INTERNACIONALES: J. MARULANDA

Colombia: Bogotá, la Estambul de América Latina

Luego que el ex presidente Juan Manual Santos desmantelara el DAS...

18 de Junio de 2020

 

Luego que el ex presidente Juan Manual Santos desmantelara el DAS y la inteligencia militar, el máximo nivel de confidencialidad que se maneja hoy en Colombia es el de la discreción personal.

Bogotá, ColombiaHoy, todo secreto puede comprarse. Las agencias gubernamentales de inteligencia que aún operan, lo hacen con tecnología prestada de los Estados Unidos de América, del Reino Unido, o comprada a proveedores que venden los mismos equipos, y mejorados, a nuestros potenciales rivales.

Los principales casos de corrupción son revelados a Colombia por el FBI, la DEA, la CIA o el MI5, algunas de las quince agencias extranjeras de I y CI registradas oficialmente. Las pruebas de esos escándalos se venden a la prensa amarillista, y los acusados se ríen de cualesquiera de los tres sistemas de justicia actuantes, ninguno confiable, todos 'adquiribles'.

A pesar de su inopia, funcionarios de contrainteligencia han detectado recientemente a un extremista islámico vigilando la Brigada de Fuerzas Especiales en Melgar, a un ciudadano cubano merodeando la base aérea de Palanquero, a ciudadanos venezolanos penetrando el Comando Aéreo de Transporte Militar en Bogotá y la base Naval de Puerto Carreño -de donde se 'volaron' tres lanchas de combate de la Armada-, a diplomáticos chavistas coordinando con las FARC y ELN, y a policías maduristas observando unidades militares en la Guajira, o comprando la ciudadanía colombiana. Capítulo aparte son los cárteles mexicanos que, según una viciada investigación particular, controlan el tráfico de drogas en el país. Ahora, se destapa la red de corrupción y espionaje del agente chavista Alex Saab, quien ojalá no corra la misma suerte de Walil Makled (2011), devuelto por el Nobel a sus patrones en Miraflores.
 
Espías y mercenarios han sido parte de la historia de Colombia. En 1948, durante la Conferencia Panamericana, agentes comunistas complotaron durante el Bogotazo; en 1961, el 'coronel' Antonio Dahud entrenó a 'Tirofijo', con dineros enviados por un ciudadano ruso desde México; la pseudoperiodista finlandesa Heina Rautaavara posó con alias 'Chispas', miembro de PCC, en 1962; el agente del gobierno alemán y amigazo de los narcoelenos, Werner Mauss, en 1983, revivió la organización castrista; el israelí Yahir Klein capacitó a paramilitares, y el ciudadano británico Peter McCleese realizó dos tours, el primero para atacar a las FARC, y el segundo, para atacar a Pablo Escobar, ambos a mediados de los años ochenta; tres explosivistas irlandeses en el 2001 entrenaron a las FARC; en el 2007, una holandesa despistada y otras europeas, cohabitaron con las FARC; un argentino, un chileno, ecuatorianos y venezolanos, esbirros al servicio de los carteles de las FARC o ELN, por citar unos casos, han delinquido en toda la geografía nacional. Hace poco, mercenarios estadounidenses lanzaron, desde la Guajira colombiana, una ridícula invasión a Venezuela.

No es de extrañarse: en 1818, la guerra contra España contó con la participación de mercenarios británicos, irlandeses (James Rook) y hannoverianos.

Especial mención merece Cuba, que posee el dosier de todos quienes desfilaron por sus instalaciones durante el negociado narcoterrorista Santos-FARC. Grabaciones secretas, fotos, videos, documentos, reposan en los archivos del G2 y que, de acuerdo a la conveniencia, serán compartidos con el SEBIN y la DGCIM venezolanos, con el DID nicaragüense o con quien consideren conveniente. Los oficiales e informantes del G2 campean por el país, hilando contactos, analizando dinámicas sociales y políticas del momento, planeando escándalos desestabilizadores, filtrando noticias, ayudando a caotizar al país mientras células de Hezbolá lavan dinero y acumulan información sobre potenciales blancos estadounidenses e israelíes.

¿Qué hay para espiarle a Colombia? En asuntos de Defensa Nacional, muy poco. 

Pero a Bogotá, por su excepcional ubicación frente al problema geoestratégico venezolano, Estados Unidos, México Nicaragua, Cuba, Venezuela, Rusia, el Reino Unido, Alemania, Francia, España, Irán, Hezbolá, China y Turquía por los laditos, la han convertido en la Estambul de Latinoamérica, recordando la importancia de esta capital turca durante la Guerra Fría.

Y las consecuencias están a la vista: un nuevo ciclo de violencia que estalla (hace 48 horas, alias Gentil Duarte asesinó seis soldados, e hirió siete mas, mientras un verborreico senador, maliciosamente, acobardó al Estado para que suspendiera los legales y legítimos bombardeos).

Vaya insensatez. Miren a Venezuela.

 
Sobre John Marulanda

Licenciado en Filosofía e Historia de la Universidad Santo Tomás de Aquino, y Abogado de la Universidad de la Gran Colombia, Marulanda se desempeña como consultor internacional en seguridad y defensa. Es Coronel (R) del Ejército de Colombia.