ESTADOS UNIDOS: AMY PAYNE

Estado de la Unión: el año de la 'acción'

El presidente estadounidense Barack Obama declaró que éste es un "año de acción" y, anoche, en su discurso sobre...

29 de Enero de 2014
El presidente estadounidense Barack Obama declaró que éste es un "año de acción" y, anoche, en su discurso sobre el Estado de la Unión, dejó muy claro de qué tipo de acción estaba hablando.
 
Tras indicar recientemente que dispone de un lapicero y un teléfono, y que puede utilizarlos para hacer cambios sin la ayuda del Congreso, Obama volvió a la carga con la promesa de llevar a cabo acciones ejecutivas allí donde los legisladores no satisfagan sus exigencias.
 
"Este presidente ha actuado como el matón del patio de recreo que cuando no puede tener todo lo que quiere, decide agarrar su pelota y regresarse a casa", comentaba ayer el presidente de la Fundación Heritage, Jim DeMint. "Este no es el modo en el que se supone que funciona nuestro gobierno", agregó.
 
En realidad, los expertos legales de la Fundación llevan mucho tiempo cuestionando la legalidad del estilo “llanero solitario” del presidente. Y los análisis iniciales de las propuestas hechas en el Discurso sobre el Estado de la Unión de este año indican que el Poder Ejecutivo seguirá fuera de control.
 
Uno de los aspectos más anunciados del discurso era la declaración de Barack Obama de que instaurará un salario mínimo más alto para los contratistas federales. No se trata de empleados federales, sino de los empleados de las compañías que tienen contratos con el gobierno federal.
 
El analista legal de la Fundación Heritage, Andrew Kloster, indicó que esto no es algo que el presidente deba estar haciendo.
 
"Cualquier contratista que se vea afectado negativamente por esta medida tendría una buena razón para llevar su caso a juicio”, comentó Kloster. “Si se mantiene, sería una más de las acciones ilegales y unilaterales urdida por la Administración Obama".
 
¿Por qué insiste Barack Obama en pasar por encima del Congreso, cuyos miembros fueron elegidos por los ciudadanos estadounidenses para que elaboren las leyes?
 
DeMint comenta:
 
"El presidente Barack Obama y sus defensores insisten en que gobernar vía acción ejecutiva es su única opción, ya que vivimos en un tiempo excepcionalmente partidista. Deberían decírselo a Ronald Reagan, que trabajó con un Congreso controlado por demócratas progresistas, o a Bill Clinton, que halló formas para trabajar con un Congreso que lo había sometido al proceso de destitución del cargo".
 
Sin contar con los nuevos planes ejecutivos de Obama, Estados Unidos sigue todavía tambaleándose después de todas las “acciones” que el presidente ha estado impulsando estos últimos años. La experta de la Fundación Heritage Diane Katz explicó:
 
"Existen cientos de nuevos y costosos decretos en preparación, incluyendo las decenas de nuevos mandatos de Obamacare y las igualmente onerosas reglas de la Ley Dodd-Frank. Al fin y al cabo, este presidente se ha aprovechado constantemente de las órdenes y regulaciones ejecutivas para controlar la industria, las finanzas, los servicios médicos y una larga lista de asuntos que la mayoría de nosotros creyó alguna vez que eran opciones personales de nuestro estilo de vida. De hecho, el acelerado ritmo de la expansión reguladora de este presidente parece no tener rival, con la suma anual de más de $70,000 millones en nuevos costos reguladores sólo en su primer mandato".
 
Muchos cambios en la regulación aparecen de forma discreta y sigilosa en notificaciones gubernamentales, sin embargo, en su Discurso sobre el Estado de la Unión, Obama muestra que este año planea enarbolar su lapicero con orgullo.
 
 
Sobre Amy M. Payne

Se desempeña como Editora del sitio web de la Fundación Heritage, en Washington, D.C. Sus análisis se publican también en idioma español, en la página Heritage Libertad.