INTERNACIONALES - ESTADOS UNIDOS: POR ERNEST ISTOOK

Un plan para limitar la falta de honestidad en las cuentas del Congreso

Corresponde reconocer la labor de dos senadores de Estados Unidos para tratar de hacer algo frente a los trucos presupuestarios en Washington.

08 de Octubre de 2011

La “Ley del Presupuesto Honesto” del senador Jeff Sessions (R-AL) y la senadora Olympia Snowe (R-ME) va directamente al meollo de la desconfianza del pueblo en el Congreso, para ser más exactos, se trata de los deshonestos trucos presupuestarios y las artimañas contables.

El público se rebela porque demasiados “recortes presupuestarios” han resultado ser aumentos del gasto o, en el mejor de los casos, promesas de que un futuro Congreso recortará el gasto.

Claro que esta propuesta legislativa de los senadores no va a arreglar todos los problemas, pero es definitivamente un buen comienzo. Se centran en lo que calculan son unos $350 millones en trucos presupuestarios utilizados durante los últimos años por ambos partidos políticos. Su lista incluye:

  • Si no hay presupuesto, no hay gasto. Son ya más de dos años desde que el Senado aprobó un plan presupuestario. La propuesta es para evitar cualquier nuevo gasto cada vez que el Congreso no haya aprobado un presupuesto general.
  • A dejarse de falsas alarmas. Los llamados “gastos de emergencia” están fuera de los límites presupuestarios, por lo que los senadores proponen que cualquier supuesta situación de emergencia deberá contar con la aprobación de una supermayoría de 75 votos. (Como la Fundación Heritage ha señalado, “a los gastos de rutina se denominan “de emergencia” sólo para evadir los topes de gasto”).
  • Nada de falsos asaltos a la alcancía. Tenemos cientos de miles de millones en fondos no utilizados asignados en años previos, $703,000 millones fue el total a principios del ejercicio fiscal 2011. En vez de cancelar esas viejas, no usadas e innecesarias obligaciones de años anteriores, el Congreso las redirige a nuevo gasto que luego están extentas de los límites normales de gasto. Esta propuesta reduciría esa práctica.
  • Una congelación debería ser una congelación. ¿Se acuerda de las afirmaciones del presidente Obama el año pasado de que los sueldos de los empleados federales se habían congelado durante dos años? La afirmación es engañosa ya que hay una puerta falsa para que se ajuste el aumento paulatinamente en un promedio del 2-3%. Según el plan estarían congelados hasta 2013.
  • No jugar con el tiempo. Miles de millones de dólares de ingresos y gastos se “deben” presentar un día antes o después, para que sean contabilizados en otro ejercicio fiscal federal. El IRS no permitiría que los contribuyentes ignorasen el presente calendario por lo que el Congreso tampoco debería.

El plan Sessions-Snowe es bueno. Como dicen, el objetivo es, “Nada de más artimañas, trucos ni falsas promesas. Estados Unidos se merece un presupuesto honesto”.

Sin embargo, su plan no reducirá todo el enorme repertorio de trucos de Washington. E incluso si el Congreso arreglara el proceso, eso no va a arreglar la retórica – los falsos argumentos que habitualmente se hacen sobre el contenido de las propuestas de gasto. Pero hasta el viaje más largo comienza con un solo paso y el plan de los senadores sería empezar ese viaje con el pie derecho.

Por Ernest Istook, Heritage Libertad