Mitos acerca de los bancos centrales
Los mitos acerca de la banca central moderna predominan. Como muchos mitos, estos contienen algo de verdad que ha sido distorsionada mediante la exageración y la mala aplicación.
Los mitos acerca de la banca central moderna predominan. Como muchos mitos, estos contienen algo de verdad que ha sido distorsionada mediante la exageración y la mala aplicación.
Una brecha técnica le está permitiendo al régimen teocrático de Irán eludir la fuerza de las sanciones económicas diseñadas para presionar a ese país, a los efectos de que abandone sus ambiciones nucleares.
Los resultados devueltos por las recientes elecciones italianas prueban que los europeos se están hartando de la Unión Europea.
En su notable ensayo Politics and the English Language, George Orwell advirtió que "el lenguaje político está diseñado para hacer que las mentiras suenen verdaderas, el asesinato respetable y para dar apariencia de solidez al mero viento”.
Pese a la resistencia de Alemania y otros países nórdicos, el euro está cambiando de naturaleza. El euro se diseñó como un cuasi-patrón oro. Sus creadores pretendían que fuera una moneda firme cuyo banco central estuviera centrado primordialmente en el control de la inflación.
Los líderes europeos se han reunido periódicamente para resolver la crisis europea desde que esta explotó. Después de cada una de estas "cumbres" crearon nuevos mecanismos institucionales, con la esperanza de calmar los mercados.
Salvo un milagro y esta supraterrenal hipótesis de compleja materialización en economía, España se verá forzada a solicitar un rescate total, ante la imposibilidad de financiar y refinanciar su endeudamiento.
El euro es la primera moneda en el mundo en ser sacada de la nada. Es una moneda sin un país. La Unión Europea (UE) no es un estado federal, como EE.UU., sino una aglomeración de estados soberanos...
En 2007 España gozaba de indicadores fiscales saludables. Tenía un superávit fiscal de 1,9% del PIB y una deuda pública de 36,1% del PIB y que había venido reduciéndose paulatinamente desde 64,1% en 1998. Hoy, muchos coinciden en que la crisis actual de España se debe a una burbuja inmobiliaria gigante que estalló en 2008.
Usted recordará estimado lector, que mientras muchos expertos afirmaban que todo estaba bajo control en los últimos años, este humilde columnista inisitió en que lo peor de la crisis estaba por venir. Incluso me tomé el trabajo de escribir un libro para explicar por qué los programas de gasto de los gobiernos y la impresión ilimitada de dinero solo podrían llevar a una depresión y a un posible colpaso del sistema financiero mundial.
Son varios los economistas que han presentado objeciones a un posible retorno al Patrón Oro, desde presidentes de la Reserva Federal como Alan Greenspan y Ben Bernanke, economistas de renombre como Tyler Cowen y Paul Krugman, y analistas como Eduardo Porter, Jesús Fernández Villaverde y tantos otros.
¿Va a durar la Unión Europea? Con François Hollande como el nuevo presidente francés y los griegos votando masivamente a favor de partidos radicales —verdaderos comunistas y nazis— todo el proyecto europeo está en entredicho. Los frutos de la crisis europea en realidad son amargos.
Europa está en mala forma, sobre eso no hay duda. La crisis de deuda soberana continúa exasperando al continente, Grecia podría abandonar el euro, puede que España tenga que revisar su déficit presupuestario al alza por segunda vez a causa de préstamos impagados y Francia tiene un nuevo presidente socialista que va por ahí prometiendo más gasto en lugar de austeridad...
A ver si nos aclaramos de una vez: aunque no hubiera habido crisis financiera en EE.UU., España habría tenido los problemas que tiene porque su recesión no tiene nada que ver con la estadounidense.
La catastrófica situación del mercado laboral (paro de más del 20% por tercera vez desde que llegó la democracia, la tasa de temporalidad más alta de Europa y 50% de los jóvenes sin empleo) ha obligado al nuevo Gobierno de España, presidido por Angela Merkel, a aprobar una profunda reforma. La pregunta que todos nos hacemos es: ¿funcionará?...
La consecución de su tercer Balón de Oro ha hecho que la servilleta en la que Lionel Messi firmó su primer contrato con el Barça pasara a ser un documento deseado por todo el mundo. Eso me ha recordado otra famosa servilleta de papel que, aunque no sea tan conocido entre los no economistas, es relevante para evaluar la política fiscal del gobierno de España.
Según el dicho popular, si usted le debe al banco cien dólares, usted tiene un problema; pero si usted le debe un millón, el banco es el del problema. Hoy podemos agregar que si los gobiernos de Italia, España, Portugal, Grecia e Irlanda le deben a sus bancos un billón de dólares, todos estamos muertos. Y hacia allá puede encaminarse la Eurozona.