POLITICA: EXTRAÑOS HECHOS QUE POCOS MEDIOS MENCIONARON

Sobre el robo del auto de Alicia y el asalto a la inmobiliaria de Máximo Kirchner

Los medios omitieron en una forma ciertamente sospechosa dos hechos de importancia, que no tienen relación con la realidad de aguda inseguridad que atraviesa el país.

21 de Julio de 2010
Hace algunos días trascendieron en pocos medios informativos dos noticias, convenientemente "silenciadas" por medios masivos de Capital Federal. EL primero de ellos tuvo relación con la sustracción de un automóvil de marca Peugeot modelo 406 que la custodia de Alicia Kircher utiliza regularmente en los traslados de le hermana del Presidente y Ministra de Desarrollo Social, en sus recorridos por Capital Federal y el Conurbano. El automóvil, finalmente fue hallado el pasado miércoles en Fuerte Apache, el tristemente célebre complejo habitacional de Ciudadela. Fuentes policiales confirmaron que el Peugeot 406 efectivamente pertenece a la custodia de la funcionaria y que fue recuperado "prácticamente entero". El otro hecho para destacar es el "allanamiento" que desconocidos realizaron en las oficinas de la Inmobiliaria "Sanfelice & Sancho" propiedad de Carlos Sancho, vicegobernador de Santa Cruz, y de San Felice, un empresario local. Allí habrían robado una computadora de las oficinas donde trabaja Máximo Kirchner, hijo del Presidente de la Nación. El local linda con el domicilio particular de Sancho, y se supo que los desconocidos no buscaban dinero, lo que plantea alguna sospecha sobre sus verdaderas intenciones. Precisamente, la nula aparición de Máximo Kirchner en los medios llama la atención al lector regular de noticias, que interpreta semejante bajo perfil como sospechoso, y más teniendo en cuenta la situación opuesta -de excesiva exposición-, que caracterizó en su momento a Carlitos Menem y a los hijos del ex presidente De la Rúa. Las "malas lenguas" de turno no se cansan de propagar la idea de que tal "desaparición" mediática está relacionada con una supuesta adicción a las drogas de Máximo, y algunos, como Guillermo Cherasny han ido incluso más lejos, cuando señalaron que uno de los últimos viajes presidenciales a Santa Cruz -precisamente cuando los medios reclamaban la presencia del Presidente frente al tema de República Cromañón- en realidad estaba relacionado con una internación por sobredosis de Máximo. En definitiva, tanto el robo del Peugeot 406 de Alicia Kirchner como el "asalto" a la inmobiliaria donde se desempeña regularmente Máximo Kirchner, son hechos que merecen más de una lectura y mínimamente permiten extraer la conclusión de que los perpetradores intentan enviar un mensaje al Presidente y su actual Administración. Semejante mensaje tal vez pretende comunicar al Presidente -de la peor manera- que el camino a transitar de aquí a octubre no será fácil.
El Ojo Digital y Opi Santa Cruz