ESTADOS UNIDOS: REBECCA HEINRICHS

China no desea que Estados Unidos mejore su defensa, pero incrementa la propia

La semana pasada, el general chino Zhu Chenghu afirmó que China “tendrá que modernizar su arsenal nuclear” pues la defensa antimisiles de Estados Unidos “puede reducir la credibilidad de la disuasión nuclear [de China]”. Incluso si esta afirmación reflejaba la realidad, esa debería motivar a Estados Unidos para fortalecer sus defensas.

01 de Agosto de 2012

La semana pasada, el general chino Zhu Chenghu afirmó que China “tendrá que modernizar su arsenal nuclear” pues la defensa antimisiles de Estados Unidos “puede reducir la credibilidad de la disuasión nuclear [de China]”. Incluso si esta afirmación reflejaba la realidad, esa debería motivar a Estados Unidos para fortalecer sus defensas.

Las defensas antimisiles de Estados Unidos aún son lamentablemente inadecuadas para defendernos del arsenal de misiles chino. Los sistemas de Estados Unidos están destinados a la interceptación de misiles mucho más simples de estados parias, principalmente Corea del Norte e Irán, ninguno de los cuales ha presentado todavía un verdadero misil balístico de alcance intercontinental y mucho menos uno equipado con sistemas de ayuda a la penetración o con múltiples cabezas.

Defensa, EE.UU.Pekín no llegó recientemente a la conclusión de que, debido a los planes de defensas antimisiles de Estados Unidos, debe fortalecer su arsenal nuclear. China mantiene una fuerza nuclear que puede alcanzar la mayor parte del mundo y ha estado modernizando su fuerza a ritmo constante durante al menos una década. Probablemente, China tiene entre 1,600 y 1,800 cabezas nucleares. Además, el mismo general Zhu indicó en 2005 que China podría usar armas nucleares en respuesta a ataques convencionales contra territorio chino o incluso contra las fuerzas militares chinas, tales como una aeronave o un buque de guerra.

China también ha estado trabajando muy duro en su programa de misiles, que se podrían usar para llevar armas nucleares. Y está dispuesta a hacerlo aunque le cueste la indignación de la comunidad internacional, como se comprobó con el exitoso test ASAT de 2007.

El 11 de diciembre de 2009, Pekín reveló que había pasado los últimos 25 años trabajando en un gigantesco sistema de túneles subterráneos de casi 5,000 kilómetros. Este sistema se podría utilizar, de manera potencial, para alojar (y esconder) equipamiento nuclear y misiles.

Pero ¿por qué se opondría el general a las defensas antimisiles en Asia y utilizaría la defensa antimisiles de Estados Unidos como pretexto para fortalecer el arsenal nuclear chino? Bueno, es que está trabajando para Rusia.

Los medios de comunicación chinos propiedad del estado han señalado las objeciones de Rusia sobre los despliegues de las defensas antimisiles de Estados Unidos como un comportamiento digno de emular. Rusia aprovecha las objeciones a las defensas antimisiles para conseguir concesiones de Estados Unidos. Como demostración de esta predisposición del presidente Obama para hacer concesiones en las defensas antimisiles de Estados Unidos, el presidente fue cazado por un micrófono abierto hablando con el entonces presidente ruso Dmitri Medvédev, ante el cual dijo el presidente Obama que él tendría más “flexibilidad” sobre la defensa  antimisiles tras las elecciones presidenciales de noviembre. Quizás los chinos también quieren aprovechar la “flexibilidad” del presidente Obama si este consigue otro mandato.

Pero incluso si China se está sintiendo ahora amenazada por los sistemas militares de Estados Unidos y, por tanto, cree que hay una necesidad de contrarrestarlos fortaleciendo sus armas ofensivas, esto debería reforzar la necesidad de las defensas de Estados Unidos.

Las defensas antimisiles actualmente desplegadas y las que Estados Unidos está planeando desplegar son puramente de naturaleza defensiva y están diseñadas para proteger a Estados Unidos y a sus aliados, incluidos Corea del Sur y Japón, de armas que ya hayan sido lanzadas desde países hostiles. No construir estas defensas es dejar a propósito a los americanos y a nuestros aliados totalmente vulnerables a los misiles balísticos (y posiblemente con armamento nuclear) que se aproximen. Incluso si China no tiene la intención de plantear esta amenaza para Estados Unidos o nuestros aliados en Asia, Corea del Norte ciertamente sí lo hace.

Estados Unidos se debería defender de los estados parias, aunque China preferiría que no lo hiciéramos. Además, si China está decidida a que sus armas nucleares tengan una trayectoria expedita hasta las ciudades y las bases militares americanas o las de nuestros aliados (que por supuesto que lo está) sería imprudente que los responsables políticos de Estados Unidos hagan otra cosa que no sea construir unas defensas más fuertes y más firmes.

 

La versión en inglés de este artículo está en Heritage.org.

 

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Rebecca Hainrichs | Heritage Libertad, The Heritage Foundation