El Consejo de la Magistratura debe ser elegido por el Pueblo
El presente artículo tal vez sea del agrado del lector, o quizás no. Pero, sin lugar a dudas, entra en conflicto con arraigados intereses creados. Se intenta demostrar aquí que el Consejo de la Magistratura -Institución imprescindible para tener buenos Jueces-, no es posible con las esperanzas que alumbraron su creación por la forma de designación de quienes la componen. Estas líneas se han escrito en homenaje a los muchos Jueces correctos y trabajadores que hacen lo que pueden en precarias condiciones y, también, en homenaje a los muchos abogados que quieren un Poder Judicial imparcial y sabio, que dicte sentencia de acuerdo a la ley aplicable y a las constancias del expediente, por hombres y mujeres concientes de la responsabilidad que implica saber dar, a cada uno, lo suyo.