¿Justificó Bielsa los atentados de Londres?

El canciller Rafael Bielsa expresó hoy la solidaridad del Gobierno argentino hacia Gran Bretaña ante los atentados terroristas registrados en Londres, pero por momentos se acercó a una inaceptable justificación del atentado cuando señaló que los ataques "son consecuencia de dos modelos de diseño del mundo enfrentados". Bielsa indicó que se comunicó hoy con el embajador del Reino Unido en Buenos Aires, John Hughes, y señaló que "la evaluación que hacen es que estando Londres en la mira del mundo por la reunión del G-8 y por ser elegida sede de los Juegos Olímpicos (para 2012), el atentado fue decidido por estas dos variables”, lo que les permitía además lograr "una granrepercusión mediática". En declaraciones a medios radiales, el canciller agregó que el representante diplomático británico consideró que hubo "una planificación", ya que algo así "no se puede hacer de un día para el otro". Cuando comentío sobre la autoría del atentado, Bielsa se acercó peligrosamente a la justificación cuando indicó que todos los medios actúan "con mucho cuidado" porque "tienen el síndrome del 11M", cuando ocurrieron los ataques en Madrid, oportunidad en que primero se informó que había sido obra de la organización terrorista vasca ETA. El canciller se preocupó especialmente por descartar a la organización terrorista vasca como responsable de las bombas. Por otra parte, Bielsa también afirmó que no puede "dejar de vincular nuestra participación en el Golfo y los atentados (contra la embajada de Israel en Buenos Aires y la AMIA), y la intervención de Gran Bretaña en Irak y este atentado". Añadió que en un diálogo que mantuvo con el primer ministro de Italia, Silvio Berlusconi, éste le reveló que "la semana pasada había un alerta en Italia", país que junto a Polonia y Australia "son los que hasta ahora no sufrieron atentados" pese a su activa participación en la guerra de Irak. Por otra parte, Bielsa dijo que ataques como estos no pueden prevenirse en su totalidad, "si bien es cierto que hay una enorme cantidad de atentados que se evitan". Al respecto, indicó que la secretaria de Estado norteamericana, Condolezza Rice, le dijo que "la cifra de los atentados que se habían evitado desde el 11 de septiembre (de 2001) era superior a los 400", pero que "no se dan a conocer por seguridad nacional y porque implican datos que permiten llevar a otras conexiones". Bielsa dijo que la cuestión es "cómo se para una sociedad pluralista y civilizada frente al horror", y cómo debe enfrentar este conflicto en el futuro, cuando "es sólo cuestión de tiempo" que sectores extremistas "tengan la bomba atómica". "Tenemos por delante un mundo donde la gran discusión es si esto se puede sofocar por vía bélica o por el diálogo interreligioso", concluyó, en un cierre que expone su total desconocimiento del fundamentalismo islámico, de quien no se conoce instancia histórica en la que halla "dialogado" para abandonar políticas terroristas. Esta es la realidad que pesa sobre las relaciones exteriores argentinas, que no sólo se mueven por un camino ciertamente errático, sino que por momentos hacen ver al Palacio San Martín como vacante, dado el excesivo celo del canciller con las elecciones de octubre. Elecciones que -ya es vox pópuli- no lo tienen bien posicionado.