INTERNACIONALES : DANIEL KOCHIS

Economía e inmigración, los desafíos del nuevo gobierno populista de Italia

El movimiento italiano 'Cinco Estrellas' y el partido Lega, lograron dar forma a un gobierno de coalición...

23 de Junio de 2018

El movimiento italiano 'Cinco Estrellas' y el partido Lega, lograron dar forma a un gobierno de coalición el próximo-pasado 1ero. de junio, tras meses de conversaciones -las cuales siguieron a las elecciones parlamentarias de comienzos de marzo. El gobierno actual, liderado por el primer ministro Giuseppe Conte, es el primer gobierno de orden 'populista' que llega al liderato político de una nación de primera línea en la Unión Europea (UE). 

Italy -la cuarta economía más grande en el Viejo Continente- está hoy recuperándose lentamente de su peor recesión desde finalizada la Segunda Guerra Mundial, en tanto la economía del país se exhibe como más pequeña de lo que era previo a la crisis financiera de 2008. El desempleo continúa siendo un problema recurrente. La tasa de parados en Italia es del 11.2%, en tanto el desempleo entre la población joven y económicamente activa asciende a un sorprendente 33.1%. Los bancos italianos aún retienen altos niveles de deudas perjudiciales en sus portfolios, lo cual conduce a preocupaciones -aún cuando más recientemente éstas disminuyeron- de cara a una eventual crisis bancaria italiana. El descontento público con la economía, y las preocupaciones vinculadas con el Euro también son palpables. Mientras que una mayoría de italianos continúa respaldando la iniciativa de mantenerse en la Eurozona, lo cierto es que el apoyo al Euro es inferior al registrado en Austria, Francia, Irlanda, Alemania, Grecia, los Países Bajos o España.

Política italiana, Salvini, Conti, Crisis italianaLa deuda italiana llegó a posicionarse en un impresionante 131.8% del PBI en 2017, y funcionarios de la UE ya habían advertido que los planes de gasto gubernamentales -de ponerse en práctica- entrarían en conflicto con las reglas sobre presupuesto de la Eurozona. Las prioridades fiscales del gobierno en Roma podrán ser evaluadas ni bien se conozca el presupuesto oficial, en octubre próximo. Mientras que Lega, que cuenta con una base política de magnitud en el norte industrializado, se muestra más inclinado a respaldar políticas de económicas de libremercado, Cinco Estrellas favorece un criterio más bien intervencionista de la economía, que agrada a sus votantes del sur pobre de Italia.

Cinco Estrellas ha sabido apoyar políticas públicas como ser incrementos en el pago de beneficios sociales, y ha hecho campaña a caballo de la promesa de crear un ingreso universal básico de al menos €780 (un aproximado de US$910) mensuales para personas de más de 18 años que no cuentan con un empleo, y que registran ingresos por debajo de la línea de la pobreza -propuesta que se estima costará a Italia un aproximado de decenas de miles de millones de Euros anualmente, de ser puesta en marcha. Cinco Estrellas y Lega han incrementado rápidamente su popularidad, quedándose con el 50% de los votos del total, en los comicios del pasado 4 de marzo. Una encuesta llevada a cabo en 2018 por Eurobarometer detectó que la inmigración, el desempleo y la economía son las tres principales preocupaciones de la ciudadanía italiana.

La creencia de que el gobierno anterior fracasó a la hora de intentar lidiar con estos problemas, llevó a la promoción de un sentimiento anti-establishment en el electorado italiano, que se manifestó en los resultados ya vistos en los comicios. En tanto los problemas económicos de Italia son importantes a la hora de comprender a la marejada antiestablishment, la recurrente crisis migratoria continúa siendo la principal preocupación en el país. Al igual que el resto de Europa, Italia está siendo afectada de manera importante por la referida crisis.

La relativa cercanía de la ruta de los Balcanes (ruta que va de Turquía a Grecia y, en el norte, a través de Macedonia y el oeste de los Balcanes hacia Austria y Alemania), y un vacío de seguridad en Libia, se han combinado entre todos para dar lugar a un escenario con miles de migrantes, muchos provenientes del Africa subsahariana, trasladándose a lo largo del Mediterráneo para arribar a suelo italiano. Desde 2011, 750 mil migrantes han llegado a Italia, un país de 60 millones de habitantes -más o menos la misma población que los estados americanos de California y Florida, combinaddos. Tanto Cinco Estrellas como Lega han hecho campaña prometiendo hacerse cargo de la crisis migratoria y de sus efectos en la sociedad italiana.

La reciente negativa de Italia a permitir el ingreso de un navío con 629 migrantes es fiel indicativo del deseo de Roma de enviar un mensaje sobre el tema, y exhibió el poder con que cuenta Matteo Salvini, ministro de Interior, y líder de Lega. Los resultados de la crisis de los migrantes sin dudas concentrarán las mayores cuotas de atención en la cumbre de la UE este próximo domingo, conforme un estudio de opinión de YouGov halló que la mayoría de los entrevistados en Dinamarca, Finlandia, Francia, Alemania, Grecia, Lituania, Polonia, Suecia y el Reino Unido ven a la inmiración y al terrorismo como las dos principales preocupaciones a las que la UE debe hacer frente.

El impacto político de la crisis de los migrantes es amplia, habiendo afectado también a las recientes elecciones en Eslovenia y que, por estas horas, mantienen en vilo a la canciller alemana Angela Merkel, en lo que potencialmente podría significarle una puja fatal con sus aliados políticos en Bavaria. En Italia, el arribo recurrente de migrantes -aún mientras otros cientos de miles que llegaron previamente se encuentran hoy en pleno proceso de asimilación- comportará consecuencias de magnitud. Roma habrá de tomar cartas en el asunto de la migración mientras habrá también de ofrecer respuestas para el desempleo, un sector bancario en riesgo, y un elevadísimo gasto público.

Al cierre, algo es seguro: las respuestas a todos esos problemas habrán de comportar repercusiones, mucho más allá de las costas italianas.



Artículo original, en inglés, en éste link

 

 

Sobre Daniel Kochis

Es Analista de política exterior en la Fundación Heritage, en Washington, D.C. Su trabajo es publicado también en el sitio web The Daily Signal.