INTERNACIONALES: PHILIP GIRALDI | REALPOLITIK

Es hora de poner fin a las tonterías de Volodymyr Zelensky

En tanto corresponde impedir una Tercera Guerra Mundial.

22 de Noviembre de 2022


Una semana atrás, el gobierno ucraniano bien pudo, deliberadamente haber atacado a su vecino Polonia, en un intento por distraer la atención de la OTAN hacia una guerra versus Rusia. El incidente involucró a un misil que impactó contra una instalación de procesamiento de granos en territorio polaco, y que segó la vida de dos granjeros. De inmediato, el presidente ucraniano Volodymyr Zelensky responsabilizó a Moscú por el desarrollo, aún cuando -seguramente- debió saber que el misil había sido disparado desde Ucrania, lo cual significa que buscó emplear una maniobra del tipo 'false flag', con miras a crear una falsa narrativa sobre los hechos. Asimismo, y de súbito, exigió la intervención de OTAN, citando su Artículo V, el cual consigna que todos los miembros de la alianza deben ir en respaldo de cualquier miembro individual, de ser atacado. Un ataque contra uno es un ataque contra todos. Polonia es miembro de OTAN, y en la actualidad cuenta con una base militar estadounidense de carácter permanente.


Volodymir Zelensky
Los medios masivos de comunicación en los Estados Unidos, más particularmente Associated Press y NBC News, de inmediato repitieron el cuento compartido por Zelensky; sin embargo, la narrativa intitulada 'culpemos a los rusos' comenzó a desenredarse. Los restos del misil caído revelaron que se trató de uno perteneciente al arsenal ucraniano y utilizado para defensa aérea, y que no se hallaba en los stocks actuales rusos. Por cierto, tanto Moscú como Washington de seguro contaban con imágenes satelitales que probarían la verdadera trayectoria del misil que golpeó a Polonia.


Aquellos en el gobierno estadounidense y en los medios y que buscaron respaldar a Zelensky comenzaron a sugerir que el misil ucraniano debió, de alguna manera, exhibir algún problema en su funcionamiento que lo llevó a aterrizar en suelo polaco -calificando al asunto como un infortunado accidente. Otros, no obsatante, y más entendidos con las características técnicas del arma compartieron su escepticismo, atendiendo a un costado probablemente más siniestro del relato.

Hacia el pasado jueves, esta narrativa ya había desaparecido de gran parte de los medios, en razón de que ya no conformaba la narrativa aceptada del misil lanzado por Moscú, sobre la cual Zelensky seguía insistiendo. El presidente Joe Biden, quien se hallaba en la conferencia del G-20 en Indonesia en ese instante, respondió a las noticias, expresando que no existía información de inteligencia que confirmara que el vector había provenido de Rusia, y que la trayectoria aparente ciertamente no respaldaba esa perspectiva. Irónicamente, Biden había autorizado previamente unos US$37 mil millones extra en asistencia financiera para Ucrania, el día anterior al incidente en Polonia.

El mensaje de Biden, buscando morigerar la potencial crisis, fue reiterado por el Pentágono y por personal de la comunidad de inteligencia durante ese día, aún cuando el Secretario de Defensa estadounidense Lloyd Austin enfatizó que los Estados Unidos continuarían apoyando a Ucrania 'por todo el tiempo que sea necesari0'. Asimismo, agregó el funcionario que, aún cuando el misil era ucraniano, la responsabilidad seguía siendo rusa -aunque prefirió obviar los motivos. Jens Stoltenberg, secretario general de OTAN, también promocionó el relato de Austin, comentando que el incidente 'probablemente había sido provocado por un misil de la defensa aérea ucraniana disparado para defender a territorio de Ucrania... Esto no es culpa de Ucrania. Rusia mantiene la responsabilidad sobre lo sucedido en Polonia ayer, porque es un resultado directo de una guerra en actual desarrollo'.

Dado el hecho de que Zelensky había estado haciendo y diciendo todo lo posible para empujar a OTAN a combatir contra Rusia para defenderlo, entiendo que el ataque con el misil fue, muy probablemente, un intento deliberado de confeccionar una iniciativa del tipo 'false flag', con el objeto de iniciar una guerra mucho más amplia. La alternativa de que semejante conflicto rematase en una de carácter nuclear revela lo desaprensivo que Zelensky es capaz de ser. Un diplomático de un país de OTAN con base en Kiev dijo al matutino Financial Times: 'Esto se está convirtiendo en un ridículo. Los ucranianos están destruyendo nuestra confianza en ellos. Nadie está responsabilizando a Ucrania, y Ucrania miente abiertamente. Esto es más destructivo en sí que el misil'.

Sin lugar a dudas, Zelensky es perfectamente capaz de hacer cualquier cosa, en tanto ninguna mentira es lo suficientemente grande para este comediante retirado que hoy disfruta de ser una celebridad. Personalidades de Hollywood como Sean Penn y Ben Stiller insisten en el peregrinaje a Kiev para estrechar manos, abrazarse y para repetir montajes fotográficos. Y el calendario de Zelensky también incluyen viajes a los Estados Unidos. El 30 de noviembre, según se ha informado, se apersonará en Nueva York para un 'evento en vivo', en donde harán de anfitriones el New York Times, Sam Bankman-Fried, Larry Fink (CEO de Blackrock), y Janet Yelen -Secretaria del Tesoro- como oradores principales.

En efecto, Zelensky estará codo a codo con el MISMO Sam Bankman-Fried, si es que acaso se presenta. El mencionado ha monopolizado no pocos titulares de las noticias recientemente, tras haber ejecutado el más importante fraude monetario en la historia, provocando pérdidas en miles de millones de dólares para inversionistas a consecuencia del colapso del exchange dedicado al trading FTX. Y bien pudiera suceder que Zelensky y Bankman-Fried se conocieran de antemano. El primero fue un aportante de capital de magnitud para dirigentes del Partido Demócrata, habiendo donado US$ 40 millones para proyectos de 'cacería de votos' del recientemente finalizado ciclo electoral americano. Bankman-Fried es el segundo mayor aportante de fondos al partido luego de George Soros, y también ha realizado donativos a causas cuya intención era respaldar a Ucrania de manera incondicional -y que los Demócratas ciertamente apoyan. En abril pasado, Bankman-Fried ofició de anfitrión en una conferencia, en su domicilio de US$ 40 millones en Bahamas, sitio en el que se apersonaron Tony Blair y Bill Clinton. De igual modo, el personaje ha sido un generoso aportante del Comité Americano-Israelí de Asuntos Públicos (AIPAC).

Se ha conocido nutrida especulación en torno de los nunca monitoreados -ni tampoco regulados- miles de millones de dólares de dinero aportado por los contribuyentes estadounidenses, con destino al notablemente corrupto gobierno ucraniano. Complementariamente, se ha comentado cómo este aspecto garantizó una mecánica perfecta para el lavado de dinero a gran escala. Larry Johnson, ex analista para la Agencia Central de Inteligencia (CIA), se ha dedicado a estudiar al detalle el asunto de FTX y Ucrania; él ha observado que 'El colapso financiero de FTX (...) está exponiendo evidencia que ilustra que los Demócratas, algunos Republicanos, los ucranianos y FTX, organizaron un elaborado ecosistema financiero de sobornos. El mismo involucró a figuras prometedoras del Congreso, que enviaron dinero a Ucrania luego de una importante contribución de parte de un benefactor de los Demócratas -en el caso que nos ocupa, el titular de FTX, Sam Bankman-Fried. Una vez que los dólares estadounidenses eran acreditados en una cuenta bancaria ucraniana, el presidente Zelensky y sus acólitos desviaron porciones de esos fondos para adqurir criptomonedas a FTX. A su vez, FTX envió parte de esos fondos de regreso, hacia los miembros del Congreso que cooperaban con el ecosistema, y también al Comité Nacional Demócrata'.


Otros informes revelaron que Bankman-Fried había establecido una 'sociedad de criptodonativos' en conjunto con el gobierno ucraniano, modelo que generó un aproximado de US$ 60 millones para 'asistir' a Zelensky. El sitio del gobierno ucraniano que supo informar algunos detalles de ese consorcio fue misteriosamente 'eliminado' dos días antes de que el desastre de FTX llegara a la luz pública. El relato de FTX, de obtener la correspondiente verificación, subraya la naturaleza del 'pozo sin fondo' ucraniano. Hunter Biden obtiene un puesto muy bien remunerado en el directorio de una firma, con el objeto de hacer de intermediario para su padre y, ahora, Ucrania se muestra directamente involucrada en un fraude financiero masivo. Mientras tanto, Joe Biden continúa despachando miles de millones de dólares adicionales al delincuente Zelensky.

Pero el asunto de principal importancia es la guerra. Aún asumiendo que el misil ucraniano que impactó en Polonia acusó un desperfecto, Zelensky emerge del proceso mal parado, conforme se esmeró en responsabilizar a Rusia -comprobándose luego que no era cierto. El mandatario ucraniano utiliza su narrativa para amplificar dramáticamente el conflicto bélico, creando una situación que hubiese llevado a OTAN a un enfrentamiento directo que, fácilmente, pudo tornarse nuclear. En efecto, Zelensky busca comprometer la intervención de OTAN. Pero lo que es potencialmente peor, si es que se trató de una provocación del tipo 'false flag' para tal fin, es que sus tácticas no son crudamente condenadas por todas las partes involucradas. Más allá de eso, los Estados Unidos y OTAN cargan con la pesada carga de semejante 'aliado'; cuando en realidad deberían desprenderse de cualquier respaldo al conflicto, y convocar a una solución negociada para ponerle fin. Joe Biden, si es que acaso mantiene un ápice de integridad -o quien sea que controla al presidente estadounidense- no debería pensarlo demasiado, y tomar esa decisión.



Artículo original, en inglés


 

Sobre Philip Giraldi

Especialista en contraterrorismo; ex oficial de inteligencia militar de la Agencia Central de Inteligencia de los Estados Unidos de América (CIA). Se desempeña como columnista en medios estadounidenses, y como Director Ejecutivo en el Council for the National Interest. Giraldi es colaborador frecuente en Unz.com, Strategic Culture Foundation y otros. En español, sus trabajos son sindicados con permiso en El Ojo Digital.