Qué esperar de las elecciones en Alemania

Este domingo, tendrá lugar uno de los procesos electorales más importantes en Europa. El pueblo alemán irá a las urnas para elegir un nuevo parlamento, y si acaso Angela Merkel habrá de continuar como canciller.

Alemania es una de las naciones más grandes del Viejo Continente. Es tanto el país más populoso del continente, como el que exhibe el más alto PBI. En su rol de importante aliado de los Estados Unidos en la OTAN, Alemania hace de anfitrión para bases militares de relevancia crítica, con más de 36 mil tropas americanas. El resultado de los comicios comportará implicancias para la seguridad transatlántica, el librecomercio y la respuesta europea ante la agresión rusa.

Merkel ha liderado los destinos de Alemania desde 2005. En la actualidad, su partido -la Unión Demócrata Cristiana, del centroderecha-, junto con el partido de la Unión Social Cristiana de Bavaria, gobiernan en medio de una amplia coalición con el Partido Socialdemócrata alemán, del centroizquierda. La popularidad de Merkel como líder se ha respaldado mayormente en el éxito económico del país.

En marzo de 2005, la tasa de desempleo en Alemania ascendía al 12.6 por ciento; y hoy es del 3.7%. El pasado año, el superávit comercial alemán, de US$280 mil millones fue el segundo más alto del globo, en gran parte gracias al euro, que logra mantener a las exportaciones alemanas más baratas de lo que serían en otro contexto macroeconómico.


¿Hacia una nueva coalición?

Se espera que la Unión Demócrata Cristiana y la Unión Social Cristiana se hagan de la mayor cantidad de asientos en el parlamento (o 'Bundestag', como se le conoce). Una encuesta reciente refiere que se ubican colectivamente en torno del 36% de la intención de voto, comportando los socialdemócratas un 22%, un 11% para el espectro populista Alternativa, un 10% para el partido Die Linke -de extrema izquierda-, un 9% para los Demócratas Libres -centroderecha-, y el partido de los Verdes -centroizquierda- registra un 8%.

Tras las elecciones federales de 2009, los demócratas cristianos y los unionistas de la Social Cristiana constituyeron una coalición junto a los Demócratas Libres. Estos últimos, que fracasaron a la hora de retener bancas en el parlamento durante los comicios de 2013, consignan un partido liberal desde lo económico, generalmente adoptando políticas pro-empresa y de libremercado. Los Demócratas Libres buscan retornar al Bundestag y, potencialmente, unirse en una nueva coalición con Merkel.

Una coalición con los Demócratas Libres habilitaría a Merkel a avanzar en políticas comerciales más libres de las que ha podido consolidar en su coalición con los socialdemócratas. Mientras que Alemania exhibe un ránking relativamente alto como una de las economías más libres del planeta (se ubica #26 en el Indice de Libertad Económica, preparado por el think tank estadounidense The Heritage Foundation en Washington, D.C.), ha caído al puesto #19 en 2013.


Crisis migratoria

Un tema que se ha apropiado de los titulares previo a los comicios germanos es el impacto recurrente de la crisis migratoria. Alemania ha acogido a casi dos millones de migrantes, y las políticas de puertas abiertas de Merkel ha generado una dinámica propia para refugiados que buscan asilo en suelo europeo. La decisión ha comportado efectos comprobables a nivel mundial. Desde entonces, Alemania ha sido objetivo de ataques terroristas, incluyendo un atentado en el Mercado de Navidad en Berlín, en diciembre pasado. Mi colega analista Robin Simcox escribió al respecto, recientemente:

Se han planeado más ataques contra Alemania solo en 2016, que en todo el periódo que va de entre 2000 y 2015. Merkel tiene razón -el terrorismo islamista era 'algo que Alemania ya tenía'. Pero, ahora, gracias a sus políticas, el país debe hacer frente a mucho más de ese peligro

El próximo gobierno en Berlín continuará lidiando con el impacto recurrente de la crisis migratoria. Amén de las preocupaciones en materia de seguridad, subsisten preguntas en torno del impacto de los migrantes en la propia sociedad alemana, lo cual va de la mano con los crecientes costos financieros de absorber nuevos migrantes del extranjero. Alemania gastó 21.7 mil millones de euros en migrantes en 2016, y el ministro de finanzas del país ha proyectado se gastarán más de US$ 86 mil millones entre 2017 y 2020, 'para alimentar, otorgar vivienda y entrenar a refugiados, así como también para asistir a las naciones de origen a que dificulten el flujo'.

Alemania, junto con naciones como Grecia e Italia, continúan presionando a muchas naciones en la Europa Oriental para que acepten cuotas de inmigrantes, en nombre de la 'solidaridad' en la Unión Europea. La reiteración de esta disputa refleja la profunda lucha de poder que existe entre la Comisión Europea y los Estados miembro, convirtiendo a la crisis migratoria en un terreno de pruebas para el futuro de la soberanía de los Estados nacionales en el Viejo Continente. Las políticas pro-migración de Merkel, en gran medida, han contribuído al crecimiento del espectro político Alternativa para Alemania, y ha motorizado fricciones con la Unión Social Cristiana, partido bavario que oficia de hermano de la Unión Demócrata Cristiana -que se opone a la política de puertas abiertas para migrantes implementada por Merkel.


Alianza en OTAN 

Bajo el liderato de Merkel, Alemania ha comenzado a ejercer un rol más relevante en el seno de OTAN, incrementando el gasto alemán en Defensa, y moviéndose en torno de la frontera de invertir un 2% de su producto bruto en ese apartado del presupuesto. Asimismo, Merkel ha desplegado tropas alemanas a Lituania, donde sirven como nación marco para la Presencia Aumentada de Avanzada de OTAN en aquel Estado báltico. En contraste, los líderes socialdemócratas han criticado la meta de inversión de 2% en Defensa, consignada por OTAN. Martin Schulz y Thomas Oppermann declararon recientemente: 'No solo es poco realista; simplemente, es un objetivo incorrecto'.

Schulz, ex presidente del parlamento europeo, también es un férreo defensor de los esfuerzos de integración en la Unión Europea, con el objetivo eventual de crear, incluso, un ejército de la UE.


Rusia 

La elección de este domingo consignará, de igual manera, una guía futura para las estrategias de la UE y de Alemania a la hora de contrarrestar la agresión rusa, incluyendo el mantenimiento de sanciones contra Moscú tras la anexión de Crimea, y los recurrentes actos de agresión rusos en Donbas. Hasta el momento, Merkel ha sido pionera en mantener las sanciones en función. Otros partidos políticos en Alemania, incluyendo a los socialdemócratas, generalmente exhiben una postura más conciliatoria con el Kremlin. Más parecido a lo que sucede con los Estados Unidos, Rusia busca influenciar el resultado de la elección germana. Thomas Haldenwang, presidente en ejercicio de la agencia de seguridad doméstica de Alemania, según se ha informado, declaró que Rusia utiliza medidas activas para influenciar a la opinión pública alemana.

Los partidos políticos germanos y las instituciones gubernamentales del país también han sido víctimas de ciberataques rusos. Por ejemplo, un ataque cibernético registrado en mayo de 2015 versus el Bundestag derivó en el robo de valiosa información, estimada en un aproximado de 16 GB. Un reciente informe del Consejo Atlántico identifica otras metodologías a través de las cuales Rusia intenta influenciar el discurso político en Alemania, incluyendo la difusión de enlaces en el Internet que redirigen a partidos políticos alemanes pro-Kremlin. El próximo gobierno en Berlín habrá de hacer frente a tal problemática, al igual que habrá de lidiar con cuestiones tales como la seguridad energética, las complejas relaciones diplomáticas entre Alemania y Turquía, y con el asunto de si acaso la UE tiene o no apetito para reformarse luego de acontecido el Brexit en el Reino Unido.

El resultado de los comicios de este domingo, y el tipo de coalición que de allí emerja -si sucediera que ningún espacio se hace de la mayoría-, ayudará a los efectos de arrojar luz sobre si las políticas alemanas en los temas aquí mencionados serán oportunamente debatidos. Los resultados serán seguidos con gran atención en todo el globo, particularmente en Washington.


Artículo original en inglés, en http://dailysignal.com/2017/09/21/look-germanys-upcoming-election/