mayo, al tiempo que revelaron que también fue citado como testigo el conductor radial Juan Di Natale. La citación se produjo luego de que la semana pasada fuera difundida una cinta en la que Vázquez, el baterista de la banda, aseguraba que Callejeros había tocado ante unas cuatro mil personas y que el uso de bengalas había sido "la frutilla del postre". De esta manera, los músicos pasarán a integrar la larga lista de procesados por la masacre que cobró 193 vidas en el boliche del barrio porteño de Once, entre los que se encuentran el empresario Omar Chabán, gerente del local; uno de sus empleados; seis ex funcionarios del área de Control de la Ciudad y tres policías. La grabación --que fue dada a conocer por Radio 10, la misma emisora en la que el grupo Callejeros había roto el silencio-- ya estaba incorporada a la causa, según manifestó Juan Di Natale apenas tomó estado público. La declaración del baterista se había realizado en el marco de una entrevista periodística el 30 de diciembre, a la mañana, antes del incendio, que tenía por objetivo ser difundida el 31 de diciembre. Las manifestaciones parecieron colisionar con la estrategia de comunicación que utilizó el grupo en sus apariciones públicas, debido a que en ellas intentaron ponerse a resguardo de las acusaciones. Más aún, negaron tener conocimiento de la cantidad de personas que estaban en el momento del desastre dentro del boliche, así como manifestaron una y otra vez que estaban en contra del uso de pirotecnia. "Fueron tres shows intensísimos... tres días con 4.000 personas", contó Alvarez, al tiempo que reconoció que en los recitales "hubo muchísima bengala. La verdad que fue la frutilla de la torta". La difusión de los polémicos dichos habría sido clave para la toma de la decisión de convocar como acusados a los Callejeros, aunque a última hora todavía no se había determinado bajo qué cargo deberían responder. Por otra parte, la comisión investigadora de la Legislatura porteña continuó ayer con la toma de declaraciones a testigos y personas vinculadas con la tragedia. Ante los diputados que integran el grupo de trabajo, el ex coordinador de la Unidad Polivalente de Inspectores porteña, Horacio Santinelli, consideró que la tragedia ocurrió "porque el control de los boliches se lo dejaron a los empresarios". Según explicó la diputada Fernanda Ferrero, presidente de la comisión, la declaración de Santinelli reveló la existencia de que "había connivencia en ciertos sectores de la subsecretaría de Control comunal para no actuar". El otro testigo citado, Juan Carlos Loupias, ex asesor de la subsecretaría de Seguridad Urbana, presentó un escrito ante los legisladores, en el que reflejó su posición sobre los cuestionamientos que le hacen frente a la tragedia y puso como antecedente la declaración de "falta de mérito" que le dictó Lucini, al no encontrar responsabilidad suya ante la masacre.
El Ojo Digital Sociedad