INTERNACIONALES: NILE GARDINER

ONU: Trump pone punto final a la prerrogativa de 'liderar desde la retaguardia'

Al dirigirse ante la Asamblea General de Naciones Unidas este martes...

20 de Septiembre de 2017
Al dirigirse ante la Asamblea General de Naciones Unidas este martes, el presidente estadounidense Donald Trump compartió uno de los discursos más sólidos de su presidencia hasta el momento.
 
El discurso se centró en un rechazo empático del mantra obamista que invitaba a 'liderar desde la retaguardia', imprimiendo una defensa asertiva del liderazgo estadounidense en el escenario mundial. Asimismo, el mandatario compartió su firme condena contra regímenes dictatoriales, incluyendo a Corea del Norte, Irán, Venezuela y Cuba.
 
Donald TrumpEl discurso no pudo ser más diferente, en estilo y sustancia, que la aproximación débil y deferencial del ex presidente Barack Obama y sus últimas presentaciones en Naciones Unidas. El approach de Obama se vio caracterizado por la confusión, la debilidad, la indecisión -por momentos, llegando a intentar congeniar con adversarios declarados de los Estados Unidos.
 
Para muchos analistas, fue refrescante oir a un presidente estadounidense que no se mostró avergonzado de proclamar los intereses de su propia nación.
 
La Asamblea General de Naciones Unidas ha sido, tradicionalmente, un sitio hostil para mandatarios republicanos de EE.UU., pero Trump no tuvo la menor intención de atemperar su mensaje ante los líderes de 193 países, muchos de los cuales portan una profunda antipatía por los Estados Unidos de América.
 
El liderazgo global no es, en rigor, un concurso de popularidad, y Trump exhibió escaso interés en ganarse los aplausos de una Asamblea General que, periódicamente, había recibido a su predecesor con ruidosas ovaciones.
 
El discurso de Trump fue sólido y claro en su contenido. Los enemigos de Estados Unidos no tendrán dudas a partir de este momento: EE.UU. los confrontará agresivamente, y obstaculizará sus ambiciones de amenazar al mundo libre.
 
En particular, el presidente puso la mira sobre Corea del Norte e Irán. Dedicó al régimen iraní las líneas más duras que recibiera en muchos años, dejando en claro que ve a Irán como un 'Estado paria', y que el acuerdo nuclear firmado por Obama es una 'vergüenza'.
 
El discurso de Trump fue la más clara señal hasta el momento de que podría retirarse del Plan de Acción Conjunta, que en la actualidad está siendo sometido a escrutinio por la Administración Trump.
 
En lo que consignó un marcado contraste al comparárselo con el enfoque supranacionalista de la Administración Obama, el discurso de Trump celebró la soberanía y la autodeterminación. La presentación del mandatario sobrevino en la forma de una acérrima defensa de los Estados nacionales y en un rechazo a la noción que reza que la soberanía nacional debe ser debilitada o hecha a un lado.
 
En los albores del Brexit, las afirmaciones de Trump en Nueva York son un recordatorio de que la defensa de la soberanía es fundamental a la hora de proteger las libertades individuales. Mensaje que habrá de ser promocionado no solo en Naciones Unidas sino también en Bruselas, sitio donde la Comisión Europea ha puesto en práctica, y desaprensivamente, planes para consolidar una Europa federal y descentralizada que diluirá las soberanías nacionales.
 
Como presidente de Estados Unidos, Obama invirtió la mayor parte de su tiempo en el escenario mundial pidiendo disculpas por su propio país, y buscando acomodarse con los enemigos del mundo libre. Tras ocho años de un peligroso retroceso global, Trump demostró este martes que el liderazgo estadounidense en realidad importa, y que seguirá confrontando con los regímenes dictatoriales que amenazan a la seguridad internacional.
 
En una instancia en que Estados Unidos y sus aliados deben lidiar con amenazas recurrentes, el mensaje de Donald Trump no puede ser más oportuno.


Artículo original en inglés, en http://dailysignal.com/2017/09/19/un-trump-ends-era-leading-behind/

 
Sobre Nile Gardiner

Es Director del Centro para la Libertad Margaret Thatcher, en la Fundación Heritage (Washington, D.C.). Es analista especializado en variadas temáticas, como la 'relación especial' entre Estados Unidos y el Reino Unido, Naciones Unidas, el Irak de posguerra, y el rol de Gran Bretaña y Europa en la alianza liderada por EE.UU. contra el terrorismo internacional y Estados autoexcluídos del orden mundial ('rogue states'), como Irán. Gardiner fue nombrado recientemente por el periódico The Daily Telegraph como uno de los cincuenta ciudadanos británicos más influyentes en EE.UU. Sus trabajos son también publicados en la web estadounidense The Daily Signal.