ECONOMIA INTERNACIONAL: JAMES M. ROBERTS & JORDAN PARRISH

América Latina abandona el socialismo, para inclinarse hacia el libremercado

El intento sudamericano de construir una variante de la Unión Europea...

27 de Junio de 2019


El intento sudamericano de construir una variante de la Unión Europea, pero enfocada hacia la izquierda, se encuentra en terapia intensiva.

Ese nucleamiento regional, por entonces dado en llamar Unión de Naciones Sudamericanas (UNASUR), fue fundada en 2008 y financiada por la Venezuela de Hugo Chávez, por entonces rica en petróleo. El grupo confesó su objetivo de difundir el 'socialismo del siglo XXI' de Chávez, a lo largo de América del Sur.

Presidentes de América del Sur, Macri, Bolsonaro, Duque, PiñeraAños después de la muerte de Hugo Chávez, y consolidada la destrucción de Venezuela a partir de las políticas socialista por aquél implementadas, el resto de Sudamérica ha tomado nota, eligiendo a presidentes pertenecientes al orbe político del centroderecha en Brasil, la Argentina, Chile y Colombia. Todos ellos simpatizan con un giro hacia la economía de libremercado, por sobre el populismo socialista.

Cuadro, Heritage 1Estas cuatro naciones han liderado la creación de un nuevo núcleo -el Foro para el Progreso de América del Sur- el cual, de acuerdo al presidente chileno Sebastián Piñera, funcionará 'sin ideologías ni burocracia y, en lugar de ello, portando un compromiso absoluto con la libertad, la democracia y los derechos humanos'.

Cuadro, Heritage 2Se ha propuesto que el foro reemplace al viejo esquema grupal de izquierda de la UNASUR, que Chávez supiera construir junto a las otrora gestiones socialistas de Brasil, la Argentina y Ecuador. Brasil y Argentina ya renunciaron a su membresía en UNASUR, e idéntico camino han seguido Paraguay y Perú.

Incluso Ecuador, en lo que consignó una sorprendente novedad bajo la gestión del presidente Lenín Moreno, ha renunciado a UNASUR, para favorecer al novedoso consorcio -lo cual representó un duro golpe para su predecesor, Rafael Correa. Y no es difícil comprender por qué.

Colombia y Chile, líderes en la nueva organización, también son líderes regionales en el Indice de Libertad Económica (desarrollado por el think tank estadounidense Heritage Foundation). Esto significa que esos países disfrutan hoy de una prosperidad superior, habida cuenta de que respetan el Estado de derecho y promocionan libertad para hacer negocios, bajo un marco de eficiencia regulatoria.

Los países del nuevo conglomerado exhiben un puntaje promedio de 60 unidades en sus respectivos puntajes de libertad económica. Aquellos que constituyeron el grupo fundado por Chávez promediaban 48.3, cifra que sería todavía más baja si Uruguay abandonase ese grupo.

Cuadro, Heritage 3En los países con economías menos libres, el desmoronamiento del Estad ode derecho implica que existirán riesgos significativamente mayores de que el gobierno proceda con mecanismos de expropiación o confiscación de la propiedad privada.


Por ejemplo, las tierras tuteladas por productores agropecuarios que cayeron en desgracia frente al régimen de Hugo Chávez Frías terminaron siendo expropiadas por el gobierno venezolano, para ser luego otorgadas a pequeñas comunas de agricultores y cooperativistas, en general administradas por individuos que abiertamente carecían de conocimientos en materia de agricultura. Como resultado, la producción agrícola en esa nación se desplomó, sin importar que la demanda por alimentos se incrementara.

En síntesis, los países de la vieja organización han visto languidecer sus economías, mientras que aquellos que se sumaron al nuevo Foro Sudamericano, compuesto por naciones con mayor respeto por el Estado de derecho, han consolidado notables progresos en lo que respecta a reducción de la pobreza, y ampliación de las libertades económicas.


Si la América del Sur continúa desandando esta senda, el futuro del subcontinente, sin lugar a dudas, asomará más auspicioso.



Artículo original, en inglés, aquí

* Trabajo desarrollado con la colaboración de Jordan Parrish

 

Sobre James M. Roberts

Es Analista en temáticas de Libertad Económica y Crecimiento en el Centro para Comercio Internacional y Economía (CITE). Responsable de tareas de investigación, desarrollo y análisis del Indice de Libertad Económica (desarrollado en conjunto entre la Fundación Heritage y The Wall Street Journal). Sirvió durante 25 años en el Departamento de Estado, desempeñándose en el servicio exterior en las embajadas de los Estados Unidos en México, Portugal, Francia, Panamá y Haití