POLITICA - POR MATIAS RUIZ PARA EL OJO DIGITAL: LAS ELECCIONES EN LA CIUDAD - CERCA DE LA SEGUNDA VUELTA

Elecciones en Capital : El Gobierno reconoce que Filmus perderá el ballotage. Comprobable hartazgo en la ciudadanía de cara a la segunda vuelta. Filmus : "los que votaron a Macri se equivocaron". La estrategia de choque del Gobierno contra Macri

Las elecciones porteñas ya han finalizado, más no la campaña. Kirchner no perdió un minuto para iniciar la agresiva batalla verbal contra el candidato ganador, Mauricio Macri, pero el Gobierno Nacional reconoce, por lo bajo, que Daniel Filmus será derrotado. El objetivo, simplemente, es canjear los 22 puntos de diferencia por una derrota menos abultada y desinformar frente a este tema, de cara a las presidenciales de octubre. Paralelamente, los porteños ya revelan un cresciente hartazgo frente a la necesidad de soportar más campaña, más agresión y otro fin de semana de nervio, el 24 de junio. El grosero error de Daniel Filmus y su crítica al electorado.

21 de Julio de 2010
Las elecciones porteñas ya han dejado a un claro ganador : el candidato de PRO, Mauricio Macri. Para ciertos analistas, el Gobierno Nacional, especialmente el Presidente Néstor Kirchner, no se ha percatado de la inconveniencia de colocar a Daniel Filmus en la segunda vuelta electoral. Pero tal análisis no parte de una sospecha comprobada. Lo concreto es que el primer mandatario sabe a la perfección que su candidato será derrotado con holgura el 24 de junio. Y vale la pena aclararlo : perder con holgura en un ballotage equivale a perder por más de 8 puntos. De acuerdo a análisis recogidos por funcionarios del propio Gobierno Nacional, Daniel Filmus caerá por una diferencia sensiblemente mayor a esas ocho unidades. Existen escenarios en donde Filmus podría incluso obtener un paupérrimo 35%. Si tal resultado tuviera, finalmente, lugar, no solo podría decirse que la primera vuelta fue la peor campaña jamás realizada por ningún candidato oficialista en la breve historia de las elecciones porteñas, sino que la subsecuente segunda vuelta podría catalogarse como una catástrofe de proporciones para esta Administración. Y es que la presente es la primera vez que el Presidente Néstor Carlos Kirchner decide apostar a doble o nada. El sabe a la perfección que "el pingüino o la pingüina" se alzarán con las presidenciales de octubre. Por ende, en su visión, apostar todo en la Ciudad de Buenos Aires no es una locura, dado que la mala imagen de la derrota podría lavarse dentro de pocos meses. Y mientras tanto, existe la chance de intentar recortar las diferencias entre Filmus y Macri. Pues tal es la estrategia que subyace tras bambalinas : que el 22% se convierta en un 5% o un 10%. Entonces, se dirá públicamente : "pero Filmus no perdió por un 22% de diferencia; apenas fue por el 10% -o el 5%-". La táctica es parte del libro kirchnerista que jamás reconocerá una derrota. Nótese el esfuerzo titánico que los medios afines han hecho para hacer ver la tarea del gobierno como si de un triunfo se tratase. Yendo a datos más precisos, El Ojo Digital accedió a fuentes oficiales que analizan escenarios en extremo optimistas, pero que también reconocen en voz muy baja que Filmus podría tener que sufrir una catastrófica derrota. Existen dos escuelas de funcionarios dentro del atril kirchnerista : un grupo sostiene ciegamente que Kirchner tiene la capacidad y la influencia para dar vuelta los resultados de las elecciones porteñas de primera vuelta, y que se puede vencer a Macri. Otra porción -más pequeña- es de considerar todos los escenarios posibles : están de acuerdo en que el Presidente debe entrometerse en la campaña pero con cautela, dado que, si la derrota de Filmus es estrepitosa, tanto la imagen del propio primer mandatario como la de su Primera Dama se verían groseramente afectadas. Hay, de hecho, una corriente dentro del primer grupo que ha planificado arriesgar, destruir y agotar a Daniel Filmus con tal de explorar las chances del matrimonio presidencial frente al electorado porteño. Para ellos, el ministro de Educación no es más que un peón que debe ser sacrificado. Alguien que debe arriesgar su vida política con el fin de proteger la imagen de su jefe. El problema es que, aparentemente, nadie le ha preguntado al pobre de Filmus cuál es su opinión al respecto de que se arriesgue su pellejo. El Presidente Néstor Kirchner atacó verbalmente a Mauricio Macri en un acto reciente, ligándolo con el "modelo de los noventa" y acusándolo de no haber votado por la derogación de las leyes alfonsinistas de obediencia debida y punto final. "No se olviden de que, aunque le digan Mauricio, es Macri". La alusión es obvia : explotar la relación tortuosa que el hombre de PRO mantiene con su padre, Franco. Una estrategia verdaderamente sucia, pues tiende claramente a destruir emocionalmente al rival político. Por su parte, Mauricio Macri respondió con ironía a estos comentarios, diciendo : "Kirchner, que es Néstor, no sabe que yo no me presento como candidato a presidente, sino que acá estamos para debatir soluciones para los vecinos". En segunda lectura, Macri respondió al primer mandatario : "en la Capital Federal no interesan las discusiones nacionales". La premisa podrá ser polémica pero al porteño -igual que a cualquiera que se preocupa por su ciudad- solo le interesa, al menos de momento, solucionar los problemas locales. Muchos podrán estar de acuerdo con el discurso presidencial, pero ahora mismo, lo que importa es la Ciudad. Tal es la interpretación que puede hacerse de la respuesta de Mauricio Macri al Presidente. En el desborde de agresión y ataque que partirá desde el Gobierno Nacional en estas tres semanas, reveló el Presidente que Filmus no está haciendo uso de famosos analistas políticos -aunque detrás del mecanismo esté la mano de Fernando Braga Menéndez-. Precisamente, Daniel Filmus ya ha revelado la carencia de asesores inteligentes. En el día de ayer criticó con dureza al electorado porteño, sentenciando que aquellos que "votaron a Macri se equivocaron". No pocos están de acuerdo en que Filmus seguramente pagará muy cara la travesura. Dicho sea de paso, ha revelado ingenuamente que él tampoco domina las artes de la dialéctica. Desde el propio Gobierno Nacional se ha revelado también que el candidato kirchnerista apostará todo al debate que -nuevamente- televisará TN, el canal de cable del Grupo Clarín. Los productores de TN esperan ver sangre. En el debate final se verá cuál de las dos corrientes kirchneristas ganó la pelea interna. Si Filmus se desvía de la discusión de la Ciudad para mostrar fotos "comprometedoras" de Mauricio Macri, el sector de los halcones habrá sido el triunfador en la puja. No obstante, el debate solo servirá para aportar rating a Todo Noticias, porque, sin importar el resultado, no le será suficiente a Filmus para vencer. Para Daniel Filmus, existen dos formas de encarar el debate, a saber, 1) recurrir nuevamente a la argumentación ad hominem -atacar a la persona- e intentar destruir la imagen positiva de Mauricio Macri, ligándolo al pasado, es decir, con los noventa y Carlos Menem; b) discutir los temas de la Ciudad de Buenos Aires, y, a la vez que presenta su propio plan de gobierno, podría criticar con agudeza -aunque con altura- las probables falencias del plan macrista. El segundo camino podrá reportarle algunos puntos más que la vía del ataque. La alternativa de la agresión solo logrará restarle intención de voto. Pero, a fin de cuentas, no existe escenario que contemple una victoria de Daniel Filmus. Es a partir de estos días que se observa la clara intencionalidad de medios como Clarín, Página 12, encuestadoras de opinión y otros medios, que pregonaban a viva voz sus proyecciones al respecto de la imposibilidad de Macri para imponerse en la segunda vuelta electoral. La estrategia de Mauricio Macri no variará demasiado, a partir de que su estrategia de no confrontar y de presentar propuestas en forma recurrente, ha dado un resultado más que positivo. Pero Macri podría -o más bien, debería- llevar su aparente honestidad un paso más hacia adelante, declarando públicamente que se desligará en forma absoluta del grupo SOCMA y de cualquier relación comercial con su padre, llámese inversiones, fideicomisos o lo que fuere. Esta táctica no solo le servirá para reforzar la imagen positiva que ya tiene en aquellos que lo han votado, sino que servirá notablemente para intentar despejar las dudas de aquellos que están entre Telerman y Filmus. De todos modos, y en lo que respecta al estricto terreno de la retórica -claramente táctico-, el plan oficialista se dividirá de la siguiente manera : Daniel Filmus intentará hacer que su plan de gobierno para la Ciudad de Buenos Aires comience a ser conocido; simultáneamente, el Presidente Néstor Kirchner y los ministros Aníbal y Alberto Fernández atacarán en los medios a Mauricio Macri. Al Presidente le toca la porción más global del discurso agresivo : relacionar al candidato del PRO con el "modelo neoliberal" y sentencias semejantes. Alberto Fernández utilizará el recurso de relacionar a Mauricio Macri con hechos puntuales de "negociados" y cuestiones del empresariado -repitiendo lo realizado contra Jorge Telerman-. Aníbal Fernández, ministro del Interior, disparará frases violentas y bien características de las que utilizó contra Elisa Carrió en el pasado, más tendientes a provocar respuestas emocionales. De Aníbal se esperarán frases como "¿No es Macri el que le tuvo que pagar como US$50 millones a la ex mujer, para que no cuente secretitos?". Alberto Fernández, jefe de Gabinete, explorará cuestiones relacionadas con SEVEL, evasión de impuestos y demás variantes. El esquema de armas de ataque contra el candidato de PRO parece bien aceitado, pero su efectividad está en duda. Si el ataque y la denuncia no le sirvieron a Filmus antes, ¿por qué le servirían ahora? Los optimistas dirán que sirvió para remover a Telerman del ballotage, pero los números dirán que solo logró restarle 3 puntos de ventaja, y es poco probable que esa diferencia se haya debido estrictamente a la maniobra sistemática de ataque de Filmus contra el Jefe de Gobierno. Más bien debe considerarse que Telerman cayó, en gran parte, por el hartazgo que la ciudadanía ya tenía de él. Y mientras Daniel Filmus y el Gobierno Nacional ocuparon la mayor parte de la agenda en destruir a Telerman, la figura de Macri creció a pasos agigantados. Para la segunda vuelta, la ciudadanía podría reaccionar con gran rechazo frente a los ataques y la pobreza en la discusión, y ampliar todavía más la brecha entre Macri y Filmus en beneficio del primero. Los escenarios para la segunda vuelta electoral no deberían ser tan variados. Si el Gobierno Nacional y Daniel Filmus se embarcan en la estrategia de la cruda agresión en desmedro de la discusión de los planes para la Ciudad de Buenos Aires, Filmus podría perder de manera catastrófica, esto es, por una diferencia de entre 20 y 25 puntos. En este escenario, Mauricio Macri podría alcanzar incluso el 65% de los sufragios. Por otra parte, el mejor panorama al que Daniel Filmus y el Gobierno Nacional podrán aspirar es a una derrota por una diferencia de 10 puntos, que es, precisamente, el número que ahora mismo funcionarios kirchneristas reconocen como "aceptable" y "positivo". Extraña estrategia la del Presidente Kirchner, esto de castigar a los porteños con tres semanas más de campaña electoral. Pero, en definitiva, lo que el hombre fuerte del país está buscando es un número lo suficientemente mullido como para promocionar la idea de fondo, a saber, que "la imagen de Cristina sigue fuerte en la Capital Federal". Las consecuencias de la derrota se intentarán disimular vía acuerdos económicos con ciertos medios, pero quedarán, indefectiblemente, a la vista de la sociedad. En definitiva, El Ojo Digital se enorgullece del aporte que, a través de este artículo, hace para los candidatos. Notará el lector que hemos realizado un gran esfuerzo a la hora de ofrecer cursos de acción para los ejecutores de la campaña de ambos contendientes.
Por Matias Ruiz para El Ojo Digital Política