INTERNACIONALES: ANA QUINTANA & J. VENTRELLA

Trump respalda a la oposición venezolana

Lilian Tintori conoce al régimen venezolano por lo que realmente es: corrupto y criminal.

05 de Marzo de 2017

Lilian Tintori conoce al régimen venezolano por lo que realmente es: corrupto y criminal.

Su esposo, Leopoldo López, fue despojado de sus derechos políticos cuando el presidente Hugo Chávez vio la potencialmente peligrosa competencia que aquél representaba. Eventualmente, esto condujo a una investigación sobre Leopoldo López y a su puesta en prisión, que ya lleva tres años.

Leopoldo López, VenezuelaLópez es uno entre casi ciento diez prisioneros políticos que el gobierno venezolano se rehúsa a poner en libertad. El actual presidente del país, Nicolás Maduroprotege con frecuencia a los corruptos mientras que reprime a aquellos que respaldan a la oposición. El propio Maduro se inventa nuevos enemigos en todas partes.

Considérese el caso de Joshua Holt.

Holt es un ciudadano estadounidense que por estos días ha sido detenido y torturado en una prisión venezolana, tras ser capturado bajo cargos de 'terrorismo'. Luego de trasladarse hacia Venezuela para contraer matrimonio, tanto él como su futura esposa terminaron en prisión, y allí permanecen hasta el día de hoy.

El trato inhumano obsequiado a Holt es horrendo. No solo ha perdido ya veinticinco kilos de peso, sino que, convenientemente, el juez a cargo de su caso eludió enviarlo a juicio en cuatro oportunidades, lo cual parece haber puesto fin a cualquier esperanza para Holt.

O, también, considérese al ex prisionero político Francisco Márquez, con ciudadanía estadounidense y venezolana. Márquez fue en su momento detenido y enviado a una cárcel venezolana durante cuatro meses, previo a su eventual liberación. Aún cuando los cargos contra él fueron hechos a un lado, no fue liberado inmediatamente. Toda vez que no experimentó episodios de tortura, con frecuencia oía gritos de terror en cercanía de su lugar de detención.

El trato inhumano concedido a prisioneros en Venezuela solo contribuye a engrosar los funestos actos cometidos por los regímenes de Chávez y Maduro. La brutalidad no ha llegado a término, a pesar de la llegada de una nueva Administración a Estados Unidos. El presidente Donald Trump expresó recientemente vía Twitter: 'Venezuela debería permitir a Leopoldo López, prisionero político y esposo de Lilian Tintori, abandonar la prisión, inmediatamente'.

Esta remarcable diferencia entre el nuevo gobierno americano y el del saliente Barack Obama refleja un nuevo y robusto compromiso del gobierno de Estados Unidos para con el pueblo de Venezuela. Consigna una señal clara de que el gobierno de los Estados Unidos se posiciona en la vereda de enfrente del régimen de Maduro, y que respalda las aspiraciones democráticas de los ciudadanos venezolanos de a pie.

Twitter, Donald TrumpLas graves violaciones contra los derechos humanos acometidos por este régimen han llevado a Estados Unidos, incluyendo a otros protagonistas de peso en la región, a ejercer presiones contra el régimen para que libere a los prisioneros políticos. La evaluación del ex embajador estadounidense en Venezuela, Otto Reich, se orienta hacia el camino correcto. Reich ha declarado que Estados Unidos habrá de ser 'proactivo, y no quedarse en las expresiones de apoyo: habremos de evitar involucrarnos en concursos verbales, o en batallas de expresiones con autócratas mentirosos del Tercer Mundo'.

Innegablemente, el régimen de Maduro es gobernado por funcionarios corruptos. Tareck El Aissami, flamante vicepresidente de Venezuela, es ampliamente reconocido por sus vínculos con cárteles de la droga, así como también con el grupo terrorista Hezbolá. Queda claro que el régimen venezolano no distingue entre sistemas éticos, mientras ello le permita retener el control.

La Administración Obama conocía a la perfección el perfil criminal del vicepresidente venezolano, pero no tomó medidas firmes. Con todo, en el primer mes de la Administración Trump, los activos obtenidos de manera ilícita por El Aissami en los Estados Unidos han sido confiscados.

La clara posición de la Administración Trump frente a Venezuela representa un cambio bienvenido, tras la ambigüedad moral de su predecesora. Al avanzar en este terreno, la Administración habrá de subrayar la responsabilidad evidente del gobierno venezolano, en lo que respecta a las esperanzas de llevar libertad política al pueblo de Venezuela.


Artículo original en inglés, en http://dailysignal.com/2017/03/03/trump-is-right-to-support-venezuelas-opposition/

 

Sobre Ana Rosa Quintana

Es Investigadora Asociada sobre Asuntos Hemisféricos y Latinoamérica en la Fundación Heritage, Washington, D.C. Más puntualmente, se desempeña en el Centro Douglas y Sarah Alison para Políticas de Seguridad Nacional y Exterior -división del Instituto Shelby Cullom Davis para Estudios Internacionales