INTERNACIONALES : FRED LUCAS

Seis preguntas para ilustrar qué sigue tras el cónclave entre Donald Trump y Kim Jong-Un

En medio de la intensa atención que generara la histórica cumbre entre el presidente estadounidense...

12 de Junio de 2018
En medio de la intensa atención que generara la histórica cumbre entre el presidente estadounidense Donald Trump y el dictador norcoreano Kim Jong-Un, optimistas y escépticos por igual comparten sus dudas en relación a los siguientes pasos.
 
A tal efecto, no se esperaba que el cónclave entre ambos líderes -que tuvo lugar en Singapur- compartiera resultados inmediatos.
 
La pasada semana, el Secretario de Estado americano, Mike Pompeo, declaró que la Administración buscaría consolidar progresos, a partir de un tratado formal que habrá de ser ratificado por el senado estadounidense. Esto dificultaría la posibilidad de que un futuro mandatario estadounidense confirmara la firma de un convenio, tal como Trump dio marcha atrás con el acuerdo nuclear con Irán -propiciado por la Administración Obama. Asimismo, garantizaría a Kim que Estados Unidos no propiciaría un cambio de régimen luego de que su país renunciare a su arsenal atómico.
 
Kim Jong-un, Corea del Norte, Donald Trump, Cónclave, Cumbre Trump KimUn tratado también daría lugar a airados debates en los EE.UU. y en el exterior.

'Deberá ser sustancioso, con prácticamente todo lo que esperamos, para contar con la confirmación del senado', afirmó Alexander Vershbow, embajador estadounidense ante Corea del Sur desde 2005 hasta 2008, relató a The Daily Signal. 'Si logran propiciar un tratado, el senado buscará que no tenga fallo alguno'.

Las siguientes son seis preguntas que surgen del cónclave:


1. ¿Cómo definir 'desnuclearización'?

Una Resolución de Naciones Unidas, coincidente con la política estadounidense, llama a un 'desmantelamiento completo, verificable e irreversible' del programa de armas nucleares norcoreano. Expertos estadounidenses concuerdan en que Trump deberá mostrarse firme en alguna suerte de declaratoria sobre este tema, que garantice que Kim continúe en el poder y que se levanten las sanciones económicas contra el régimen comunista.
 
'El presidente no puede retirarse del acuerdo nuclear, para luego llegar a un acuerdo con Corea del Norte que no sea verificable ni irreversible en la variable de la desnuclearización', consignó el Teniente General Jerry Boykin -ex subsecretario de inteligencia en el Departamento de la Defensa- al medio estadounidense The Daily Signal. 'Necesitamos confirmar que Kim entienda que consideramos a su programa nuclear como una amenaza existencial para los Estados Unidos, y que estamos dispuestos a utilizar todo medio disponible para oponernos a él', sentenció Boykin. 'Kim le dirá al presidente estadounidense que necesita una garantía de seguridad para clausurar su programa nuclear, de tal suerte que pueda asegurarse de que EE.UU. no estará interesado en un cambio de régimen en Corea del Norte'.
 
No obstante, la garantía de que Estados Unidos no propiciará un cambio de régimen podría no ser suficiente, afirmó Vershbow. 'Algunas personas creen que Kim podría tener su momento, al estilo de Deng Xiaoping', dijo Vershbow -el ex embajador-, al referirse al líder de la China comunista que sucedió a Mao Tse Tung y que trajo reformas de mercado mientras que se mantenía el modelo autoritario de gobierno. 'Pero la ideología oficial sintetiza que su liderato debe gerenciar el poder en la totalidad de Corea, y que Corea del Sur es una entidad ilegítima', dice Vershbow. 'La pregunta es: ¿qué tan diferente será Kim Jong-Un al comparárselo con su abuelo?'.
 
El modo de definir el concepto 'desnuclearización' constituirá una dificultad de importancia, afirma Bruce Klingner -ex experto en Corea en la CIA, y que actualmente se desempeña como fellow de investigaciones para el noreste de Asia en el think tank estadounidense Heritage Foundation. 'Esta cuestión deberá incluir a los misiles balísticos de corto y mediano alcance que amenazan a aliados estadounidenses como Corea del Sur y el Japón;, dijo Klingner en un comunicadi público. 'Corea del Norte ha demostrado durante décadas que conoce vastas definiciones para términos como desnuclearización, y definiciones diferentes para lo que entiende por 'Península de Corea''.
 

2. ¿Cuál es el lenguaje correcto para consolidar un acuerdo de largo plazo?
 
En cualquier convenio, Corea del Norte deberá 'de manera pública, explícita e inequívoca, aceptar y comprometerse a trabajar, con el norte puesto en el abandono de armas exigido por Naciones Unidas', involucrando por cierto a su arsenal nuclear, de armas biológicas y de armas químicas, sentenció Klingner.
 
'Cualquier nuevo acuerdo con Corea del Norte habrá de ser en extremo específico, e ir más allá de lo que se haya escrito en el pasado', cifró el analista. 'Deberá ser similar a un texto cuidadosamente delineado, con robustos requisitos en materia de verificación, de tratados de control de armamento con la ex Unión Soviéitca y con el Pacto de Varsovia, antes que tener que ver con la vaguedad de los textos previamente firmados con Pyongyang'.
 
En las conversaciones multipartitas y sus posteriores comunicados posteriores a septiembre de 2005, Corea del Norte había prometido acogerse a la no-proliferación de armas nucleares, y a garantizar acceso a la Agencia Internacional de Energía Atómica. 'El Pueblo de la República Democrática de Corea (Corea del Norte) se comprometió a abandonar todas las armas nucleares y los programas nucleares existentes, y a regresar a la primera fecha disponible, acercándose al tratado de no-proliferación de armas nucleares y de salvaguardas de IAEA', reza el comunicado.
 
Vershbow llegó a su puesto en una instancia en que las conversaciones multipartitas parecían promisorias, para terminar el escenario con Corea del Norte -bajo control de Kim Jong II- dando marcha atrás y retornando a las pruebas nucleares. 'He visto esta película antes, pero podría tener un final distinto esta vez, uno que confunda a los escépticos', afirmó Vershbow sobre la cumbre de Singapur.


3. ¿Abandonarán Corea del Sur las tropas estadounidenses? De ser así, ¿cuándo lo harán?

El régimen actual de Kim desea que Estados Unidos retire a sus tropas de Corea del Sur. 'El retiro de tropas americanas de Corea del Sur no es un tema sobre el cual podamos ceder en un primer momento. Para muchos coreanos del sur, esta es una preocupación de magnitud', dice Boykin -el teniente general retirado que ahora oficia como vicepresidente ejecutivo del Family Research Council, un grupo de orden conservador.

Entendidos en la materia argumentan que esto crearía una preocupación significativa para los aliados de los Estados Unidos en toda Asia, y que la Administración Trump habrá de alcanzar un acuerdo sobre otros temas previo a conversar sobre la variable de las tropas estacionadas en el sur. 'Si Corea del Norte exige, y EE.UU. se muestra de acuerdo, el retiro de tropas de Corea del Sur, los aliados americanos en Asia, como ser el Japón y Singapur, se preguntarán si acaso Estados Unidos está creíblemente comprometido a esta región del globo', sentenció Matthew Heiman, abogado que otrora se desempeñara en la división de seguridad nacional del Departamento de Justicia estadounidense, ante The Daily Signal.


4. ¿Cómo funcionaría un sistema de alivio en materia de sanciones económicas?
 
La Administración Trump incrementó las sanciones contra el régimen de Kim, aspecto que contribuyó a acercar a Corea del Norte a la mesa de negociaciones, afirmó Vershbow, el ex diplomático estadounidense. 'Existe una combinatoria de temor ante las amenazas militares de Trump, y las duras sanciones económicas; ambas cuestiones atrajeron la atención de Kim', Vershbow afirmó.
 
Mientras tanto, el analista Bruce Klingner fue determinante: no deberá cederse a un alivio de las sanciones previo a que Corea del Norte consolide un paso significativo en pos de la desnuclearización. Las sanciones existentes contra Corea del Norte son una combinación que emana de Resoluciones de Naciones Unidas y de sanciones interpuestas por EE.UU. y otras naciones de manera individual. Asimismo, cualquier legislación que el congreso estadounidense decida aprobar deberá contar con acciones específicas que tome Corea del Norte, previo a que EE.UU. proceda a un relajamiento de las sanciones.
 
'Un acuerdo en el cual Kim continúe administrando el país podría ser muy similar a Vietnam o a Camboya', dice Heiman, abogado. 'Estas son naciones que cuentan con economías abiertas al mundo, y que disfrutan de los beneficios, aunque tienen dictaduras comunistas'.

Acaso el joven líder norcoreano se percate de que un acuerdo es necesario a los efectos de que su país y su gobierno sobrevivan, afirma Lester Munson, ex director de personal en el Comité de Relaciones Exteriores del senado estadounidense, donde personalmente negoció prioridades del comité con la Casa Blanca. 'Claramente, el actual modelo no es sostenible en el largo plazo', dijo Munson a The Daily Signal. 'Este país ha tenido este sistema durante 65 años. La norma para este tipo de regímenes opresivos es sobrevivir durante, al menos, setenta años'.


5. ¿Qué deberá esperar Estados Unidos en materia de derechos humanos?

Los funcionarios de la Administración Trump han declarado que los derechos humanos no han sido parte de las conversaciones preliminares, pero expertos entienden que estos temas serán tratados previo a arribarse a un acuerdo definitivo. '¿Cómo podríamos no defender nuestros valores en una negociación como ésta, ante un déspota con un historial de haberle hecho cosas terribles a ese pueblo?', se preguntó Munson. 'Este no es el sitio en el cual deseamos estar. Los derechos humanos deben ser parte de cualquier convenio. No podemos hacer a un lado esta cuestión'.
 
Los campos de prisioneros en Corea del Norte mantienen recluídos a entre 80 mil y a 120 mil personas, de acuerdo a un informe publicado por Olivia Enos, analista de política exterior para estudios asiáticos en la Fundación Heritage. Enos se encuentra actualmente en Singapur, cubriendo los prolegómenos de la cumbre. 'Mientras que el foco de la cumbre sin lugar a dudas deberá centrarse en convencer a Corea del Norte de que abandone sus programas misilísticos y de armas nucleares, Estados Unidos también debería exhibir su preocupación ante el triste historial norcoreano en materia de derechos humanos', escribió Enos. 'Si Estados Unidos está listo para exigir un desmantelamiento completo, verificable e irreversible del programa nuclear norcoreano, entonces también deberá exigir un desmantelamiento completo, verificable e irreversible de su sistema de campos de prisioneros'.
 
Trump trató el tema de los horrendos abusos contra los derechos humanos perpetrados por Corea del Norte, al dirigirse en conferencia ante la Asamblea Nacional de Corea del Sur, en oportunidad del Estado de la Unión, y al reunirse con prisioneros que huyeron de los campos de concentración.
 

6. ¿Qué rol desempeñará China?
 
China podría desempeñar un rol constructivo o destructivo en las negociaciones, y Kim podría disfrutar al manipular a ambas superpotencias, viéndolas pujar una contra la otra. Heiman, ex abogado de seguridad nacional para el Departamento de Justicia, dijo que él no compararía a la cumbre entre Nixon y Mao con la de Trump y Kim, pero dijo que China podría tener un impacto significativo en el encuentro. 'China abandonó a los soviéticos y se alineó en posturas más cercanas a las de los Estados Unidos', dijo Heiman, al respecto del resultado de la apertura comercial entre Washington y Pekín. 'Esta cumbre podría acercar a Corea del Norte hacia EE.UU., más de lo que se encuentra hoy de China. Para el equipo de Trump, el objetivo primario es la desnuclearización. Pero el objetivo secundario deberá ser la construcción de una estrategia para que china pierda ventajas'.

Heiman afirmó que es parte de la ventaja china el contar con una Corea del Norte estable que, a la vez, consigne una amenaza nuclear contra aliados de EE.UU. como el Japón, Corea del Sur y contra otros competidores de Pekín en Asia. Sin embargo, Boyking afirmó creer que, a la postre, China se sumará al tablero de negociaciones. 'China no desea ver una Corea unificada que se muestre más cercana a Occidente, pero tampoco desea asistir a una guerra en la Península', cerró Boykin. 'Ese camino solo podría terminar de un modo: Kim perdería la vida, y Corea del Norte terminaría ocupada por las fuerzas militares de los Estados Unidos, con la amenaza potencial -al igual que en los años cincuenta- de un conflicto militar con China'.



Artículo original, en inglés, en éste link


 
Sobre Fred Lucas

Lucas se desempeña como corresponsal en la Casa Blanca, para el sitio web estadounidense The Daily Signal (Washington, D.C.). Es autor del libro 'Tainted by Suspicion' (Contaminados por la Sospecha).