El Brexit, a la vuelta de la esquina. Oportunidad para renovar la 'relación especial' entre EE.UU. y el Reino Unido

Es innegable que los Estados Unidos y el Reino Unido se caracterizan por una 'relación especial'.

A lo largo de distintos períodos de cambio global, y en turbulentas épocas de guerra, la relación angloamericana ha sido constante y coherente. Cada país ha respaldado al otro en dos guerras mundiales, durante la Guerra Fría y, ahora, en la confrontación que ambos llevan adelante contra el terrorismo internacional, en un ámbito compartido de libertad, paz y prosperidad.

En simultáneo, la asociación comercial entre Washington y Londres ha sido un componente central de esa relación.

Ahora mismo, ya programada la partida del Reino Unido de la Unión Europea, existe la posibilidad de un acuerdo de libre comercio entre los EE.UU. y el Reino Unido, oportunidad que beneficiaría enormemente a ambas naciones. 

Previo a esto, no existía oportunidad concreta de firmar tal convenio de libertad comercial, precisamente porque el Reino Unido era miembro de la UE. Pero, luego de marzo de 2019, cuando la Gran Bretaña consolide su salida, recuperará la libertad para firmar y consensuar sus propios tratados comerciales. 

La relación comercial entre ambos países siempre ha sido recíprocamente beneficiosa, hasta esta instancia. Tras la Unión Europea, Estados Unidos es el segundo mayor socio comercial del Reino Unido, en tanto este país es el séptimo socio de Estados Unidos. Solo en 2015, EE.UU. exportó al Reino Unido mercaderías (bienes y servicios intangibles) por un valor de US$ 56 mil millones -cifra que resulta en casi idéntica al valor de las exportaciones británicas cotejadas contra las estadounidenses.

Por sobre todo, la economía estadounidense es la más grande del gobo, mientras que la del Reino Unido es la quinta más grande. El tamaño de ambas economías, combinadas con la significativa asociación comercial bilateral, implicaría que un tratado de libre comercio potenciaría, de manera sustancial, la prosperidad en ambos lados del Océando Atlántico. La competencia se incrementaría, y los consumidores contarían con más alternativas y precios reducidos. Un evento como el descripto sería una variable motora de magnitud para la libertad económica, a través de un tratado comercial bilateral genuinamente libre -sanamente respaldado en los principios de soberanía y libertad económica.

Por fortuna, numerosos think tanks y académicos a lo largo de los Estados Unidos y la Gran Bretaña, han colaborado a los efectos de delinear un tratado de libre comercio o TLC. Este esfuerzo conjunto ha concluído con un texto completo en pos de un convenio que consolide progresos significativos en materia de liberalización comercial entre ambos países. Y los citados académicos han certificado que un convenio de libre comercio en todo su alcance puede lograrse.

Este es, precisamente, el objetivo hacia el cual todos deberían orientar sus esfuerzos, ni bien la Gran Bretaña abandone su sitio en la UE. Hemos de respaldar la decisión del pueblo británico, y tomar medidas que garanticen que un Reino Unido post-Brexit ponga en marcha un mecanismo de posibilidades estratégicas y económicas en línea con lo que la soberanía del Reino Unido representa.

En tal sentido, trabajamos en conjunto con el Senador Tom Cotton (Republicano, Arkansas), a crtiterio de introducir el Acta de Continuidad Comercial con el Reino Unido, en el congreso estadounidense. Nuestro Proyecto promocionará la estabilidad económica y el crecimiento, mientras el Reino Unido ejercita su transición fuera de la Unión Europea. Asimismo, el Proyecto de Ley logrará que Estados Unidos continúe haciendo honor a la totalidad de los tratados comerciales existentes con la Gran Bretaña y, de igual manera, alentará al presidente estadounidense a iniciar negociaciones para nuevos convenios bilaterales con el Reino Unido, apenas treinta días después de que el Proyecto sea puesto en funcionamiento.

Artículo original, en inglés, en éste link


* Mike Lee (@SenMikeLee) es Senador del Partido Republicano, por el estado americano de Utah. Publica periódicamente en el sitio web The Daily Signal (Estados Unidos)