INTERNACIONALES: JAMES M. ROBERTS

Ecuador: el juicio a Chevron remite a un clima pobre para los negocios

La cobertura de prensa de la recientemente concluída estapa declaratoria sobre crimen organizado en una corte federal de Nueva York comparte una excelente descripción...

17 de Diciembre de 2013
La cobertura de prensa de la recientemente concluída estapa declaratoria sobre crimen organizado en una corte federal de Nueva York comparte una excelente descripción sobre las maniobras tras bambalinas ejecutadas por el presidente ecuatoriano Rafael Correa y su gobierno, que solo han logrado crear desilusión y un clima de desconfianza entre inversores internacionales.
 
Dos años atrás, una corte en Ecuador gravó con una multa colosal de US$ 19 mil millones -aunque recientemente fue reducida a US$ 9.5 mil millones- a la petrolera Chevron, bajo cargos de contaminación en Lago Agrio, un pueblo situado en la Cuenca del Amazonas. De acuerdo a declaraciones, el perjuicio ecológico fue provocado en las décadas de los años setenta y ochenta por Texaco (que fue adquirida por Chevron en 2001). Así lo reporta CNN:
 
"Chevron acusa al equipo de demandantes de Lago Agrio por haber ganado el monumental juicio ecuatoriano a través de sobornos, extorsión, fraude, falsifiación de testigos, obstrucción de la justicia y lavado de dinero".
 
Pero, al testificar en el juicio llevado a cabo en Nueva York durante el pasado mes, el magistrado ecuatoriano que impusiera la masiva multa "se exhibió en sorpresivo desconocimiento de los contenidos de la opinión que él afirma haber firmado. El juez se mostró incompetente para dar fe de información clave, citaciones, y sobre términos empleados en el proceso".
 
A pesar del hecho de que una Administración anterior en Ecuador alcanzó un acuerdo final con Texaco en 1998 y de que, en septiembre, un tribunal arbitral en La Haya emitió una compensación parcial en favor de Chevron, y de que éste tribunal determinara que la compañía petrolera estadounidense no es responsable por daño ambiental colectivo (como citan los demandantes en el país sudamericano), Correa ha montado un esfuerzo de relaciones públicas de altísimo perfil, en apoyo del cobro de indemnizaciones por US$ 9.5 mil millones contra Chevron.
 
En octubre de 2013, Rafael Correa se apersonó en Lago Agrio y -actuando conforme a su propaganda-, metió sus manos en un tarro de alquitrán para las cámaras de tevé. Evitó mencionar, sin embargo, que, durante los pasados quince años, la limpieza del sitio fue responsabilidad de Petroecuador, la petrolera estatal. Y que muy poco de ese proceso de limpieza fue llevado a cabo.
 
Más recientemente, el prestigioso matutino financiero The Economist expuso el cinismo de los motivos de Rafael Correa que lo llevaron a emprenderla contra Chevron; en septiembre, el presidente ecuatoriano autorizó "las perforaciones para buscar petróleo en el Parque Nacional Yasuní en el bosque húmedo del Amazonas", un sitio de importancia ecológica claramente más sensible. Conforme lo cita el artículo, Correa necesita de mayores ingresos surgidos de la producción petrolera, para financiar los programas antipobreza de su gobierno, y para continuar alimentando su llegada a votantes de estratos sociales bajos -aquellos que, precisamente, son quienes más padecen sus políticas erráticas.
 
Ecuador, por otro lado, exhibe uno de los más bajos ránkings en el Indice de Libertad Económica -edición 2013-, publicado en conjunto entre la Fundación Heritage y el periódico The Wall Street Journal (ver: http://www.heritage.org/index/country/ecuador#limited-government); el puntaje del país sudamericano se ha desmoronado a lo largo de las pasadas dos décadas. ¿Por qué? Las mediciones independientes del paupérrimo clima para inversiones y un débil Estado de Derecho explican gran parte de la calificación de Ecuador, con un estatus de "economía reprimida". Tal como el Indice lo cita, el sistema judicial continúa vulnerable ante interferencias políticas, con la corrupción exacerbando permanentemente las deficiencias institucionales.
 
Con respecto al proceso judicial sobre Chevron en Nueva York, se aguarda un veredicto para comienzos del año próximo; pero no antes del debut de la Edición 2014 del Indice de Libertad Económica. Teniendo en cuenta el historial del gobierno de Correa, está permitido dudar de que el puntaje de ese país pueda compartir mejora alguna.


* Traducción al español: Matías E. Ruiz | Artículo original en inglés, en http://blog.heritage.org/2013/12/17/ecuador-chevron-trial-illustrates-poor-investment-climate/
 
 
Sobre James M. Roberts

Es Analista en temáticas de Libertad Económica y Crecimiento en el Centro para Comercio Internacional y Economía (CITE). Responsable de tareas de investigación, desarrollo y análisis del Indice de Libertad Económica (desarrollado en conjunto entre la Fundación Heritage y The Wall Street Journal). Sirvió durante 25 años en el Departamento de Estado, desempeñándose en el servicio exterior en las embajadas de los Estados Unidos en México, Portugal, Francia, Panamá y Haití