POLÍTICA ARGENTINA: PABLO PORTALUPPI

Mar del Plata: luces y sombras de la otrora Ciudad Feliz

Apenas por debajo de la ciudad de La Plata, pero bien lejos de La Matanza, Mar del Plata es el tercer distrito...

19 de Octubre de 2017
Apenas por debajo de la ciudad de La Plata, pero bien lejos de La Matanza, Mar del Plata es el tercer distrito de mayor caudal electoral de la estratégica e inabarcable Provincia de Buenos Aires. Con 566.789 electores, lo que representa el 4,39% del padrón bonaerense, el otrora alegre balneario ha perdido hace rato su condición de mera ciudad turística, para dar paso a una urbe cada vez más imponente. El último censo, del año 2010, arrojó que en el partido de General Pueyrredón viven poco más de 614.000 habitantes, siendo su población mayor a la de nueve provincias argentinas. 
 
La ciudad se ha convertido en un escenario inevitable de proselitismo político y de desfiles de dirigentes. En Mar del Plata, abrió su campaña para las últimas PASO la ex presidente Cristina Fernández de Kirchner. A su vez, la Gobernadora María Eugenia Vidal apuesta a conseguir el próximo domingo 22 de octubre más sufragios de los ya cosechados en agosto: la lista de candidatos a concejales locales, encabezada por Vilma Baragiola, obtuvo casi el 40% de los sufragios, mientras que Esteban Bullrich orilló el 45%.
 
Mar del PlataEl intendente de Mar del Plata –General Pueyrredón- desde 2015 es el Dr. Carlos Fernando Arroyo, un ex director de escuela dueño de una dilatada carrera política desde el regreso de la democracia en 1983. Fundador del partido vecinalista Agrupación Atlántica, el jefe comunal supo capitalizar mejor que nadie el hartazgo de la ciudadanía hacia el ex intendente Gustavo Pulti, quien compitió por un tercer período consecutivo de gobierno. Aliado a Cambiemos para la campaña de 2015, Arroyo fue víctima de una feroz embestida en su contra del todopoderoso Florencio Aldrey Iglesias, dueño de los más reconocidos hoteles de la ciudad y de los principales medios de comunicación locales, entre ellos el diario La Capital, lo que no impidió su contundente triunfo. Hoy, a casi dos años de haber asumido el nuevo gobierno, el matutino del empresario español continúa con sus fuertes críticas a la gestión local, pero supo aliarse estratégicamente a la Gobernadora María Eugenia Vidal. Pese al resonante triunfo oficialista de agosto, la relación entre la mandataria bonaerense y el intendente se exhibe como prácticamente inexistente. 
 
Desde que comenzó la campaña electoral, Vidal evitó cualquier foto con Arroyo en sus frecuentes viajes a la ciudad. Pero nadie arriesga explicaciones para semejante destrato. Las razones esgrimidas desde el entorno de la gobernadora son varias: la parquedad y las escasas cualidades de comunicador del intendente; su marcada resistencia a usar celulares; su poca propensión a escuchar consejos; las cuentas en rojo del municipio; la alta desocupación; las renuncias en el gabinete (en menos de dos años se produjeron cerca de 30). Si bien desde el círculo próximo al jefe comunal lo niegan, la frialdad de la relación les genera cierta indignación. “El triunfo de agosto también fue de Arroyo”, dicen desde el gobierno local. Y completan: “Si las cosas en la ciudad estuvieran tan mal como dicen, habríamos perdido. El marplatense siempre vota mirando lo local”. Para suscribir lo que afirma este colaborador del intendente, basta subrayar un dato: en las elecciones 2007, en pleno auge kirchnerista, en Mar del Plata ganó Elisa Carrió. Y se impuso a nivel local Gustavo Pulti, del vecinalismo. La alianza de Pulti con el kirchnerismo fue posterior a su triunfo. 
 

Cifras y datos
 
Hay algunos detalles que parecen desmentir las acusaciones que hacen desde La Plata. Si bien la última medición del INDEC arrojó que Mar del Plata es, con el 11,9%, la ciudad con mayor desocupación del país, no es menos cierto que la falta de empleo es un problema que se viene registrando en estas costas desde mediados de la década del noventa. Las políticas implementadas por el menemismo impactaron de manera negativa en la ciudad, modificando dramáticamente su estructura industrial: “La paridad 1 a 1 con el dólar destruyó las tres grandes industrias de Mar del Plata: el puerto, la textil, y el turismo. Desde ese entonces no pudimos recuperarnos”, afirma un empresario local. Pese al fuerte crecimiento registrado en la economía nacional durante los años kirchneristas, en especial entre 2003 y 2011, la desocupación en General Pueyrredón nunca logró perforar el 10%: en 2013, la tasa fue del 11%; y en diciembre de 2015, cuando Gustavo Pulti dejó el gobierno, era del 11,8%.
 
El problema del desempleo es estructural. Lamentablemente desde el municipio no diseñamos la política económica, eso viene del gobierno nacional. En ese sentido, no es mucho lo que podemos hacer”, subraya un funcionario municipal. Para intentar paliar este flagelo, desde la secretaría de Desarrollo Productivo a cargo de Ricardo de Rosa le informaron a este medio una serie de obras en ejecución y proyectos a concretar: la ampliación del Parque Industrial; la conversión de la terminal portuaria en un Puerto Logístico Exportador; la atracción de inversiones para la creación del Polo de Industrias Creativas y del Conocimiento y del Conglomerado Productivo Textil Confeccionista. Por último, la implementación de un Mapa Productivo del partido.   
 
El déficit heredado de la gestión de Gustavo Pulti, según cifras oficiales, fue de $743 millones. Y la deuda con proveedores, de $636 millones. De este total, $104 millones correspondían a la seguridad social de los empleados municipales, mayormente a las obras sociales. Para el ejercicio 2017, el gobierno presentó un presupuesto de $6.667 millones, lo que daría aproximadamente un gasto mensual de $555 millones. A valores de hoy, el déficit de la gestión anterior representaba prácticamente dos meses de presupuesto. Teniendo en cuenta la cercanía que mantenía el ex intendente Pulti con el entonces gobernador Daniel Scioli, de quien se decía que giraba a la comuna el dinero para el pago de los salarios, el rojo de las cuentas públicas era casi injustificable. Entre 2007, cuando asumió Gustavo Pulti, y 2015, la planta de empleados municipales pasó de 7474 personas a 10.962, es decir, un crecimiento de más de un 45%. A su vez, los cargos políticos pasaron de 51 a 178 en 8 años. Desde la gobernación bonaerense le endilgan al gobierno de Arroyo que la comuna destina mucho dinero al pago de sueldos, y que los mismos son demasiado altos en función de las tareas realizadas. En 2013, la erogación en haberes representaba casi el 60%. En 2016, el 65%. Hoy por hoy, la comuna hace uso de un descubierto bancario para afrontar esta obligación.   
 
Al momento de asumir, el 10 de diciembre de 2015, el municipio no tenía para abonar ni sueldos ni aguinaldos. Las arcas estaban, literalmente, vacías. Un ex funcionario arroyista recuerda que “en mi despacho no había ni papel higiénico, ni pisapapeles. Hasta se habían robado los picaportes de las puertas”. Y agrega: “Para poder pagar los sueldos, tuvimos que cobrar por adelantado los cánones de la temporada de verano que se venía”. Cabe recordar una tapa del propio diario “La Capital” del 8 de junio de 2014: “El 40% de las escuelas marplatenses sigue con problemas edilicios”. La buena memoria nunca fue una virtud de los argentinos. 
 

Inseguridad y Justicia
 
El intendente Arroyo basó su campaña en la lucha contra la inseguridad. Aunque extrañamente su gobierno no tenga un secretario de seguridad formalmente designado (quién ocupó ese cargo al comienzo de la gestión duró apenas 7 días), la tasa de homicidios arroja resultados llamativos y tal vez subestimados por la opinión pública: mientras que en todo el año 2013 se registraron en la ciudad 89 asesinatos, lo que representaba la segunda tasa de homicidios de toda la provincia, en 2016 el índice bajó a la mitad: 42. Durante los primeros tres meses de 2015, se detectaron 28 crímenes. En su oportunidad, el fiscal hoy procesado Fabián Fernández Garello fue tajante en su diagnóstico: La violencia en la ciudad está conurbanizada”. El crecimiento del narcotráfico en Mar del Plata, a través más que nada de la presencia de “quioscos”, fue exponencial durante los años kirchneristas. Un informe policial reservado que circuló en marzo de 2015 consignó que la ciudad tenía todas las condiciones para convertirse en una suerte de nueva Rosario: desocupación, venta de estupefacientes, violencia en la periferia, y presencia crecientes de bandas marginales que dirimen sus cuestiones en tiroteos. 
 
En conformidad con versiones extraoficiales, el de Mar del Plata es el tercer puerto exportador de cocaína del mundo. En este sentido, cabe consignar que en los últimos años se ha registrado un fuerte incremento de prestamistas de origen colombiano, que ofrecen dinero cobrando intereses extrafalarios: “Prestan al 40 o 50%, pasando a cobrar todos los días”, asegura un “cliente”.  En paralelo, durante el último mes de agosto se registraron en la ciudad 5 amenazas de bomba diarias. 
 
Desde el gobierno local consignan que está en marcha un ambicioso plan de urbanización de algunos barrios periféricos de la ciudad, entre ellos Belisario Roldán. En dicho barrio ocurrió en 2016 el ataque a pedradas contra el presidente Mauricio Macri y la gobernadora Vidal. Algunos atribuyen el enojo de la mandataria con Arroyo a este violento episodio. Lo cierto es que la causa no ha registrado significativos avances desde que Alejandra Gils Carbó creara una Unidad Especial para investigar el atentado, luego de que el Juez Alfredo López criticara duramente el trabajo de los fiscales Daniel Adler y Laura Mazzaferri:Mar del Plata es un feudo de Justicia Legítima, había dicho el magistrado. La causa está radicada en el juzgado de Santiago Inchausti
 
Como se puede apreciar en la problemática aquí detallada, Mar del Plata ha pasado de ser sólo una villa turística a convertirse en una gran ciudad con sus inevitables complejidades. El problema es que sus habitantes, y en especial sus dirigentes, aun no lo han asumido.

 
Sobre Pablo Portaluppi

Es Analista en Medios de Comunicación Social y Licenciado en Periodismo. Columnista político en El Ojo Digital, reside en la ciudad de Mar del Plata (Provincia de Buenos Aires, Argentina). Su correo electrónico: pabloportaluppi01@gmail.com. Todos los artículos del autor, agrupados en éste link.